El recuerdo de un amor

Capítulo 14

La noche buena junto a la familia fue especial, la fogata encendida, los chocolates calientes encima de una mesa, algunas galletas y todo tipo de postre; cantamos villancicos e hicimos la cena. Los abuelos contaron anécdotas de sus vidas igual que el resto de la familia. Derek se había quedado junto a su familia en Ashland a pasar el año nuevo, mientras que junto a mis padres estábamos en casa de Anne.

El lugar estaba lleno de personas, algunos eran conocidos y otros completos extraños. Anne se encontraba junto a Mike hablando en una de las esquinas y parecían estar coqueteando, él era hijo de uno de los trabajadores de la compañía, desde que habíamos llegado a Minnesota son conocíamos, pero nunca fuimos cercanos.

En vez de acercarme a ellos preferí ir por un plato de comida y servirme todo lo que quería, aunque había tenido que ocultar un grano con maquillaje por haber estado comiendo tanto chocolate, era algo en contra, si comía chocolate la cara se me brotaba después, pero eso no impidió que colocará una porción de torta de chocolate y algunas cosas.

Me senté en una de las sillas que estaban cerca de la mesa y empecé a devorar todo. Mis padres estaban junto a los padres de Anne riendo y hablando. Aparté la mirada hasta donde estaba Anne, Mike le dijo algo en el oído que hizo que ella se sonrojara, y por su piel blanca se notaba más.

Mi teléfono sonó y lo revisé.

Arthur: ¿Te paso buscando a las doce?

11:45 pm

Cuando regresé de Ashland habíamos hablado y solucionado las cosas. Él aceptó que fue estúpido haberse enojado por verme escribiendo con Derek, después de comer en la misma cafetería de nuestra primera cita, caminamos por la ciudad agarrados de la mano. Para luego en la noche ir a las carreras ilegales donde compitió y ganó otra vez. Las cosas iban bien, ese día me había invitado a una fiesta en casa de sus amigos, a la cual había aceptado a ir.

Layla: Si.

11:45 pm

Respondí y guardé el teléfono.

—¿Comiendo sola? —cuestionó Chloe, mientras se sentaba a mi lado.

—Sip —respondí enmarcando la p.

—Te han cambiado. —Volteé a verla y señalaba a Anne y Mike —. Esos dos llevan hablando desde hace rato, prácticamente has pasado la noche sola. Anne ya te cambio por el idiota.

Solté una carcajada.

—Solo están hablando. —Alcé los hombros—. Eso no tiene nada de malo.

—Si hablar es coquetear, entonces coquetear es hablar.

—¿Tan mal te cae Mike? —cuestioné.

Gruñó.

—Que no te engañe, esa cara de niño bueno que no rompe un plato es solo eso, una cara. Antes de que llegaras estaba besuqueándose con alguien en el patio de la casa. Y quizá no te diste cuenta, pero cuando te acercaste a ellos, te comió con la mirada —la miré confundida y ella asintió—. Ahora está coqueteando con Anne y ella sonrojándose.

En mi boca se formó una O. Giré el rostro y miré a Mike agarrarle la mano a Anne y ella sonreír como tonta.

—Yo sé que Mike es hombre de una sola noche —prosiguió—. Él está vestido de cordero, pero debajo de esa piel, habita un lobo que quiere comerse a la caperucita —me miró—. Por eso que ni se le ocurra seducir a Anne, o lo golpeó; mira que se kung fu.

Sonreí ante su comentario.

—No odias a tu hermana tanto como pareces hacerlo.

Hizo una mueca.

—Anne es increíble, Layla, ambas lo sabemos. —Pasó las manos por su rostro—. Pero a veces puede llegar a ser insoportable, así que mantengo algo de distancia. Eso no quiere decir que no la quiero, porque mentiría si dijera que no lo hago. Anne puede llegar a ser empalagosa, a veces creo que irradia felicidad hasta por los poros.

Solté una carcajada.

—Interesante táctica.

—Lo sé, soy todo un genio. —Miró sus uñas y soltó una carcajada, a la cual me sumé.

Chloe era diferente a Anne, su cabello era castaño claro, sus ojos verdes con rayas azules y amarillas —como los ojos de un gato—. Sus rasgos eran delicados y sutiles, para tener sólo quince años era bastante atractiva.

Volteó hacia mí y sonrió tiernamente, para luego agarrar un cake de chocolate y salir corriendo.

Abrí mi boca para protestar, pero la señora Foster habló:

—Por favor acérquense, la cuenta regresiva ya va a comenzar.

Me levanté, dejé el plato vacío en la mesa y caminé hasta donde estaban los adultos; me coloqué en medio de mis padres y los rodeé con los brazos, Anne se posicionó al lado de su madre y Chloe al lado de su padre, sonrió al verme y la miré mal. La cuenta regresiva se escuchaba en la radio y todos contábamos a una sola vez.

—Cinco. Cuatro. Tres. Dos. Uno ¡Feliz año nuevo! —gritamos todos juntos.

Abracé a mis padres y les dije feliz año nuevo. Me acerqué a Anne y la abracé —hice lo mismo con sus padres y su hermana—. Mike abrazó a Anne y luego me abrazó a mí, luego a la persona que estaba detrás de mí.



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En el texto hay: amor, amistad, tóxicos

Editado: 20.06.2021

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