A ver, empezare con esto.¿Se puede saber?.¡¿Que carajos haces aquí?!, enserio, tantas cosas interesantes que podrías estar haciendo, tantos libros con mejor contenido y filosofía que este, y tu elijes este, con todo y ese ¡estúpido nombre! de libro de auto ayuda aburrido y predecible que hace que la mayoría de los lectores decentes no lo lean y lo más sorprendente no es eso, lo mas sorprendente es que después de cuatro lineas de constantes insultos aun sigues aquí y por eso te daré un enorme ¡GRACIAS!. Pero si de verdad vienes aquí buscando ganas de seguir viviendo, déjame decirte amigo/amiga, viniste al lugar equivocado. Este libro no te hará querer vivir te hará querer matarte...pero solo a veces, el resto tendrás dos opciones: o te meas de la risa o te enojas y dejas de leerlo. Como sea, me da igual lo que elijas.
Y esas dos únicas opciones me recordaron algo.
Son casi exactamente las dos opciones que me dio mi familia al hacerme entender que, quisiera o no, debía soportarlos. Te explico. De entrada soy orgullosamente venezolano, así es, provengo del país de las mujeres mundialmente reconocidas como las más hermosas, el país que vio nacer al (pequeño pero peligroso) "Libertador de 6 naciones Simón Bolívar", si, el país que al momento en que escribo este texto atraviesa la peor crisis económica jamás antes vista y también el país en el que el "bullyng",no existe... y ¿por que digo que no existe?, ¿acaso sera porque no existen personas que tratan de abusar de las otras por su tamaño,color de piel, rasgos físicos y forma de hablar?, pues no amigos, si existen como en todas partes del mundo a las que se pueda ir, el único detalle, insignificante detalle es: Que todos los venezolanos somos así. Si, así es, todos, desde el vientre de nuestras madres e incluso desde las bolas de nuestros padres, es algo genético el ser un abusador, va implícito en nuestro ADN, aquí el más delgado se mete con el más fornido, el mas bajito con el mas alto y viceversa. Aquí cuando vas a la escuela y por primera vez el niño grande del salón se mete contigo, te pega y tu llegas llorando a casa contándole todo a mamá esta te dice "Al que usted le de un coñazo(forma vulgar de decir golpe en Venezuela) usted le devuelve dos pa' que no sea marico... es más mañana te llevo a la escuela y apenas veas al carajito ese(manera despectiva de referirse a un infante, persona menor que tu o contemporánea pero de edad joven) le clavas sus coñazos y si te jode más atrás te jodo yo para que no seas aweboniao, porque coño uno no te anda diciendo que vallas por la vida jodiendo y echándole coñazo a todo el mundo pero tampoco es que te vas a estar dejando joder por todo el mundo". Y así, tu llegabas con tu madre al colegio, buscabas al grandullón (con mas miedo de lo que tu madre pudiera hacerte de lo que el podría ), le dabas una buena tanda de coñazos sorpresa, el chillaba, llamaba a la maestra y cuando esta llegaba aparecía tu madre con cara de "Mike Tyson" y te defendía de la maestra y ahí acababa todo el problema al día siguiente el grandullón ya era "tu mejor amigo". En resumen, el "bullying" en Venezuela no es un crimen, es la vida misma y esto hace que sonriamos hasta en los peores momentos, pues siempre habrá un doble sentido, un lado gracioso, y si no lo tiene pues se le inventa, tan sencillo como eso.
Volviendo al tema principal. Ya explicado todo el asunto de mi país de origen y el hecho de que todos los venezolanos somos expertos en meternos los unos con otros sin dañar una amistad, queda sobreentendido el "como es la típica familia venezolana". Y he aquí el dilema, a las demás personas puedes decirles y hacerle lo que se te venga en gana (siempre y cuando soportes el contraataque fijo que se te viene luego) , pero a tu familia...¡ay la familia!, a la familia se le debe cierto rango de respeto, que te obstruye de responderles debidamente, y en caso de que como yo, puedas responderle al menos a tus tíos déjame decirte que jamás, jamás podrás ganarles, y por ser seres muy cercanos a ti sabrán exactamente como sacarte de tus casillas, es como un talento innato que tienen, es la naturaleza misma de su existencia.
Verán, recuerdo que cuando me fui a vivir con mis abuelos maternos para terminar el bachillerato y ayudarlos a atender la licorería familiar, yo era el tipo de personas a las aquí en Venezuela llamamos "picao"(persona que se molesta por cualquier tipo de juegos sin importar lo pequeños que sean), por todo me errechaba (enojarse mucho), y en ese pueblo tan pequeño (pueblo chico infierno grande) en donde todos se conocen y no sabes a que chica tirarte porque de la nada te dicen es tu prima segunda, todos se chalequean (se joden la paciencia) y se tienen apodos, en mi familia todos tenemos apodos, el mio es "CHICHARRO", en referencia a un insecto que aparece entre los meses marzo y abril, pero esa es otra historia la contare luego (ni lo sueñen)... bueno, el hecho es que yo aceptaba nada más que mi familia y algunos amigos me dijeran así, si alguien que no perteneciera a quienes yo les permitía decirme así, me lo decían pues... llegaba yo como perro rabioso a decir una enciclopedia completa de insultos y a veces lanzaba algunos coñazos, al ver que yo reaccionaba de esta manera me convirtieron en "la sopita"(una expresión utilizada para decir que siempre sale jodido) y el apodo ahora no era solamente "CHICHARRO", no, ahora eran "CHICHARRO", "CHATARRO", "CACHARRO","CHICHARRA", "CHATARRA",etc. Llego el día en el que yo, ya cansado de la webonada (palabra utilizada para denigrar cualquier situación, actitud, u objeto también está webonadita que es una webonada más pequeña), armo mi reclamo y le digo a mi tío "O", y este me respondió de la siguiente forma :
Editado: 30.07.2019