Mirando las estrellas

El sentido de la fe es ver luz,

por más que lo único que

los ojos ven sea oscuridad

Arthur, un comandante de la nave estelar colonizadora B8, de la naciente democracia intergaláctica humana, estaba junto a Gruik un humanoide autóctono de un planeta tribal de Alfa Centauri, mientras… una turbulencia sacudía la nave con un extraño chirrido, la mayoría de la tripulación colonizadora en estado de criogenia, descansaba plácidamente.

Dice Arthur -Que me dices Gruik, ¿qué es ese ruido?

– Son los espíritus del cosmos Arthur, no están aprobando los métodos de “colonización de la humanidad”, solo se dedican a esclavizar a los habitantes tribales de los planetas aptos para la vida humana, y los obligan a trabajos forzados para armar la colonia democrática, no teniendo ellos ni voz ni voto, y siéndoles expropiados de su cultura y costumbres.

- Si Gruik pero la historia demuestra que una vez asimilados empiezan a ser tenidos en cuenta a mediado de los siglos y tratados como igual.

 -En verdad no Arthur, son asimilados y marcados como raza inferior, y considerados ciudadanos de segunda.

- Gruik realmente exageras…

- ¡¡Escuchaste eso!!, otra vez ese ruido Gruik

,- Acostúmbrate Arthur no somos bienvenidos aquí…¿La humanidad no consideraba que las estrellas eran dioses, que influenciaban en la vida humana para bien o para mal, no es así?

- Si tienes razón.

- Bueno estamos en la constelación del Dragón, tanto benévolo en oriente como maligno en occidente de tu planeta natal, y no dejará pasar por alto ésta colonización, ahora deberemos descubrir si es lo uno o lo otro… voy a ir a dormir Arthur, nuestro destino igual está marcado por las estrellas, toma bebe esto así te relajas, es una bebida que te pondrá en contacto con el cosmos.

Tomo la bebida, miro mis manos y todo igual, controlo mi ritmo cardíaco y va bajando, es una bebida que produce sueño supongo, iré a la cúpula superior de la nave y veré el cosmos, a ver si me dice algo… el sueño me gana, dormiré.

Veo como las estrellas titilan y se mueven en sigsag, como si estuvieran llevadas todas por un arroyo, y la espuma del arroyo son las estrellas, entonces empiezan a formar la figura de un dragón por medio de rayos que viajan por el cosmos, y llevan mi alma a viajar con él, mi alma se entregada al viaje del dragón, descubre que era benévolo, menos mal sino estaba condenado, así lo sentía mi alma, a la cual lleva por el espacio hasta el planeta que estábamos por colonizar, y siento como si el espíritu me dijera – ¿que quieres de él?- Y yo le digo – un nuevo comienzo- Entonces veo como las eras pasan en el planeta, eras volcánicas de inicio del planeta, hasta que aparece agua en un viaje del que transcurren millones de años, y empieza a ver vida vegetal, y los milenios siguen pasando, entonces el miedo me invade, y pienso que si siguen pasando las eras voy a llegar a la extinción del planeta, el Dragón percibió mi miedo y decidió hacerme habitar en el planeta, qué a esta altura, estaba habitado por humanos hasta llagar a la edad medieval, y siento como algo me apreta en la cara, era una máscara, una máscara de hierro, mientras estoy forjando una espada para un rey noble, a esta altura me doy cuenta que estaba en la vida de un forjador de espadas, que le habían tapado el rostro con una máscara de hierro por alguna desconocida razón, y este mundo era un mundo alternativo a semejanza de la Tierra, en la edad del 500 después de Cristo. Si después de Cristo.