El dolor es inevitable, nos abruma y nos consume perdiendo nuestras esperanzas en un chequear de dedos. La cliché palabra de “Sin dolor no hay amor” es real, es inventada por una persona que está muy herida, que entiende el lado oscuro del amor y no se deja influenciar por los momentos dignos de recordar.
La confianza en nuestros amados es fiel, aún que te pueden dañar tanto que te sientas la peor persona del mundo, seguirás siendo leal. Seguirás creyendo que todo fue un error y mañana todo estará bien.
Soy fiel creyente de que si hay una gigantesca tormenta hoy, mañana habrá un iluminado e impresionante arcoiris.
La confianza es el peor sentimiento que pueda tener un ser, porque cuanto más grande confías más grande te lastiman. Es como un juego, quien confie primero, pierde. Quién gane, tendrá la ventaja de manipularte.
Confiaba en Derek, aún que todo lo sucedido daba influencia a que no lo haga , mi interior gritaba “¡Matalo!" pero mi corazón suplicaba una oportunidad más. Mi humanidad lo pedía,y no lo podía rechazar.
Abrí la puerta y pase lentamente al calabozo, entrando temblorosa y debil. Rodeada de guardias para mi propia seguridad, Derek se encontraba en el suelo todo cubierto con mantas mientras temblaba. Al ver mi presencia se pone de pie y puedo ver sus hematomas por todo su rostro.
Trago en seco, y paso un mechón de mi pelo hacia atrás.
,«Tú puedes, solo sé la perra sin corazón que debes hacer —Pensé— tú eres quien manipula, no la manipulada»
—Derek, mi anhelado padre. Te he hecho una agradable visita, espero que no interrumpa algo.—Miré a los costados con un tono burlón, un guardia se acerca a él y le da ropa limpia, cosas necesarias para que se dé una ducha y vendas para sus heridas. Él lo toma sorprendido—Sabes, he estado pensando esto por mucho tiempo... Te necesito en mi partida.
—¿Qué quieres? Haré lo que sea para recuperar mi libertad, te seré leal.—Suplicó desesperado.
—Eso es lo que me encantaría.—Alzo un dedo— Ashic, tu rival, me ha manipulado...¡Pero tranquilo, no mas de lo que me hiciste tú! Y sorpresivamente me encontré con que, necesito a un Ángel que vaya a buscarlo y haga pagar por todo.
—Me rompiste mis alas.
—Evidente está.—Alce ambas manos con simpleza—Te enviaré al cielo, buscarás a Yheitor, le dirás dónde está Ashic y cuando ambos se encuentren y Yheitor tenga venganza, te conseguiré alas nuevas.
Note el interés en su mirada.
Esto será fácil.
ALEXANDER
Entré rápidamente y mi corazón se rompe al verla, mi pobre hermanita estaba conectada a máquinas respiratorias, tenía muchísimos cables conectados a su pecho. Sus latidos lentos se escuchaban por toda la habitación.
Me senté a su lado y acaricié su cabello lentamente, mientras ella me miraba llorando. No podía decir ninguna palabra dado que tenía un tuvo en la garganta. Cerré mis ojos y solté un sollozo.
—Perdon, sé que he sido un total idiota contigo. Sé que estoy lejos de ser un buen hermano, siempre he sido tan despiadado que me arrepiento tanto, Alicia.—Apreté mis párpados fuertemente intentando no llorar—No me arrepiento de haberte sacado el collar, no me arrepiento porque gracias a esa acción tú lograste vivir una vida plena. Una vida hermosa llena de aventuras, has logrado ser una viajera por todo el mundo y no tengo las palabras indicadas para explicarte lo tanto que estoy orgulloso por cumplir tus sueños.
» Sé que la llegada de Johanna es muy repentina, pero es una persona muy buena. Ella te puede dar la hermandad que yo nunca pude darte.—Tomó su mano y la aprieto un poco—Ella puede darte todo lo que te mereces.
» Te mereces algo más que un hermano perdido en la mierda mitológica. Mereces una hermana normal que se pase horas hablando contigo sobre... No sé, esmaltes de uñas o lo sexis que se ven en las mañanas.
Ella intenta decir algo pero sale más bien cómo un gemido adolorido. Miré su rostro y note como sus lágrimas caían rápidamente por sus mejillas.
—Alicia eres lo mejor que me pasó en toda la vida. Alicia te amo, hermanita. Te amo.
No contuve más y abrí mi boca liberando bocanadas de aire mientras mi cuerpo se achicaba y mis lágrimas no se detenían.
—Te amo, hermanita.
De repente algo con interrumpe, el ruido de la máquina indicando las respiraciones libera un largo ruido mientras se forma una línea recta en la pantalla. Rápidamente miro a mi hermana con desesperación, su mirada poco a poco se opacaba, se perdía en la nada.
—¡NO, NO, ALICIA NO, LUCHA HERMANITA, POR FAVOR LUCHA!—Grité. Sentí como me comenzaban a empujar hacia la salida unas enfermeras mientras los médicos hacían su trabajo—¡SUELTENME! ¡ALICIA ESTOY AQUÍ, NO ME IRÉ! ¡NO TE ABANDONARÉ!
Los médicos comienzan a intentar hacer reaccionar su corazón, hacen comprensiones rápidamente. Las enfermeras dejaron de intentar sacarme al momento que los médicos se detuvieron. Ellos dejaron de intentar al cabo de los segundos, mi mirada se pierde; observó cómo Alicia tenía la mirada perdida justo en mi dirección. Justo mirándome a mí.