_... No quiero unirme a una banda de piratas _ dice, por su expresión deduzco que detrás de esas palabras hay una historia
_ Yo no te quiero obligar a nada Kusau, mira no partimos hasta mañana así que piensatelo y ya me dirás
_ ¿Y no lo puedes buscar desde aquí?
_ No, se como piensa así que él me estará buscando en el mar y me buscará o con un barco propio o con el capitán Ikeda-kun _ Estas palabras hacen que se ponga un poco triste, algo grabe le tuvo que pasar y no quiero obligarlo a nada
A la mañana siguiente Kusau, por mas que espere, no apareció en el puerto ni para despedirse
_No podemos esperarlo mas, vienes? _ Me dice Ikeda, yo lo observo y veo que tiene razón me da lastima pero asiento, me tengo que marchar y justo antes de que el barco parta, Kusau aparece y me da un beso
_Buena suerte pequeña _Dice y se va, subo al barco con una sonrisa. Llevábamos una semana en el barco y aun no había señales de él, tal vez debiera dejarlo y quedarle con Kusau ya que lo nuestro es imposible y con Kusau puedo estar libremente. Cuando llevaba dos semanas paramos en una isla para reponer
_ Tengo noticias_ me dice Ikeda-kun hace una pausa_ Están haciendo el camino para buscar el One Piece ¿Quieres que vayamos?
_ Si por favor _ le pido ya que apesar de que lo nuestro es imposible quiero encontrarlo. Asi que en cuanto teniamos todo volvimos al mar y seguimos la ruta para encontrar el One Piece.
Cuando llegamos a la siguiente isla, un mes después, tan pronto baje del barco busque alguna pista de él pero nada, me desanime pero algun día lo volvere a ver, nuestros destinos estan unidos y de ello estoy segura asi que me volví animar. Fui junto los demas y los ayude a equiparse mientras el capitán buscaba un sitio para quedarse una pequeña temporada aún que sabía que era lo más sensato en mi interior quería salir a la mar otra vez para poder alcanzarlo, quería verlo, abrazarlo, besarlo y jamás dejarlo irse otra vez
???
Estaba en la habitación de un hotel mirando el techo y pensando es un hermosa cabellera larga, esos ojos de profunda mirada y esos labios carnosos que nunca debí pero siempre quise besar hasta quedarme sin aliento, la extraño pero no sé dónde se pudiera esconder, por qué no la detuve cuando tuve la oportunidad, mi estúpido ego masculino hizo que yo no fuera capaz de decirle a esa hermosa mujer que no se alejara de mí jamás, lo único que hice fue gritarle que se marchara y no volviera jamás a buscarme, que encontraria a alguien mejor, pero mi mente sabía que nadie era mejor que ella ya que lo era todo para mí, una vez que se fue y cuando comprobé que no volvía mi mundo se llenó de sombras y ya no escuchaba a nadie, me pasaba los días solo en mi habitación en total oscuridad casi sin comer ni beber hasta que cai enfermo y a las puertas de la muerte la oí, esa voz... Esa canción... Esa sensacion, era ella sin duda, su presencia tiraba de mí arrancándome de las garras de la muerte y devolviéndome a la vida y así es como decidí ir por ella por qué ella es mi vida y si no está cerca me muero, te encontraré...
Me despierte empapado en sudor, otra vez soñé con esa maldita pesadilla, estaba ella justo enfrente mia, la acababa de encontrar y cuando la tenía abrazada algo atraviesa su cuerpo, brota mucha sangre, grito pidiendo ayuda pero la gente pasa y no parecen ni oir ni ver nada, su cuerpo palidece y pierde su calidez y justo antes de morir me dice "Te amo" allí me quedo cubierto de su sangre, abrazándola y sin querer soltarla jamás. Solo es una pesadilla me digo, se sabe cuidar sola y jamás le pasaría eso.
Me meto bajo la ducha, me visto y salgo del hotel hacia el barco quiero encontrarla la echo mucho de menos, justo cuando llegó al barco los chicos están con los carteles de los piratas nuevos, les gusta mirar si aumentaron o si los que no tenían si ahora tienen cartel, yo los miro para buscarla
_ Mira tienes cartel _ me dice el que se convirtió en mi mejor amigo en el barco pero yo lo ignoro y los reviso pero nada ella no está, me vuelvo hacia mi amigo, veo mi cartel y se me enciende una bombilla tal vez si me vuelvo uno de los piratas más temidos ella vuelva conmigo aún que es posible que me estea evitando y no quiera saber nada de mí y por eso no la encuentro, muevo la cabeza para quitarme esos pensamientos y decido intentarlo.
Sayumi
Mientras daba un paseo había unos oficiales de la marina que pusieron unos carteles en un tablón y se fueron hablando y riendo, me acerque con curiosidad y entre ellos había un cartel que no pude evitar coger , su cartel, aún tenia una baja recompensa pero sin duda ese hermoso hombre era él, corrí a enseñárselo a Ikeda-kun
_ Vaya ese bribonzuelo ya se te adelantó y con la cara de niño bueno que tiene
_ A de estar haciendo esto solo por encontrarme_ digo y voy a mi camarote a colgarlo donde lo viera todas las mañanas, luego me quedé observándolo por un buen rato acostada en mi cama hasta que me cojio el sueño y caí rendida. Mis sueños me transportaron a un mundo en donde él no se habia marchado, alli estaba en mi cama, acostado a mi lado y sonriéndome
_ Buenos días mi querida hime_ me decia con su voz grabe y sonora, que me enloquecia y me enamoraba, yo solo sonreia como tonta y lo miraba embobada, sabia que era solo un sueño pero igual me gustaba por una vez no tener pesadillas con perderlo