Sábado, 31 de marzo del 2018.
M I C H A E L
La mesita a mi lado no para de vibrar. Hay cuatro teléfonos que no paran de sonar con sonidos diferentes logrando una extraña armonía. Incapaz de abrir mis ojos agarro el primero que mi mano toca. Veo que es una alarma, la detengo.
Un momento.
¡Las alarmas para arreglarnos para la competencia!
El teléfono que tengo en mi mano es el Adrien y sin pensarlo lo lanzó a donde está durmiendo. Hago lo mismo con los teléfonos de los gemelos.
Eso no los despertó, ni siquiera se movieron. Ruedo por la cama cayendo de esta suavemente. Me levanto y camino hacia el armario.
Tengo una idea.
Abro el armario y veo desordenadamente los cajones. En el último están las cosas que no tienen un sitio. Lo llamo "El cajón de los objetos rebeldes" o como lo llama mi hermana "El cajón de los objetos insurgentes."
¿Dónde está?
Aquí está.
¿Es esto?
No.
Esto es un...
¿Hilo rojo?
¡Aquí está!
La bocina de gas que usa Sofie y mi mamá para alentarme. Sin pensarlo dos veces la hago sonar.
Al principio solo se mueven un poco. Después empiezan a usar sus almohadas para tratar de silenciar el sonido. Como eso no sirve, abren los ojos.
Por fin.
Eso solo logra que vean que el sonido lo estoy haciendo yo. Lo cual empieza un ataque de almohadas hacia mí. La sigo haciendo sonar hasta que algo sólido impacta mi cara.
-Ay, auch- veo lo que me pegó, el zapato de Calvin- Calvin, para- lanza su otro zapato.
-Interrumpes mi sueño de belleza, idiota- gruñe Calvin cubriéndose con la almohada que no lanzó.
-Tener nuestra cara no es fácil-añade Chad.
-Vamos a llegar tarde. Las alarmas ya sonaron. Las alarmas que me despertaron fueron las de emergencias, la tercera de emergencia- dejo de sonar la bocina.
Todos abrieron sus ojos alarmados.
-Halls vayan a arreglarse primero ustedes, ustedes son los que más tardan. Adrien y yo recogeremos la habitación y arreglaremos los bolsos.
Después de recoger y arreglar todos los bolsos. Calvin está listo, Chad aún está en mi baño como supuse.
-Adrien ve a arreglarte. Yo voy a arreglarme en el baño de Sofie.
Agarro mis cosas y antes de pasar por la puerta me giro hacia Calvin- Revisa si mi mamá ya se despertó. Si está haciendo el desayuno ayúdale a envolverlo para comerlo en el carro.
Asintió y salimos por la puerta juntos. Él se fue derecho hacia la escalera, yo me fui a la derecha hacia la habitación de Sofie.
Arreglado baje las escaleras saltándome escalones. Abajo esta mi mamá, Calvin y Adrien.
- ¿Dónde está Chad?
-Hola Mamá. ¿Como estás mamá? Bien, ¡Qué bueno! - regaña mi madre
-lo siento, sabes que vamos tarde- excuso.
-Si cariño, lo sé. Tener una mala actitud ante eso no va a mejorar la situación.
-Chad está subiendo los bolsos y está encendiendo el carro- Calvin responde mi pregunta
- ¿Qué hago?
-Ve a ayudar a Chad, terminamos aquí y nos vamos.
Obedecí. Fui a ayudar a Chad y unos minutos después como mi madre dijo estamos listos para el viaje de cuarenta y cinco minutos que nos espera.
M E G A N
- Ya llegamos.
Baje e inhale profundo. Me sentí aprisionada todo el viaje.
Los padres de Debby lanzaban miradas que no se si interprete mal o simplemente tener a Debby a mi lado me dio esa impresión. No lo sé, estoy muy contenta de que estamos en nuestro destino.
-Debby busca un espacio para el equipo y empieza a calentar- entro en modo entrenadora, tal vez eso expulsará los demás pensamientos.
-Nosotros iremos a buscar al entrenador y veremos si ya están anotados.
Le hice un gesto con la cabeza, para que note que entendí. Ahora que lo pienso.
Mi tío. La última interacción que tuvimos fue esta mañana donde le escribí que los padres de Debby se ofrecieron a llevarme.
Le escribo a Michael para preguntarle por dónde van.
Esta competencia según lo que mi tío explico no tiene perdedores ni ganadores. Es solo para que los equipos conozcan a lo que se van a enfrentar. También porque hay muchos patrocinadores del deporte, por lo que se, necesitamos eso.
El equipo de competencia del instituto RG se mantiene por los premios de las competencia, donaciones y patrocinadores. Todo el fondo de deporte del instituto se lo lleva el basquetbol, voleibol y fútbol. En fin, los deportes de equipo, el director piensa que nuestro deporte es muy individualista.
Que idiota.
Interrumpiendo mis pensamientos, Michael responde.
Michael: Vamos en camino
¿Qué rayos significa eso? Estás llegando o estás saliendo.
¿Cuándo van a llegar?
Necesitamos Calentar
Si llegan tarde los patrocinadores cuestionarán nuestra disciplina
Michael: Lo sé
Michael: no te preocupes
Michael: ya vamos a llegar
Algo pasa. Algo pasó. Me maldije internamente por haber olvidado poner mi celular a cargar.
Sacudo esos pensamientos. Solo confiaré y veré donde está mi tío.
Camino entre la multitud buscando su castaño, canoso cabello. Lo veo con los Tomns. Se ve ¿Enojado? No logro notarlo de lejos, me acerco para ver qué está pasando.
-Hola, ¿Qué paso?
-Los que dirigen este año la competencia son no-nadadores, calentaron el agua demasiado para los competidores- comunica con un tono claro de frustración en su voz.
Suspiro. Todos con un conocimiento básico en la natación competitiva sabe que es mejor nadar en agua fría que en agua caliente. La temperatura ideal es el agua tibia, equilibrio entre el frío y el calor.
#29105 en Novela romántica
#4824 en Chick lit
amor, sexo amor locura experimentar libertad, amor novela juvenil
Editado: 22.12.2020