El quinto plano

¿Será lo ultimó que la razón ha visto?, en esos rostros gigantes formando un paisaje onírico en el espacio no se sabe si hay razonamiento, en el entorno esas imponentes formas se entrelazan con los colores que emanan lirica a la retina, eran como montañas dignas de admirar, ¿Cómo pudo el tercer hombre llegar a tal espacio? Todo tiene un comienzo y raramente suele parecerse al final, comenzó con el derramamiento de pintura, eso fue el amanecer; rojo de sangre, el día se fue tornando claro y se amoldo a la moral, detrás de esa blanca mascara se oculta la oscura verdad, difícil de asimilar, más amarga que moruelas en el reinado del ya inexistente kakoíthi, tanto tuvo que ocurrir para que todo perdiera la lógica, cuanto más nos adentramos a la mente más pierde el sentido, el propósito se ha ido, ahora lo imposible es el pan de cada día, viaja por nuestros intestinos diariamente…
Así que solo lo pensé y aparecí en este lugar, mi voluntad literalmente atravesó universos y mi deseo pisoteo más a la lógica que de hecho a estas alturas ésta demasiado aplastada, los paisajes del quinto plano me recuerdan mucho a pintura combinándose y formando algo nuevo, ese momento en donde parece que la pintura ésta cobrando vida, y este es el final; un nuevo nacer, en las entrañas de la mente humana el detalle de sus creaciones vive, aquí se puede ver cada pincelada en el lienzo, cada trazo forma un metro cubico del suelo, soy la obra del hombre estando aquí.
Comencé a caminar entre la mente del hombre, había durado parado impactado y conmovido, cuando por fin di el primer paso empecé a hundirme en la creatividad, estaba hecha de un raro material era como arena movediza pero mi mente logro controlarla y salvarme, la creación del hombre domina al hombre se apreciaba esa frase en el cielo que tan pronto se desvaneció como  el arcoíris. Era un lugar donde el tiempo no se sentía, Había barrancos y cascadas descendiendo al vacío, el terreno no estaba completamente definido, la paleta de colores era psicodélica y había esferas transitando, el espacio contenía muchas expansiones 77 se divisaban con tan solo mirar hacia arriba, estar rodeado de eso era sumergirse en un trance, un lugar donde el tiempo se paraliza era la nada no importa cuánto tiempo pase ahí siempre estaré como el primer día que llegue.
 

El caminar
Comencé a explorar el territorio colorido, mirar al cielo te atraía para encerrarte en la admiración, mi cuerpo floto, me eleve a las expansiones, escuchaba violines disonantes en el horizonte y mientras los cielos me jalaban una esfera choco conmigo cuando estaba en la atmosfera y colapso con mi cuerpo haciéndome descender al vacío, le tenía tanto pavor cuando había llegado y fíjense ahora estoy cayendo hacia él, del fondo del abismo se escucha un coro interpretando el Liberame de Verdi añadiendo un poco más de terror al acto, caer se había hecho infinito, no avanzaba, la progresión se quedo estupefacta, entonces parecía que me había quedado parado en el aire, empecé a domar el viento y logre caminar mientras descendía, entonces di un gran salto para salir del bucle, una espesa niebla  empezó a cubrirme cuando escape del hoyo, me volví a quedar parado a admirar como antes lo hacía, solo puedo ver las cosas porque tan solo doy un paso y ocurre algo inesperado, ver solo me queda ver lo magnifico porque acercarse es un peligro, mi cuerpo se recostó en el denso suelo triste a observar lo elevado un cielo teñido de rosa como siempre ha estado, inalcanzable, me preguntaba si se podría morir en un mundo sin sentido, esa pregunta provoco que el miedo que en ese mundo le tenía a la muerte desapareciera en cuanto entro esa idea en mi cabeza me sobresalte y corrí con la locura motivándome hacia las figuras, un mundo amorfo moviéndose sobre sí mismo, raramente cuando corría lo hacía sin problemas y podía andar en el aire sobre la superficie y no pasaba nada, me asombre, pare de correr y me senté exhausto, mi mente se sentía satisfecha, después de caminar en lo elevado tu alma se siente tan complacida, y pensé ¿Qué pasaría si comenzara a llover en un mundo de 77 expansiones?.

Controlar
Un estruendo bajo la superficie comenzó a sonar, temblaba sin parar el suelo, y las estructuras comenzaron a desplomarse, en el cielo las esferas empezaron a girar violentamente todo el entorno fue perdiendo los colores y tornándose oscuro, cuando todo eso ocurría yo estaba parado en el único centímetro calmado del universo, comenzaron a engrandecerse las expansiones y a adquirir nubarrones grises y densos, enfurecidos contra el mundo, un espectáculo visual observar a los truenos gritando y apareciéndose, de pronto un silencio sofoco la existencia y cuando todo parecía calmarse los cielos comenzaron a gritar y soltar una tremenda lluvia incomparable, emanando gloria destructiva, el agua era tan fuerte que las gotas perforaban el suelo y solo a mí no me caía ni una gota, el suelo en donde me pare estaba intacto, al ver lo que ocurría mis ojos se conmovían, y decidí parar, le tuve lastima a un mundo desplomándose, y sentí una compasión al ver a todo desplomarse a causa de la lluvia, entonces tuve el deseo de que la calma volviera y en cuanto esa idea fue concebida en mi mente el universo se tranquilizó porque las expansiones habían dejado de tirar agua, entonces comprendí que tenía el poder de dominar ese mundo, sus formas, sus colores y en cuanto me di cuenta de eso me aterre, nunca antes había tenido tanto poder en la mano. Comencé a controlar esas formas, las deformaba las volvía a formar, los colores los distorsionaba, acercaba lo lejano y elevaba lo profundo, con solo pensar algo eso ocurría, entonces en mi segunda mente comencé a pensar en todo lo que podía suceder si por mi pensamiento pasaba una mala idea, empecé a imaginarme y ver tantas atrocidades sin embargo esos pensamientos no se llevaban a cabo porque estaban en mi segunda mente, me senté a descansar y mi cuerpo se postro en la meditación, con mi mente atraje las esfera para sentarme en ellas, me puse a contemplar ese universo que todavía me costaba creer que yo lo controlaba, pero dentro de mi sentía algo, en los riñones de los riñones, en lo profundo de mis ideas sentía envidia porque sabía que toda la magnificencia que yo controlaba no la había creado yo, así que mi voluntad se llenó de un deseo a crear algo mío, algo que superara el lugar que estaba pisando, para probar mi poder decidí atraer a absolutamente todas las esferas que estuvieran flotando, me eleve con una pose poderosa, mi anatomía era delirio glorioso flotando con ira, un gran sonido provino de lo lejano, un estruendo, que poco a poco se hacía más fuerte, entonces empezaron a llegar esferas de todas partes, de los dieciséis vientos provenían, se comenzaron a saturar mientras mantenía a todas las miríadas de esferas flotando con solo pensarlo, ¡era yo tenía que ser yo el que creo esto y no me acuerdo! mi segunda mente comenzó a decir eso en mis adentros.