Victoria/Vondra
Estábamos reunidos en la parte trasera para poder contactar a Joseph y Katrina, lo que vieron ayer Leiver y Jack no era nada bueno.
-Crees que nos contesten.-pregunta Danisa.
-Deben hacerlo, esto es grave.
-Vic, podrás hacer la conexión.-dijo Alton.
-Lo intentare.
Nombre el conjuro, pero no había respuesta alguna. Utilice todo el poder que podía tener pero nada, es raro nunca nos dejan sin respuesta.
-No responden.-dije.
-Si no les contamos lo más rápido posible, nos atacaran y romperán el conjuro que protege la mansión.-recordó Jack.
-Lo sabemos Jack... pero es complicado.-dijo Christopher.
-Regresemos, posiblemente Cianís despierte.-dijo Amelia, yo asentí esperemos que Nis no este tan preocupada.
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-No crees que es hora de ir allá.-pregunto la mujer que estaba viendo por la ventana.
-No es hora, tenemos que esperar, aun no es tiempo de verla.
-Ya espere mucho tiempo, no lo crees, cuantos años deben pasar poder estar con ella.
-Katrina se que es duro porque es nuestra hija pero tenemos que ser pacientes, muy pronto la veremos te lo prometo amada mía.
-No quiero que mi padre le haga daño solo para encontrarnos, aunque Vic es muy lista.
-Lo sé mi amada, tenemos que proteger ha nuestra hija.
Cianís
Desperté con los ruidos que provenían de la parte de abajo, seguía en el mismo cuarto de ayer pensé que todo era un sueño pero lamentablemente es real. Me levante de la cama y me di cuenta que a los pies de la cama estaba un conjunto de ropa que consistía en unos jeans negros ajustados, un top blanco con una chaqueta negra junto a unos tennis blancos, tome la ropa y me dirigí al baño.
Luego de una ducha y ponerme la ropa que me dejaron que me gustaba mucho salí, a lo largo del pasillo nadie se encontraba, seria mejor buscar a alguien. Para ser vampiros tienen buen gusto por lo moderno, tenían de todo hasta un gimnasio y cine, claro esta que viven bien. Entre en la sala de la mansión, se encontraba una chica menor que yo.
-Hola.-dije, como estaba de espaldas a mi, volteo.
-Hola tu eres Cianís.
-Si y tu eres...-debe ser la menor de los Bloom.
-Me llamo Aniam Bloom.-se presento, me dio la mano, yo la recibió parece que es más agradable que sus hermanos.
-No hay nadie en casa.-ella negó- pero escuche ruidos.
-Yo...estaba tratando de hablar con alguien, creo que Leiver te explico acerca de mi don o poder.
-Si, me lo dijo algo de fantasmas creo.
-Trataba de hablar con uno de ellos, no quería despertarte.
-Tranquila ya era hora de despertarme, y donde están todos
-Se fueron a.... un lugar, no creo que tarden.-dijo ella
-Bueno, tienes hambre.-Aniam me miro sorprendida y sonrió.
-¿Sabes qué comemos?.-la mire, es verdad había olvidado que se alimentan de sangre.
-Perdón, realmente soy nueva en este mundo.-respondí avergonzada
-Tranquila, la comida humana nos sirve como un snack pero lo que nos llena es la sangre humana, nosotros comemos ambas al igual que otros vampiros.
-No les hace daño consumir la comida humana.
-Es algo simple no nos deleita igual que la sangre, pero es rica.- yo asentí, ella se dio la vuelta topándose con unos ojos negro como la noche, lo había visto pero no sabia el nombre del chico.
-Lo que te dice Aniam es verdad, un gusto verte de nuevo Cianís.-el chico estiro su mano donde mi, es guapo lo admito pero quien diablos es.
-¿Y tu eres?-pregunte
-Dean, perdón por no presentarme antes, soy el hermano mayor de Jack.- le di la mano, pero dude que sea hermano de Jack, se supone que es hijo único.
-Pero Jack no tiene hermanos, el me lo dijo.-aquel chico llamado Dean soltó una carcajada.
-Nunca lo dice, soy mayor que el pero yo soy un lobo.-lo mire confundida no que los lobos quieren llevarme con ellos.
-Ya no entiendo nada.-mire a Aniam.-me explicas que es esto realmente.
-Dean es lobo por que lo convirtieron pero también usa magia no mucha, en pocas palabras es un híbrido.-dijo Aniam, Dean solo alzo los hombros como si no le importara.
-Ya entendí, quieren algo porque yo me muero de hambre.-ellos negaron.
-Pero te ayudamos Nis.-dijo Dean.
No puedo creer que sea como un sueño y agradezco por que se la verdad, aunque es difícil admitir me siento yo misma aquí. Lo único que espero que no sea raro estar con los nuevos en el instituto, todos nos van a observar pero eso lo de menos.
Mi vida corre peligro, tendré que aprender mucho más de los otros y como diablos yo ayudo. En eso entraron los demás, todo en normal no actúan raro como creía que iban hacerlo.
-Que bueno que despertaste Cianís.-Dijo la señora Bloom.
-Cianís quisiera hablar contigo un momento.-dijo Von.
Yo solo asentí y fue tras ella, los demás creo que iban a comer que se sentaron en el comedor, ella entro en el cuarto que había dormido y se sentó en la cama.
-Se que te llenamos de muchas cosas ayer pero era necesario decirlo, lo siento por todo lo que esta pasando.- dijo Vondra.
-Creo que era obvio de debías decírmelo y entiendo pero aun es un poco confuso y complicado de admitir.- me senté al frente de ella.
-Se que encontraste el cofre que estaba en mi habitación el otro día, no me molesto que lo abrieras sino el por qué no me comentaste nada al respecto.- suspiro.- yo te voy a enseñar que realmente es todo eso.- dijo e hizo asomar la caja junto al collar.
Al abrirlo puso los documentos afuera, las fotos y la carta para que yo pudiera ver todo, tomo la foto donde estaba la pareja y me la dio.
-Ellos son tus padres Nis, él es Joseph y ella es Katrina, mi hermana.- ahora entiendo mi madre se parece a Von solo que tiene algo en su rostro que no descifro que es.