En Mi Corazón

Capítulo II

Siento esa sensación de tristeza que no se va, no estoy segura de si debería estar bien por sobrevivir a un intento de suicidio, o mal por seguir en un mundo lleno de vanas ilusiones.

Solo he permanecido en silencio y sin moverme por un largo rato, no se si han pasado muchas horas o un par de minutos, deje de luchar contra lo que me detiene. Espero que esto pase más rápido de lo que se siente ahora, parece que el tiempo va demasiado lento.

—Joven Ryan, lo busca el Doctor Eliot. —escuche a la voz de una mujer que entraba en lo que quizá era una habitación.

—voy en seguida —ahora era esa voz que no podía confundir, se escuchaba cansado, triste, tal vez había llorado por mi culpa, bueno en realidad esto es mi culpa, no pensé en lo que podía pasar él por mi, no pensé en lo que sería de él, solo pensé en mi y nada más.

Todos somos egoístas, pensamos solo en nosotros y no en lo que le puede pasar a las personas a nuestro alrededor con nuestras decisiones, eso es lo que me duele. Me duele que no me detuve a pensar más allá de mis acciones.

*

—Lo siento mucho. —escuché a mi hermano decir a mi lado mientras tomaba mi mano. —Debí estar más cerca, debí estar contigo. —su voz se pagaba con cada momento, se quedo en silencio un momento, pero no soltó mi mano, sentía sus suaves caricias hasta que un sollozo rompió sin previo aviso el silencio que de pronto se formo. Mi corazón se estrujó, quería levantarme y abrazarlo, quería decirle en ese momento que estaba ahí con él y que no lo dejaría. Me siento tan impotente y tan estúpida. —Despierta hermanita, te quiero tanto y no soporto verte en esa cama, ya no se que hacer para que estés bien, el Doctor dice que despertarás en cualquier momento, que solo es cuestión de tiempo.

En ese momento, sentí como una lagrima caía en mi mejilla y sus labios tocaban mi frente... Si me preguntaran por el momento más triste que he vivido, sin duda sería el ahora.

Ryan:

—Ryan, tienes que descansar un poco. —dijo Lucy acercándose a nosotros

—Voy enseguida —dije alejándome de Jane y quitando el rastro de lagrimas que habían caído.

Me despedí de Jane tome la mano de Lucy y salimos de esa habitación blanca de la cual muy pocas veces me había separado.

—Tienes que ser fuerte cariño —dijo ella a mi lado —sabes que Andy y yo estamos aquí para lo que sea

—Gracias Lucy, eres lo mejor que me ha pasado, gracias por estar estar a mi lado —la abrace y salimos del hospital hacia el estacionamiento.
Después de unos minutos de trayecto a casa, me limite a subir a mi habitación para tomar una ducha y después descansar un rato y después volver al hospital.

—Lucy, cariño, si quieres puedes ir a casa para que también descanses un poco, mañana tienes que ir al instituto. —dije mientras la abrazaba y depositaba un beso en su mejilla.

—No te preocupes por eso, ahora lo que más importa es mi amiga, sin duda te voy a acompañar en cualquier momento.

—No quiero que tengas problemas por mi culpa, y no quiero que vayas a reprobar a causa de lo mismo.

Después de unas horas, Lucy se fue a causa de sus padres, yo trate de acomodar unas cuantas cosas, entré a la habitación de Jane, habían pasado ya algunos días y no negaré que la tristeza me invadió en ese momento, llegaron los recuerdos.

¿Cuanto tienes que sufrir para tentar contra tu vida?¿Cuánto es tu temor de hablarlo? ¿Cuan solo te sientes?

Esas y mil interrogativas más pasaron por mi mente; esas respuestas a esas tantas preguntas que no logro encontrar.

Pasé mi vista con detenimiento por esa habitación, a cada paso que daba sentía que había hecho todo mal, la había dejado sola tal vez, había descuidado las promesas de estar siempre ahí, le fallé a la persona que más amo en este mundo.

Así avance hasta pisar una hoja de papel que había sido doblada un par de veces, encontrando una carta de despedida que hizo que mi corazón se estrujara y las lagrimas cayeran sin previo aviso.

Me despido de todo...

Me he dado cuenta de que me sigo engañando, quiero que todo acabe lo antes posible; quise creer que de verdad todo estaba bien, pero no es fácil afrontar un corazón roto con tantas cosas que hay en mete.

Estoy mal con todo, quiero solucionar mi caos pero parece que solo puedo empeorarlo más, estoy dejando de ir más adelante, quiero acabar con todo y dejar de sufrir.

Siento que conforme avanza el tiempo, no logro seguir yo también. Me estoy estancando en mi misma en un mundo que no me pertenece.

Quería que esto fuera diferente, dejar de esconderme y al fin afrontar todo y seguir sin ningún problema

 




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