Capítulo 23: Grandes Problemas

Universo: Desconocido

Ubicación: Gran Biblioteca Espacio Tiempo

Año: 2034

El siguiente escenario está conformado por miles de estantes de madera que miden más de cincuenta metros de altura que se están destruyendo de forma extraña, apreciándose que algunos libros y pergaminos; flotan en el aire completamente inservibles, ya que su contenido está completamente incendiado de forma extraña. Parece que alguien los está incendiando; misteriosamente.

Abriéndose un portal en medio de la gigantesca biblioteca espacio tiempo, para emerger la Deidad Única junto con Hastur, comenzando Hastur a ver hacia su alrededor; completamente triste por la completa devastación que está sufriendo la gran biblioteca.

—Este lugar… —dice Hastur, quedándose callado por unos momentos, ya que observa a lo lejos que; un gran estante se destruye por completo.

Comenzando la Deidad Única a avanzar hacia una determinada dirección; completamente triste.

—Este edificio es inservible y no podemos hacer nada para restaurarlo —informa la Deidad con su voz dual, añadiendo—. Será mejor que te prepares para la guerra contra Ginjo.

Volteando hacia la dirección de Hastur mientras que él inclina su rostro tristemente.

—Sí, su majestad. —comenta Hastur, comenzando a llorar silenciosamente por la pérdida del edificio.

Dirigiéndose Hastur hacia una dirección para invocar un portal y desaparecer a los pocos segundos.

La Deidad Única, dándose cuenta que se encuentra completamente sola en la inservible Gran Biblioteca, avanza hacia una nueva dirección.

Pasando por varios pasillos destruidos y agrietados de forma extraña, pudiéndose apreciar que el piso; se está deteriorando. Confirmando la Deidad que el edificio, ahora es inservible, gracias a la fuerte amenaza que se acerca.

Llegando la Deidad Única a la puerta del salón especial de las almas para detenerse mientras que observa la puerta tristemente, sabe que todo está perdido y que deben de esperar al dueño del edificio para que trate de resolver el problema. Una situación bastante complicada en un momento crítico como es la guerra contra Ginjo.

Decide dar un gran respiro para dirigir su mano derecha hacia la puerta de la habitación especial, abriéndose la puerta sin la necesidad de que él la toque para comenzar a entrar. Logrando apreciar la Deidad que miles de esferas de diferentes colores; deambulan libremente por toda la habitación inimaginable.

Decidiendo la Deidad, cerrar la puerta para que nadie pueda entrar a molestar.

—Tantas almas en peligro, necesitamos tropas especiales para que vengan a protegerlas —dice en voz baja la Deidad, comenzando a avanzar mientras que miles de esferas; se apartan de su camino.

—Así que has decidido entrar a esta insignificante habitación —suena la voz de una mujer.

Sorprendiendo a la deidad única en ese momento.

—¡¿Quién es?! —inquiere la deidad.

—Hmm, el salón de las almas. Un lugar insignificante de la biblioteca, pero es bastante importante para todos —suena la voz de la extraña mujer, ignorando la pregunta que la Deidad había hecho—. Ahora que lo veo, hace poco logré sentir una fuerte aura mágica, hmm, excelente.

Comenzando la Deidad a observar hacia su alrededor completamente enojado, ya que puede sentir una presencia bastante poderosa y maligna que supera con gran facilidad a Satanás (*).

Dándose cuenta él que las esferas de las almas; se acercan hacia él, rápidamente.  Entendiendo la Deidad Única que; todas pueden sentir el miedo de esa presencia maligna.

—¡¿Satanás?! —inquiere la Deidad Única mientras que escucha las risas de la extraña chica.

—Jajajajaja. Ese inútil ya no es nadie para mí.

Invocando la Deidad Única una gran espada para poderse defender.

—¡¿Dónde estás?! —pregunta la Deidad, preparándose para el combate—. ¡¿Qué le hiciste?!

Comenzándose a escuchar las risas de la extraña chica por unos momentos para que finalmente; ella se calle.

—Solo falta poco para que la detecte nuevamente, hmm, se encuentra hacia la dirección de Francia, hmm, posiblemente sea Rusia o Japón. Jejejeje, pero aquí deben de estar los dos malditos Creadores Supremos, aunque… Posiblemente hayan muerto, hmm —suena la voz de la chica extraña.

—¡¿Francia, Rusia?!

Comenzando la Deidad a preocuparse bastante.

—Hmm, vaya. Realmente esto es bastante agotado y necesito asesinar nuevamente a muchos para poder usar este poder o posiblemente; lo logre con el alma de un Ser Supremo Definitivo —suena nuevamente la voz de la extraña chica, añadiendo—. Excelente, acabo de adueñarme de toda la información de la biblioteca.

Asustándose bastante la deidad única en ese momento.

—¡No, espera! —grita la Deidad, empujando a varias almas de forma drástica mientras que avanza unos cuantos pasos—. ¡¿Qué acabas de hacer?!

Volteando hacia su alrededor completamente enojado.

—Muchas gracias por su intervención, me sirvió bastante para probar este poder nuevamente, jejeje.

Ya no sintiendo la Deidad Única, la presencia maldita de la futura enemiga, pero se da cuenta que; existe un enemigo que supera a Ginjo con gran facilidad, ya que tiene mucho más poder que Satanás y él juntos.

«Es imposible, su presencia acaba de desaparecer misteriosamente. No cabe duda que es mujer por el sonido de su voz, ¿una especie del planeta tierra? ¿Otro ser supremo definitivo? », medita la Deidad, comenzando a dirigirse hacia la salida—; «Se pudo detectar su presencia maligna y era más fuerte que Satanás, la forma en que se expresaba y sabia los detalles acerca de los Supremos Creadores Definitivos ».

Recordando en ese momento la capacidad que tienen algunos dioses bastante poderosos.

—Es imposible —dice la deidad, deteniéndose en su lugar antes de salir de la habitación de las almas—. ¡Tiene la capacidad de ver cualquier lugar!