Los amigos solo están en las buenas, pero los verdaderos amigos en las malas, recuerden eso.
San, Petesburgo, Rusia
10:40 am
Después de las aburridas clases, llegó la hora más esperada, el receso, caminamos por los pasillos hacia la cafetería, últimamente empezado el frío pues estamos en el mes de junio, en unos meses nevara.
-Lev, dice Pavel que no está esperando en la mesa de siempre, nos tiene una comida que espera que probemos- parecía un niño en solo pensar en la comida de Pavel, y no lo culpo, el cocina delicioso.
Solo le di un mormullo como respuesta, nos dirigimos a la cafetería y a lo lejos lo vimos, Pavel, un chico alto incluso más que Misha, piel blanca, ojos azules, labios finos pero hermosos, cuerpo común pero hermoso, pelo color gris, si se lo tiñe a cada rato, no entiendo cómo no se le ha caído, va vestido con una sudadera azúl pastel, pantalones de mezclilla negro y sus convers del mismo color que su sudadera.
Ese chico que parece un príncipe es Pavel Bianchi-Montesori, su padre era un conocido compositor, Antony Bianchi, falleció hace 7 meses en un accidente de auto, su madre es dueña de los restaurantes más lujosos de Rusia y San Petesburgo, Alexandra Montessori, se estarán preguntando cómo lo conocí, les cuento.
1 año atrás, San Petesburgo, Rusia, universidad Nova
10:48 am
Caminaba por los pasillos, estaban solos, pues ya todos están en la cafetería, me dirija hacia los baños que se encuentran hasta el otro lado de la cafetería, no me gusta los que están a unos metros de la cafetería, son muy concurridos.
Al entrar a los baños me acerque al lavabo a refrescarme la cara, últimamente mi ansiedad social está más presente, en los cuatro meses que llevo aquí, solo Misha, nunca fui bueno para socializar, desde la muerte d emi madre e tenido traumas de convivir con más personas, cada vez que estoy cerca de muchas personas o a alguien que no conozco, me da un ataque de ansiedad.
Estaba tan sumergido en mis pensamientos, hasta que un ruido me llamó la atención, más bien unos sollozos que venían de uno de los baños, se que no debo ser metiche pero no tendría la desencia de dejar a esa persona, llorando, se lo que se siente
Me acerque lentamente, pero de nada sirvió, sus sollozos pararon, bueno casi
-oye necesitas algo- no obtuve respuesta, volví a insistir- te sientes mal, quieres que le hable a alguien, que tienes
No obtuve respuesta por lo que decidí irme, no s esque es lo que le pasa, pero mi corazón se estruja con solo escuchar sus sollozos, esos que con solo escucharlos sintes tu alma estremecerse, son sollozos de una persona rota y cansada, los conozco muy bien.
Caminé hacia el lavabo para agarrar mi mochila puebla puse ahí, estuve apunto de abrir la puerta para salir cuando una voz me llamó, supongo que la persona que está ahí adentro se dió cuenta que me hiba.
-o..oye- hablo una voz tan rota, mierda creo que voy a llorar
-si aquí estoy, necesitas algo- le dije mientras me sentaba en el piso, enfrente de la puerta donde se encontraba
-m..e podr..ias da..r agua..a, por favor..r- me dijo con su voz entrecortada
-si espera un poco- le dije mientras revisaba mi mochila, espero que todavía tenga el agua que Misha me dio en la mañana, sip aquí está- ten toma, está un poco fría y no le e tomado- se la pase por debajo de la puerta
-gra..cias- me contesta mientras tomaba el agua, al momento que la tomo dejo ver si mano, tenía cicatrices y sangre, si sangre seca, mierda
-oye podrías habrir la puerta por favor, estás herido- dije mientras me ponía de pie
-no- contesto mientras comenzaba a llorar de nuevo
-oye tranquilo, no te voy hacer nada, solo quiero saber si estás bien- no hubo respuesta, solo su llanto se hizo más fuerte- tranquilo, mira yo soy Lev, y no se que te paso y se que no me debe de importar, pero por favor abre, enserio me estoy preocupando más
No me contestaba, no se que hacer, me estoy poniendo ansioso, que hago
Estaba pensando en algo, esto no está bien, estoy apunto de tener un maldito ataque de ansiedad, el está llorando y yo no puedo hacer nada, para esto también soy inútil
Mientras mi mente se llenava de pensamiento negativos a causa de no poder hacer nada con el chico que estaba llorando, algo llamo mi atención, más bien un sonido, la puerta se abrió
Sentí que deje de respirar, me puse pálido, el chico estaba golpeado, tenía una ceja rota y el labio partido y su nariz sangraba, que le pasó
-por que..e te preocu..paso por m..i- dijo mientras sus ojos se volvían a llenar de agua
-no lo se, solo que mi corazón y yo sentimos que necesitas ayuda- dije mientras me acercaba, levanté mi mano lentamente y la puse enfrente de el- ven dame la mano, hay que salir de aquí
El dudo al darme la mano, pero al final si lo hizo, se levantó temblando
-quoeres que te lleve a la enfermería- comenté mientras sacaba un pañuelo que siempre traía en mi mochila, nunca se sabe para que lo utilizas, lo moje y lo empecé a pasar por su cara para quitar la sangre seca- o quieres que llame a un familiar tuyo
El no me decía nada, solo su cuerpo temblaba, se estaba conteniendo de llorar- si quieres llorar aslo, no te voy a juzgar- después de decir eso, se quebró, parecía un niño que acababa de perder a su primera mascota, lo abraze, el poso su cara en mi hombro y me abrazo, era un abrazo fuerte pero roto
-ya n..o pue..do, sac..ame d..e a..qui- dijo entre su llanto
No espere nada y agarre mi mochila y la suya mientras tomaba su mano, salimos al pasillo, estaba solo, el descanso todavía no terminaba
No sabía a dónde llevarlo, a la enfermeria no, por algo estaba encerrado, ya se , lo voy a llevar al estudio de arte, solo los estudiantes de arte pueden estar ahi, que suerte qué estudió eso y que en estos momentos se encuentre sola, ya que todos prefieren estar conviviendo, antes de retomar las clases
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Editado: 16.05.2024