Por un instante, levante la mirada para quedarme mirándolo a los ojos. Sus ojos eran negros, mas negros que la oscuridad misma. ¿Por que esta así? Su rostro se podían ver bien marcadas su piel, venas, y algunas marcas de la misma. ¿Que le pasa? Tengo miedo. Y fue ahí cuando me di cuenta que el estaba mirando fijamente a uno de los ángeles negros. El lugar se volvio mas frio que el mismo invierno, que la misma nieve entre las manos, Elizeo estaba haciendo una locura.
-Elizeo.. no los mires fijamente.. no lo hagas.. -Dije susurrando y toque su pecho-
El me miro rápidamente a penas me escucho, por suerte sus ojos volvieron a ser los mismos. Elizeo me acercaba mas y mas a su cuerpo, hasta quedar rozando con su aliento, el cual me daba un poco de escalofríos y una sensación rara en la espalda. Cuando el ángel paso, sin vernos, Elizeo me soltó rápidamente y tomo mi mano. Sus manos están frías, pero a la vez son suaves como las de un bebe.
-Tenemos que movernos.. ellos están lejos ahora.
-Asentí-
La habitación no estaba tan lejos, pero había que moverse rápido hasta allá. Y eso hicimos. Elizeo seguía sin soltarme la mano. Cuando llegamos, sanos y salvos, abrí rápidamente la puerta de mi habitación y me miro fijamente.
-Duerme bien, bonita -Me tiro un beso y cerro la puerta
Quede estancada en el interior de la pieza. No podía moverme, sentía que nada funcionaba en mi cuerpo. Cuando mi mente volvió a mi cuerpo, reaccione y me acosté en la cama. No podía dejar de pensar en el, en ese calor que irradia su cuerpo, ¿Que es esto que pasa?
Narra Elizeo:
Entre a la habitación, sin hacer ruido para que los demás no se despertaran y me acosté en la cama. Me quite la remera y me tape hasta la cintura. Mire el techo por horas pensando en ella, ¿Como fue que hizo para apoyar su mano en mi pecho y detener completamente mi transformación? Iba a hacer pedazos a ese ángel cuando Milena.. solo.. solo apoyo su mano y me hizo volver a la normalidad. ¿que es esto? ¿Que me pasa? Nadie ha podido hacer eso en su vida, y mucho menos un ángel. ¿Que fue todo eso?
-Suspire profundo-
-Ya duerme de una vez, Elizeo -Dijo Atuam
-Si, linda, -Me puse de costado-