—Un gusto, soy Bob esponja.—Mike estiró la mano en dirección a Dylan.
Este mismo lo miró de arriba a abajo con el ceño fruncido, se encogió de hombros y luego aceptó su mano haciendo un saludo formal.
—El gusto es mío, soy Patricio Estrella.
Matthew se floto la sien con frustración cerrando sus ojos, me quedé mirandolos con el ceño fruncido mientras estaba cruzada de brazos.
Katherine, mejor dicho mi madre, había tenido una conversación con la nada misma, luego me explicaron que siendo ángel puede ver a los Ángeles y tuvo conversación con uno de ellos, un tal Derek. Realmente no sé y tampoco me interesa investigar quien es, ya mucho hay por mi cabeza. Minutos luego, llegó Lucas y le dijo que "lo tenía listo" entonces ella se fue tan rápido como vino.
Siendo la misteriosa mujer que supongo que siempre fue.
Alexander llamó a mis hermanos para poder controlar a Mike quien estando "ebrio" empezó a decir totalmente idioteces y quiera beber de mi sangre dado que “Tengo un olor muy encantador” siempre me dice que mi sangre lo llama y nuestra amistad es quien controla a su ser interior a no deborar mi cuello. No quieran que le hagan daño lo cual mi padre sin paciencia dijo que si él se encargaba iba a terminar con el cuello roto.
Entonces Dylan y Matthew lo tienen entretenido fingiendo ser todos unos personajes de Bob Esponja.
Admito que fue genial cuando Matthew dijo que era Arenita y Alexander a Don Cangrejo.
Fauna se había retirado al mismo tiempo que mis hermanos entraron, les dió un furioso gruñido, me tiró un beso, pateó a Mike y se fue.
La quiero.
No puedo evitar mirar a Ruthless necklace, tanto poder sujetado en una cadena mística. Me pregunto vagamente los efectos secundarios que tiene en él, la infertilidad por ejemplo pero, vamos, las brujas sabían que ese era un efecto negativo. ¿Por qué les dejaría su generación en manos de un infertil? Por favor.
—Oye, no es para bajar tu estado de ánimo... Pero no puedo evitar decirte que tienes las puntas secas—Lucas apuntó mi cabello. Mi vista cae en él y lo fulmino con la mirada—Tampoco es para presumir pero mira...—Pasa una mano por su cabello peinandolo para atrás con los ojos cerrados, luego sonríe coqueto y me mira.—Sedoso y manejable.
Paciencia, Díos
—No entiendo que hacemos aquí, viendonos la cara de idiotas mientras que esperamos la nada misma. ¿No deberíamos estar investigando?
—¿Investigar qué?—Alexander alza una ceja, creo que esa acción lo caracteriza mucho.
—A qué debo proteger Ruthless necklace. Vamos, es el collar mítico más importante en toda la fas de la tierra. ¡Puede destruir el mundo si esto quiere! Su enemigo -al cual yo debo frenar- debe ser igual o más poderoso.
—No existe tal cosa más poderosa que mi collar.—Su tono se volvió fastidioso, como si estuviera cansado de decirlo apesar de decírmelo a mi por primera vez. —Entiende. No-existe-un-poder-igual. ¿Si?
Miré a Ruthless necklace furiosa. ¡Debe haberlo! Si no, ¿Por qué estoy aquí?
Demasiadas preguntas me invaden, desde por qué el aquelarre decidió dejar su generación a manos inútiles de un infertil hasta que clase de poderes poseo. Johana, la tan nombrada bruja que habla Dylan es una descendiente y se explica perfectamente que no pueden haber dos solo una lo cual, yo debí aparecer cuando ella muera pero la gran sorpresa es que ni siquiera tiene una mínima enfermedad o molestia con su existencia.
—¡Ruthless necklace!—Elevé la voz, no tanto pero la suficiente para lo que sea que hay dentro de esa piedra se ilumine, como lo predije; la piedra se iluminó como nunca antes ante la mención de mi voz.—¡Ruthless necklace!—Grité de vuelta, el collar se volvió a brillar más.
—¡Lo estás activando, detente!
de repente, Alexander gime y veo como la piedra había comenzado a quemar poco a poco su piel, lo miré sorprendida y él furioso.
—¡Detente!—Matthew gritó, poniéndose de pie. Mike da un brinco de susto dado que estaba medio dormido a su lado y lo mira con un gran horror—¡Deja de experimentar con MI padre!
Bien. ¿así será el juego? Me encantará jugarlo.
Me pongo de pie, Alexander hace lo mismo. Decididamente camino en su dirección, no le doy tiempo a reaccionar que coloco las manos alrededor de la encantadora piedra y susurro nuevamente.
— Ruthless necklace.
Y entonces, siento como si algo explotará en mi rostro. Salgo volando por el aire mientras cierro los ojos y escucho como los vidrios y espejos de la casa se rompen y la explosión hace eco por cada rincón de la fría casa. Todo mi cuerpo cae sobre algo duro e inevitablemente también lo llevó cuesta al piso dejándolo bajo mío.
Mis manos impactan sobre el suelo con brutalidad absoluta, mis oídos se tapan y soy incapaz de reaccionar ante algo. Pongo una mano en mi frente y me la floto, al sentir un líquido caliente estar por mi rostro abro los ojos y observo como mis manos estaban cubiertas de sangre. Rápidamente miro debajo mío y puedo notar como Lucas tenía una madera inclustada en su costilla, que si no me equivoco es de una silla que salió volando junto a mi