Capítulo 9.

Michael.

Son las tres de la tarde, y estoy por salir del instituto. Ayer por la noche, luego de dejar a Camille en su casa, ella creó un grupo de WhatsApp donde estábamos Livi, Annabelle, Lay, ella y yo, y hablamos como una hora, y en ese tiempo descubrí que todas ellas son chicas geniales, pero la que mejor me pareció fue sin dudas Cam.

A Liv le gusta cantar, a Lay pintar y a Annabelle hacer todo tipo de manualidades. En cambio a Camille le gusta pasar el tiempo organizando y perfeccionando el contenido de su carpeta escolar, le gusta sacar fotografías con la cámara de fotos algo viejita que tiene, y por sobre todas las cosas dijo que le gusta todo lo relacionado a la biología. Quiere estudiar eso de hecho, al igual que su mejor amiga.

En cambio, a mí me gusta la música, el arte, y la geografía es mí materia preferida, pero aún no sé qué iré a estudiar. Había pensado en ser doctor, policía, conductor de yates, ya que también me gusta andar en barco durante las vacaciones. Es por eso que la mayoría de las veces cuando vamos a pasar las vacaciones en otro lugar, es uno con playa, o lugares para andar en barco.

Durante la mañana he visto todo el tiempo a Cam y Livi y en los recreos hablamos de música, y resulta que a la morena le gusta el rock. Lo sospechaba debido a la estampa que ayer tenía en el buzo, que era un logo de una banda rockera. A su amiga le gusta lo tranquilo, lento y romántico. La verdad es que son bastante diferentes, pero se nota a lenguas que se ama como si fuesen hermanas.

Ahora en la tarde, tuvimos un sólo recreo dónde la rubia amiga de Cami Nos ha dicho que tenía algo súper para mostrarnos al salir de clase. No quiso decir qué era, pero sólo adelantó que tiene que ver con la sorpresa que le tenían sus padres.

Todavía no somos tan amigos como lo soy con Camille, pero nos llevamos bien y me alegra,es simpática

Sólo faltan quince minutos para salir de la escuela, porque este año los horarios son todos diferentes. Hoy tuvimos a la mañana las horas normales y a la tarde tenemos que salir a las tres y cuarto. Luego iré a casa a estar con mamá, y comenzaremos a buscar en los diarios por si alguien busca empleada, así puede comenzar a trabajar lo antes posible. Ayer en la mañana había quedado con Ethan del lavadero de autos en que me llevaría el auto a casa, pero luego me olvidé de darle mi dirección, así que hoy antes de ir al colegio pasé por ahí y me lo encontré. Sólo le faltaban cuatro autos antes del mío. Los dos reímos al darnos cuenta que tenía razón, y no le había dado ni mi dirección ni el número de teléfono. Así que charlamos cinco minutos, le dí número y dirección y quedamos en que cuando a las seis me llevará el auto a casa, tomábamos algo. Simpatizamos bastante, se nota que es un tipo tranquilo pero divertido al mismo tiempo.

También debo encontrar un agujero de tiempo para verme con Cam y Livi, por eso que nos tiene que mostrar. Además Camille dijo que sí no nos molestaba a mamá y a mí, podría ir a casa a ayudar también con la búsqueda de trabajo, así que hoy tendré un día ocupado. Sólo falta organizar la agenda de horarios y todo estará listo para cumplir con todo y todos.

En el frente está la profesora Olivia Carter, que da clases de construcción de ciudadanía, y al darse cuenta que hace como cinco minutos no la escuchaba; por estar pensando en todo esto del día ocupado, que por cierto será un buen día ya que veré a mamá, y a mis nuevas amigas y amigo; se acerca a mi banco con la mirada en mi rostro mientras continúa explicando le lección. Se agacha ligeramente para que la pueda oír y deja de explicar para decirme:

-Michael, presta atención a la clase, por favor.- 

-Disculpa señorita Carter, me distraje pensando en mis horarios del día, no volverá a pasar, prosiga tranquila.- Ella asiente con la mirada más suave y sonriendo se voltea para poder ver a toda la clase y comienza a explicar de nuevo lo que no he escuchado y esta vez presto atención a lo que dice acerca de las leyes y los derechos humanos.

🌸🌺🌸

Ya es hora de salir e ir a casa, así que al igual que todos preparo mis cosas y luego me acerco a las chicas que siguen guardando sus apuntes dentro de las carpetas.

-Señoritas, ¿Las ayudo?- Mi tono galán y divertido hace que las dos se ruborizen pero luego ríen leve y niegan con la cabeza en señal de negación. Asiento y espero a que terminen con lo que hacen apoyado contra la pared a un costado de ellas.

Recuerdo haber olvidado el móvil sobre el banco así que le digo a mis amigas "Vuelven tres segundos" y me alejo para llegar a mí escritorio del salón que quería a tan solo diez pasos, pero al hacer unos siete chico contra algo, o mejor dicho contra alguien, haciendo que caiga de trasero en el suelo, y pegando un frito chillón.

Oh Dios mío, no... No, no, no. Con todas las personas que pude chocarme, ¿Tenía que ser con ella?

La tal Elda, la histérica-mentirosa que agredió a Camille se encuentra en el suelo viendo con enojo sus cosas tiradas por el piso.

Oye chica, solo hemos tropezado, no es el fin del mundo si te das un golpecito en el trasero y se te caen la mochila y el cuaderno.

-Disculpa, ¿Estás bien? Deja que te ayude con eso.- Digo por pura educación, porque si no me hubiesen educado tan bien, la hubiese mandado al diablo.

-Estoy bien, quítate, no necesito la ayuda de nadie.- Coje lo que está en el suelo y se levanta de golpe con el rostro rojo, supongo que por rabia, aunque sigo sin encontrar el motivo de su rabia tan colerica, sólo por haberse caído.

Me mira en el rostro y su semblante cambia a uno más nervioso y menos enfadado.

-Lo siento, no quise hablarte mal, pero casi me mato y rompo mis cosas.- Dice corriendo un mechón de cabello y pestañeando haciéndose la bonita.

No la soporto, alguien ayúdeme.

-Bueno, me alegro que estés bien. Disculpa nuevamente. Con permiso, nos vemos.- Saludo con una sonrisita taaannn falsa como ella parece serlo.