La pelea con Fritzy.

Al terminar de recitar su poesía del navegante, Yurik estaba tan emocionado que sintió ganas de estallar y aun así como estaba de descalzo, a medio vestir y desarmado, inició una loca carrera a pie sin rumbo fijo ni dirección, hasta que se topó con la muralla y al llegar a ella de un ágil salto con la punta de los dedos de sus manos, alcanzó los bordes de la pared e impulsándose con los brazos la cruzó cayendo de pie del otro lado, los guardias al verlo, sin comprender la situación dieron la voz de alarma mientras se perdía en la oscuridad del Valle de Mirídia; Raiza atónita intentaba seguirlo pero ella no supo cómo saltar la muralla, y se dirigió a las puertas donde ya los guardias nocturnos la esperaban y al llegar, le preguntaron: 

  -¿Qué le pasa al guerrero de la profecía?

  -¡No lo sé!

Le contesta Raiza a Emir que era uno de los guardias nocturnos.                                                                                             

  -Dormía tranquilamente y creo que un sueño lo trastornó.

  -¡Debió ser una pesadilla! –le comenta Emir y Raiza le pregunta.

  -¿Hacia dónde se fue?

  -Hacia el Norte, traté de seguirlo con la vista pero se perdió en los pastizales, si sigue derecho podremos interceptarlo al entrar al Bosque de Eoz, o antes de que se interne en el Laberinto de Espinas. –le contesta Sirú otro de los guardias.

  -¡4 de ustedes me acompañaran! Uno se queda a formar patrullas de búsqueda y rescate; ¡Es sumamente importante que no llegue al Laberinto de Espinas, tenemos que encontrarlo porque dejó sus armas y el valle es muy peligroso de noche!

Diciendo esto partió escoltada por 4 de sus guerreros del viento en busca de su ángel compañero, mientras éste corriendo sin rumbo fijo ya se había alejado mucho de la ciudad, agotado y lastimado de sus pies descalzos se detuvo a tomar aire, arrodillándose en el suelo con la cabeza agachada, se acordó de su amiga la estrella solitaria y la buscó en el cielo sin encontrarla, ya que algunas nubes cubrían el cielo, se revisó los bolsillos por costumbre, dándose cuenta de que no traía sus cosas, solo encontró el celular colgado de su cuello y su cinturón con la navaja 07 rodeando su abdomen.

  -¡Diablos! Dejé todo; ¿Así o más imbécil? Ahora Raiza y toda su gente pensarán que estoy loco o tal vez lo estoy, si no hubiera perdido la memoria yo creo que nada de esto me estaría pasando.               

Pensando en esto tomó su celular y lo encendió, seguía marcando dos barras de batería y ninguna de señal, al aparecer el comando sin servicio, hizo un gesto de desaliento, de repente recordó que el aparato contaba con buscador de redes y se puso a buscar la programación del buscador en las opciones, y al acceder al menú apareció primero la barra de contactos y la abrió, una lista de nombres comunes y otros extraños apareció. 

  -¿Memoria? ¡Sí, mi celular tiene un chip de memoria y estos nombres deben de ser de gente que me conoce! 

Y se puso a revisar la lista tratando de asociar los nombres con sus recuerdos.

Billy

Blade.
 

Cruela Deville

Edgar

Ever

Eterna

Lalo

Luz de Media Noche

Luz de Luna

Manuel

Pocahontas

Sukey

Thala

  -¡Diablos! –pensó al leer la lista.  -Son muchos nombres y además raros; ¿Qué tendrán que ver conmigo? –y se la saltó para activar el identificador de redes.

  -Aaaahummmm.

Se escuchó un lamento salido de la oscuridad de los pastizales.

  -¡Tututu, tututu, tututu!

Sonaba a la vez su celular indicándole que había localizado una red marcando 5 barras de señal, sin dejar de poner atención al aparato escudriñaba la oscuridad a su alrededor.

  -Aaaaaahuuuuummmm.

Volvió a escuchar el lamento que ya se apreciaba más cerca, con su mano diestra desenfundó la navaja 07 y al escuchar que algo se abría paso entre los pastizales dirigiéndose hacia él, permaneció quieto escuchando atento.