En deuda con el Diablo

El miedo, la esperanza y la fe

Me acerqué sin previo avisó y toque a Eva con el talismán

 

Eva cayó de rodillas al suelo bajo sollozos

 

—Solange: (le toca suavemente el hombro)

—Eva: (la mira tímidamente)

—Solange: (sonríe) está bien, tranquila, no te pasará nada

—Eva: (tiembla y mira al suelo) debes encontrar el libro del conocimiento, allí descubrirás la verdad de todo

 

Me estaba a punto de volver cuando Eva me detuvo

 

—Solange: (la mira)

—Eva: ten cuidado con ellos, ellos pueden provocar tú caída

 

No entendí a lo que se refería, pero asentí y me fui

 

Cuando llegue al mundo Real, nunca me imagine lo que vería

 

Una especie de huracán gigante estaba destruyendo todo a su pasó

 

La gente gritaba y corría con desesperación

 

Comencé a correr a donde la mansion, pero una emisora de televisión me llamó la atención

 

En todo el mundo estaban pasando desastres naturales, tornados, temblores, volcanes e inundaciones

 

Vi a los lejos la mansión y esa maldita  niebla rodeandala

 

Esto era cosa de Dixi

 

Cuando llegue, la niebla no me dejaba avanzar, no veía nada hacia adelante, era densa y casi no podía respirar dentro de ella

 

Sentía como iba poco a poco perdiendo los sentidos, ya no sabia donde estaba y si estaba avanzando o no

 

En un momento sentí una mano fuerte que me arrastró hacia la mansión

 

Aún media mariada note a Evans arrastrándome a la mansión

 

—Solange: (mira a todos lados) ¿Qué ha sucedido?

—Evans: Dixi está infundiendo el miedo en el corazón del ser humano así (duda y la mira) puede controlarlos con mayor facilidad)

 

Corrimos por los pasillos de la casa y un temblor se sintió, perdí el equilibrio y caí al suelo

 

—Solange: (se levanta) ¿a Dónde me llevas?

—Evans: (mueca) no importa lo que suceda, quiero que tú estés bien

—Solange: (lo mira sospechando)

 

Un mayor temblor se sintió y Evans me empujó hacia su despacho, una grieta se abrió entre nosotros dos separándonos

 

—Solange: (corre al borde de la grieta) ¿Evans? ¡No!

—Evans: (la mira sonriendo) Sole, gracias por enseñarme lo que es preocuparme por alguien más

—Soalnge: (niega llorando) ¿De qué hablas? Evans... tengo miedo

—Evans: (niega y se acerca al borde de la grieta) no tengas miedo, yo... yo tengo fe en ti niña

 

Eran los dos aliados que el mapa celestial le había nombrado Esperanza y fe

 

El Ángel caído Pop representaba la esperanza de volver a reencontrarse con un amor de millones de años

 

Y el príncipe de las tinieblas Evans representaba la fe por una niña humana que le había enseñado lo que era el amor desinteresado a una criatura que nada podría hacer por devolverle su favor

 

—Solange: (asiente y entra al despacho)




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