Capítulo 12

Amanecí contracturada no me extrana seguro que es por el estres acumulado de estos días aunque recién hoy voy a arrancar con el entrenamiento,al recordarlo también recorde la cena embarazosa de anoche.Debería haber un límite por día en cuanto a momentos embarazosos ayer no solo fuí humillada sino que después la cena fué lamentable y incómoda con personas que no quisiera volver a ver, pero tenía que hacerlo ya que esta casa enorme era más bien un complejo habitaciónal que me hace recordar a una universidad. ¡La universidad ! lo había volvidado por completo tengo que retomar las clases

Antes de la hora acordada estaba lista con el deportivo usual y con una energía enorme.Quería demostrar que sí podía lograrlo y lo voy a hacer ,cueste lo que cueste y lleve el tiempo que lleve pero los voy a alcanzar y nadie recordará lo principiante que era en el inicio.Y ahora después del entrenamiento tenía que volver a hablar con Dereck sobre las clases que me estaba perdiendo mientras entrenaba. 

Una vez en la cancha troté para sacarme el frío helado que hacía,cada vez que respiraba el aire salía a vapor. Me abracé y froté los músculos para que estos se calentaran más rápido y mientras divagaba perdida en mis pensamientos como siempre una voz masuclina y ronca sono en el aire.

—Te veo distraída— Ian me sorprendío,aunque sonaba demasciado ronca el día de hoy, no había notado que había llegado .Llevaba ropa similar a la mía pero venía más abrigado con un sueter gris, sus cabellos estaban algo alborotados,seguro los llevaba así por el viento que se levantó recientemente pero de alguna manera le quedaba bien le hacia ver más atractivo sin embargo mientras lo miraba fijamente y analizaba sin darme cuentra me sonrió.— ¿Qué pasa?...ya te rendiste

Su voz molesta me estaba haciendo enojar y recién lo veía, no habíamos iniciado y ya quería tirarle con algo.

—¿Iniciamos? dije ignorando sus comentarios

—No lo sé hace mucho frío ¿no crees? ,mejor lo dejamos para más tarde— El muy desgraciado me estaba poniendo a prueba, no podía creer el nivel de idiota que podía llegar a tener solo para avergonzarme

—No importa el frío, tenemos que iniciar hoy, a.h.o.r.a—recalque la última palabra la recalque  a propósito,a mí no me iba a hacer caer.

Sonrió ampliamente, en ese momento mi corazón casi se detiene,la sonrisa le resaltó sus ojos azules y cerca de la comisura de sus labios se formaron unos hoyuelos .

—Bien—Se giro y comenzó a darme instrucciones volviendo a ser serio y distante.Carajo me frustraba que este idiota sea así.

Después del calentamiento cuando aún tenía energía de sobra puso unos obstáculos grandes y redondas llantas dejando un espacio limitado. Los acomodó todos de uno en uno perfecto hasta pararse a mi lado y hablar:

—Lo principal es la condición física, sin condición física no hay resistencia y sin resistencia no hay entrenamiento que soportes, así que vamos a iniciar con esto— mientras me explicaba se paró en la primer llanta— Tienes que hacer algo tan sencillo como esto— dicho eso comenzó saltando la y depositando sus pies en el espacio escaso que había entre una y otra.

Mientras miraba como saltaba con gracia y casi sin esfuerzo me dispuse a contar las llantas, desafortunadamente eran once y eso hacia que fuera un bello comienzo, no quería saber que venía después ¿saltar en un pie?

Cuando llegó mi fatídico turno lo imité sin embargo el primer salto lo hize bien que era mejor de lo que esperaba, no era fácil medir la distancia y saltar para caer de manera que no repercuta en los tobillos o rodillas. En cambio por el sexto ya no podía más los músculos de las piernas me tiraban y exijan que parará pero seguí saltando hasta el último ya no sentía las piernas,era igual que cuando corres después de mucho tiempo hasta que te cansas y excedes.

Me senté en el piso pero apenas apoye el trasero Ian se paró frente a mí con una sonrisa burlona.

— ¿Que crees que haces? este es solo el inicio — Nunca antes me había caído tan mal alguien con quién había hablado poco y nada— Es el turno de saltar la cuerda, como hoy estoy de humor serán cincuenta— Casi se me desencaja la mandíbula mientras lo miraba enojada, sabía que no sería fácil pero estoy empezando a creer que me quiere hacer fallar —No me mires así estoy siendo piadoso de dió la vuelta y juro que antes de girarse ví una sonrisa burlona, lo estaba disfrutando.

Hize el la secuencia pero mis piernas que apenas habían descansado les costaba mantenerse estables. Al terminar me dolía todo pero no dije nada, esperaba que seguía en la tortura del día de hoy.

— Las artes marciales son las favoritas en esta familia entre muchas otras disciplinas, todos tienen niveles altos y cuando te ví pelear hiciste que me dolieran los ojos.Ahora vamos a iniciar combate básico.

Eso dijo el pero de básico no le ví nada, no solo golpeaba con rapidez sino que si fuerza me abrumaba aunque no usaba la verdadera, no podía parar sus golpes.Perdí una y otra vez caía y caía. Era una película que se repetía y en lugar de aprender no encontraba ninguna abertura y no era por qué fuera más alto o más fuerte era por qué estaba a otro nivel.

 Después de eso la tortura termino, y cuando creí que eso era todo subí a ducharme. Intentaba calmarme pero el cuerpo me dolía igual que mi orgullo.Lo odio lo odio ese tipo me frustra en tan pocos momentos me mostró la diferencia enorme que había de habilidades entre nosotros.

No era algo que no supiera pero tampoco esperaba que fuera tan rudo, es evidente que quiere que me rinda pero no pienso darle el gusto. Toda vida ha sido descidida por los demás mientras tenía que aceptar obediente mente y de forma tonta todo pero ya no, yo también tengo que crecer y mejorar no por ellos sino por mí.

La ducha finalmente me relajo y me arroje en la cama con la energía que restaba y así quedé inconsciente mientras dormitaba sin sonar hasta que oí unos golpes que parecían provenir de la puerta.