¿Es su trabajo? ¡Me importa un carajo si es su trabajo! Yo deje mi puesto allá en un desorden que me será cobrado de mi sueldo. Ya tengo suficiente deudas para agregar una más a mi triste lista. Creo que ya debo hasta mi alma.
Es obvio que un secuestrador no te va decir. ¡Buenas noches mi nombre es...! Pienso secuestrarte hoy y te voy a llevar al bosque!... etc, etc. No discuto que nuestra prioridad es huir de los animales salvajes que nos siguen. Tengo la impresión que no quieren tomar una tacita de té... en otras palabras mi secuestrador es mi salvador.
El chico Cosplay empieza a moverse en zig zag cortando en el tronco de varios árboles. Después caen encima de varios animales y obtruyendo el paso de los que sobreviven. Fue una gran estrátegia.
-¡Disculpa mi insistencia brillante caballero de fantasia! ¿Adonde vamos?- Le vuelvo a gritar.
La armadura que pense que era de juguete es realmente de metal y me está molestando mi cuerpo. Ya estamos demasiado profundo del bosque... de aquí no podre regresar sola en toda la noche. Me estoy afligiendo un poquitín.
-¡Pronto lo sabrás!-
Siempre me imagine que un día alguién me cargara como a una princesa hacia su precioso castillo. En cambio me cargan como un costal de verduras. Los lobos desaparecen en un momento y él se detiene escuchando el aire.
-¿Qué sucede?- Murmuro
-¡Shiiiiiiiii!- Me dice a mí. Juro que cuando estemos a salvo lo haré papilla.
Pero un lobo sale del aire y él brinca cortandole la cabeza. ¡Sópalas! ¡Eso fue alucinante! Brinca hacia un árbol y me suelta. Al fin razonó que conmigo en sus hombros es difícil pelear. Me abandona y baja para continuar eliminando a los animales.
Otro lobo aparece a la izquierda queriendo incrustarle sus dientes en su cuello. ¡Yo casí gritó del susto! Es tan ligero como una pluma y fácilmente se eleva en el aire y se deja caer, hundiendo su espada en el lomo. Aún tengo mi bate en mis manos pero con estos animales no creo que funcionen mucho.
No me muevo del lugar porque sólo causaría problemas. Un lobo gruñe en el suelo y empieza a golpear mi árbol y yo pierdo el equilibrio. ¡Tonto lobo! Mi bate le cae en su ojo y parece que le distrajo de querer brincar y morderme por unos segundos.
El árbol es lo suficiente fuerte y grande para subir mas alto. Entre más distancia del animal menos propensa a que me convierta en su aperitivo de medianoche. El chico Cosplay continua abajo luchando con otro lobo pero regresan los hombre raiz.
Las ramas me tapan un poco pero y la luz de la luna no me ayuda. El hombre se convierte en un remolino dando vueltas y su cabello flota brilloso en el aire y los corta sin problemas. No tengo palabras para describir como parece algo muy bello de ver.
El lobo sigue gruñendo y ladrando. Toma impulso y está golpeando mi árbol para quebrarlo. Yo abrazo el árbol con la esperanza que resista los golpes pero escucho el sonido que algo se esta quebrando.
-¡Ángeles del cielo abran sus brazos para mí! -¡San pedro atrápame que no peso mucho!-
Digo rezando... porque es la única manera de soltar mis nervios. El árbol esta apunto de caerse un golpe más y se acabuche Erika.
-¡Erika!- Gritá el chico Cosplay... corriendo hacia el árbol.
Una nube aparece frente a él, se convierte en un hombre con armadura negra y espada en mano. Posee una cabellera larga de color negro y piel blanca como la leche. ¿Todos son tan lindos? ¿Acasod vienen de un mundo de super hombres?
En un segundo y el chico Cosplay es atacado pero es mandandolo a volar lejos. El árbol recibe el último golpe y cae conmigo abrazandolo.
-¡Ahora si me llama la tierraaaaa!- Maldigo gritando...
Cuando alguién me jala de atrás y me despega del árbol antes que caiga por completo. Cuando abro mis ojos, estoy colgando en el aire a metros de distancia. Miro arriba y apenas soy sostenida con una mano por mi falda rosa. No va durar mucho antes que se descosa. No puedo ver bien a la persona pero si escucho su voz.
-¡Esto es tan fácil! ¿Creíste que la salvarías? ¡Me das tanta risa! Ja ja ja ja-
Asumo que es el villano de la historia y le esta hablando a su rival. Quiere que me vea caer. Sin embargo el hombre me levanta y acera mi cara a su rostro. ¡Es divinooooo! ¡Aún con esa expresión agria es ta super wow! ¡Erika concentrate! ¡El tipo te quiere matar!...
-¡No eres nada!-
Me dice con una voz corta hielo. Mirandome como si me conociera de toda su santa vida. ¿Qué se ha creído? Parece que le repugno. ¡Otro hombre que se cree la mama de tarzán! Me tienen fastidiadas los tipos así.
-¿Acaso te pregunte? o Estas habando de tí mismo...-
Lo miro directamente sin desviar ni un segundo la mirada. No encuentro nada de vida a sus ojos, dos pozos negros ¿Quién es este tipo?
-Otra estaría gritando piedad...- Me sonríe con superioridad
-¡Te equivocaste de persona! !Yo nunca te pediría nada!-
¡Baboso creído! Se puede ir a comer rábanos a la huerta y ver a doña comiendose el perejil... El hombre mueve su cabeza de lado y se acerca más a mi cara.