Hace cinco años donde pasó todo, donde nos conocimos, donde te sonreí, donde me besaste en la colina y donde me dijiste que “Me amabas”.
Hace exactamente cinco años de que paso todo eso y hace tan solo dos años donde tú falleciste en un accidente de moto.
Ella se quedó viuda y con dos hijos, pero él y yo la ayudamos a estar bien junto a los demás del grupo.
Ayer fuí a tu tumba y te deje una flor amarilla, ya que era radiante y hermosa como vos.
Nos queríamos, pero sabiamos que lo nuestro era ir directo al suicidio. Si lo hubieramos intentado sólo habría habido rascacielos desde los que trepar y tirarse, porque no estábamos hechos el uno para el otro. Nos encontramos en el peor momento de nuestras vidas, no era lo que buscabas, ni tú eras lo que necesitaba. Y si lo hubieramos intentado, nos habríamos cansado de dar sin recibir o de recibir sin tener ganas de dar. No se explicarme, pero se que habría sido un fracaso por más que me buscara en tus ojos, por mucho más que pensase en ti... me conozco y te conocía, y ese sueño no habría durado mucho más tiempo.
Nos habríamos roto el corazón demasiadas veces, porque no éramos esa “Media naranja” que el otro merecía. Nos amábamos, pero sabiamos que en ese momento no estábamos hechos el uno para el otro.
Entonces... ¿Qué fuimos?
Fuimos dos almas que se encontraron después de años, el latido más fuerte del amor, aquéllo que no se cuenta, eso que se vivió, fuimos un instante que nos alegro la vida, la sonrisa que se llevó en la mirada, fuimos una poesía escrita en el viento, la melodía silente que solo nuestros corazones escucharon, la caricia invisible de la felicidad, el beso que nadie entendió, un suspiró que inquietó los días, que calmó la noche, fuimos intensos como el sol; brillantes como la luna, fuimos la historia jamás contada, la que jamás se escribió y la que hará eco por toda la eternidad.
Quize amarte hasta el final de la línea, pero la línea fue más corta de lo que esperaba. Eras mi personaje favorito, lástima que el libro terminó y no pude hacer nada. No fuimos la definición del amor que tanto buscábamos, pero fuimos un claro ejemplo de ello y me quedó con eso ya que fuiste un gran momento, pero ya es hora de que te vuelvas un recuerdo.
—Esperame en nuestra próxima vida, Otis.