Capítulo 1 Una Reunión Muy Inesperada.

Capítulo 1

Una Reunión Muy Inesperada.

Cuando el Señor Vil-bo Bolsero de Bolsón Cerrado anunció que muy pronto celebraría su cumpleaños senteci... no, centedimodecimo…, centésimodiez y… 101, ya!.

Con una fiesta de especial magnificencia, hubo muchos comentarios y excitación en Lomitón. Más que nada porque los Rabbits, al igual que el señor Bolsero, no perdían la oportunidad de comer gratis, y si era posible, llenarse las  enormes panzas con comida ajena.

Muchas habladurías habían corrido en torno a Vil-bo desde que había vuelto de su viaje con los Enanos. Muchos decían que había traído grandes cantidades de oro de un país lejano (lo que era cierto), otros tantos decían que se había cambiado de religión, otros decían que se había teñido el pelo y muchos otros rumoraban una liposucción y nuevos implantes.... A saber donde estuvieran.

En buenas cuentas todos esperaban que a los ciento once años de edad, Vil-bo comenzara a chochear un poco y metiera la pata en su discurso de cumpleaños, por lo que prestaban poca mucha atención a lo que Vil-bo iba a decirles.

Pero la situación era especial. Incluso Gandulfo había preparado maravillosos fuegos de artificio, los cuales habían sido preparados para estallar en los cielos en una asombrosa lluvia de colores y formas. Lo cual no ocurrió, ya que uno de los rabbits arrojó los restos de un cigarro que había estado fumando, sobre los explosivos, dinamitando buena parte de la mansión de Bingo y los petroductos de PEMEX junto a las Gaseras de San Juanico, haciendo volar por los aires el 58% de Bolsón Cerrado, junto con 62 rabbits desprevenidos, un montón de civiles no identificados y un idiota que no supo prender un boiler, quienes estallaron en los cielos en una asombrosa lluvia de colores y formas.

Pero a pesar de este incidente, la reunión continuó desarrollándose sin problemas, estaban tan drogados que, después de todo, no era algo importante que hubiese algunos muertos (y aún hay quien se pregunta porque están casi extintos estos imbéciles). Los Rabbits reían, cantaban, fumaban todo lo fumable (incluyendo un librero de madera que hicieron pedazos para este fin), e iban a esconderse tras los arbustos en parejitas improvisadas, no siempre heterosexuales. Vil-bo se incorporó. - Mi querido pueblo... - comenzó. - Mis queridos Bolsero y Boffin (chiflidos de FI FI FI FI FIIIIIII !!). Y mis mas queridos Tuk y Bolder (más chiflidos e insultos a la madre de los mismos), Y Brandigamo (otra ovación) y Soto (chiflidos y mentadas). Mis queridos Tolsá, Sánchez, Pérez, González, Ramírez... Estimado Capitán del Cuerpo de Bomberos... Autoridades Políticas, Eclesiásticas, Civiles y Militares...- [Léase con tono de discurso militar]. Vil-bo continuó: Bien... los he reunido hoy porque... Hoy cumplo CIENTO ONCE AÑOS !!

- ¿ Y ? - Respondieron todos al unísono.

- Bueno, pensé que era algo importante....

- ¿ Y para eso nos llamaste ? ¿ Sólo ciento once años ?

- ¡ Es una buena cantidad ! - afirmó molesto Vil-bo. La gente comenzaba a marcharse, drogada y llena.

- Pero además - prosiguió - los convoqué porque también hoy es el cumpleaños de mi sobrino y heredero Flojo Bolsón. Hoy entra en la mayoría de edad y en posesión de la herencia.

Los Rabbits elevaron rápidamente sus orejas levemente puntiagudas ante la sola mención de la palabra "herencia" y del heredero, un tipejo mal vestido y taaaaaaan flojo que ni siquiera se había dignado venir a la fiesta, y del cuál se rumoraba mucho sobre su origen, y aún más sobre su destino..... Y muchísimo más sobre su vida sexual desenfrenada y la aparente “cercanía” con el degenerado tío.

- Juntos sumamos ciento cuarenta y cuatro años. El número de invitados fue elegido en un principio para corresponder a este notable número… Y ustedes re-cabro·$eZ, se han encargado de rebasar esta cifra con una muy buena suma de gorrones y gente no invitada, en resumen ¡Son un montón de huevónes! - si se me permite la expresión.

- Y el otro motivo es para decirles que ciento once años es muy poco tiempo para pasarlo entre rabbits tan maravillosos como ustedes. - Sonrío irónicamente-. Todos muy amables, simpáticos y cariñosos. Serían perfectos si no fueran tan hipócritas, ladrones, políticos corruptos, estafadores, usureros hijos de la gran... [ El resto del discurso de Bingo es irreproducible, por lo que no se puede reproducir. En realidad si se puede reproducir, pero muchos de los insultos eran de tal gracia y agudeza que no tendrían sentido para ustedes, yo como lo estoy inventando todo a la carrera y lo escribo conforme lo voy inventando, sí lo hubiera entendido… Digo, si me esforzara por hacerlo, pero la verdad a veces soy tan creativo, que me da un poco de humildad al imaginarme el dichoso discurso y tratar de redactarlo para que todos lo entiendan en su conjunto de letras de picante ingenio, malévolo doble sentido y un toquecito de  no-se-que para que nadie sepa que-se-yo. Podemos resumirlo en exactamente 38 palabras, cuéntenlas: “Hubo numerosas alusiones a las madres de muchos rabbits, alusiones a las hermanas y también otras ingeniosas y agudas acusaciones con las que ponía en duda la paternidad de muchos niños Rabbits y la sexualidad de casi todos”. ¿Ven?, exactamente, 1, 2, 16… 37, ¡38 pinchurrientas palabras! ]