En El Mundo Apocalíptico Soy Una Esposa Obedientemente

– Comportamiento –

La alarma empezó a las 6:30 a.m, hoy era otro dia... otro dia exactamente igual a otros con la misma rutina desde hace dos años.

Se levanto de la cama azotando el reloj, solto un suspiro cansado y se tallo los ojos. No es como si estuviese muy contento de despertar temprano.

Se sento y busco unas pantuflas para poder levantarse. Luego, fue directo a la cocina donde tomo pan y lo metio en una tostadora.

Cuando estuvo listo, le hecho nutella y comenzo a comerlo mientras trataba de despertar por completo. Su bebida fue solo un vaso de leche.

Fue a sentarse en un pequeño sofa que estaba frente a la tele y puso el canal de las noticias... no habia nada relativamente interesante, la presentadora solo decia cosas que habian pasado como accidentes o cambios en temperatura.

A las siete en punto termino de desayunar y apago la tele para ir a vestirse. Se vistio de forma rapida, tenia una camisa blanca de manga corta y pantalones azules, tenis negros y se peino, ya que su pelo parecía un nido de ratas.

Finalmente tomo sus lentes y un reloj, luego se miro en un espejo que no estaba muy lejos de su cama, su vestimenta era decente, lo suficiente como para no ser confundido con un vagabundo.

Tomo su mochila, con pocas cosas, y salio de su pequeño departamento. Al salir, miro a los lados... todo era igual.

Todas las puertas estaban cerradas y en realidad no le importaba mucho, sabia como era la gente de aqui y la mayoria no son muy agradables.

Bajo por las escaleras y salio del edificio deteriorado. Miro el reloj y sintio como su cuerpo comenzo a correr al ver la hora, era tarde, muy tarde. Perderia el autobús y llegaria muy tarde.

A lo lejos miro la parada del autobús y apresuro el paso tratando de llegar, Kori Yao casi termina en el suelo por correr tan a aprisa.

Por pura suerte y por obra del destino no perdio el autobús y subio mientras respiraba agitado.

Despues simplemente fue a sentarse en un asiento cerca de la ventana. Calculando sus tiempos, no iba a llegar tan tarde a la universidad.

Kori Yao casi se queda dormido por el camino de veinte minutos de su edificio a la universidad, era muy agotador seguir esta rutina.

Sin embargo, un hombre muy llamativo se subio en una parada, parecia enfermo... casi deshidratado y hambriento. Sus ojos se veian raros, parecian inyectados casi como si hubiese consumido droga antes de subir.

El sujeto metio su mano a su pantalon y saco una navaja, pocas personas que estaban ahi con sus hijos los cubrieron mientras miraron al sujeto.

Kori Yao se preparo para correr y justo cuando el chofer paro el camión para ver que era lo que estaba pasando, el hombre comenzo a caminar a la parte trasera del autobús.

Todos lo seguian con la mirada, parecia dirigirse a un señor de mas o menos treinta. El hombre parecia nervioso mientras se acercaba, su mano tembalaba tratando de no soltar la navaja.

El chofer se acerco rapido y paro al hombre — Disculpe, señor... ¿podria bajar del autobús, porfavor? — Pregunto algo nerviso mirando la navaja.

El hombre miro al chofer, parecía enojado... Kori Yao y todos los presentes gritaron de terror al ver como el cuello del chofer fue destrozado debido a la mordedura del hombre.

La carne del cuello fue arrancada y el chofer cayó al suelo. La mayoria de los presentes se levantaron de sus asientos y se acercaron a una parte cerca de la puerta del autobús.

El señor de treinta años estaba enteramente asustado y se aferro a los asientos.

La carne fue arrojada al suelo y el hombre se acerco al señor.

Tenia una sonrisa siniestra, parecia estar completamente fuera de sí. Kori Yao se aferraba a su mochila asustado mientras veia como dos señoras marcaban a emergencias.

El hombre paro justo delante del señor y levanto la navaja.

Los pocos niños que estaban ahi comenzaron a llorar abrazando a sus padres. Todos estaban asustados.

La navaja termino enterrandose en el abdomen del hombre que parecia no importarle estar desangrandose.

Kori Yao queria salir de ahi y estaba seguro que él no era el unico queriendo hacerlo. Todo era un desastre, el chofer estaba tirado en el suelo con el cuello sin un pedazo, habia llantos de niños y algunos pocos de adultos, el sujeto loco se encajaba una y otra vez la navaja en el abdomen.

Los minutos parecieron horas, hasta que por fin llego la policia y ambulancias. La puerta fue abierta a la fuerza y entraron oficiales para bajar a la gente.

En cuanto piso fuera del autobús, sus piernas fallaron y casi se cae. Sin embargo, paramedicos lo ayudaron a apoyarse y yo llevaron junto a los demas que estaban temblando y siendo entrevistados para tomar testimonio.

Kori Yao alcanzo a ver como bajaban al chofer en una camilla y cubierto sin dejar ver a nadie el cuerpo, el hombre fue bajado en una camilla y lo subieron a la ambulancia.

Canales de noticias llegaron entusiasmados, no de la mala manera, por el acontecimiento.

A todos los pasajeros los tranquilizaron y antes de que otra cosa sucediera, Kori Yao decidio irse de ahi. No sabia si ir a la universidad o regresar a casa...

Miro su reloj y eran las nueve de la mañana, habia pasado muy poco tiempo, se sintio como un dia entero estar ahi.



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En el texto hay: zombies, apocalipsis, boyslove

Editado: 27.07.2024

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