CAPÍTULO VI

Primera Parte.

Continuación...

El cielo y la tierra parecían distante, e indiferentes del sufrimiento que acontecía ante la lejanía y la soledad al ser separados. Pero la verdad tras aquél dolor profundo era mucho más entero, hondo. Y para Jacob implicaba una única cosa, una sola idea que rondaba su mente.

- Joven, Bélanger. - le llamaron.

Al escuchar se volteó y contempló al hombre que le veía expectante.

- Le espera el Duque. - comentó.

Abstraído asintió con semblante sereno. Sin embargo, no movió ni un sólo músculo, no antes de observar el árbol frondoso frente a él, y tener el último pensamiento. El de un día cálido, ambos sentados bajó la sombra de aquel sauce, con ella en su regazo meciendo sus cabellos en la brisa fresca, juntos. En la calma y el silencio.

Dio un respiro profundo antes de girarse y entrar a la estancia.

Dejando atrás el recuerdo marchito, junto a un sentimiento vivido.

Ambos, juntos, en la calma y nitidez de su alma. En la paz y eternidad de su amor.

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Holi, holi. Espero todos se encuentren bien en casita. Y espero y hayan pasado unas felices fiestas.

Espero que este sea el año para todos. El año para poder reencontrarnos. Para crecer.