A la mañana siguiente
Narrador
Son las diez y media de la mañana y Jungkook se había ido al trabajo a las cinco de la madrugada ya que su papá lo había llamado por una emergencia que tuvo con uno de los contratos de los nuevos clientes. Ahora que ahora se encuentra tomando su desayuno y viendo revistas de mujeres embarazada. En esta contaban como era la vida con un hijo y con ello los cambios que tenía la pareja con la llegada de un nuevo integrante a la familia.
Sin duda alguna en su mente se imaginaba una vez más la linda escena de ella y Jungkook divirtiéndose junto a sus futuros hijos.
Una sonrisa brotó de sus labios al escuchar el tono de llamada de su celular, pensando de que sea Jungkook lo toma con una brillante sonrisa dejando de lado la interesante revista de maternidad.
Sin ver el verificador atiende con una sonrisa y tono coqueto.
—Amor.
Saluda ella mostrando felicidad en su voz. Pero la persona de la otra línea suelta una pesada risa y Eyol rodo los ojos a saber quién es, soltando un suspiro toma su café y camina a la sala de estar.
—BongYon —saluda Eyol, tomando un sorbo.
—Por cómo me respondiste parece que la pasaste bien anoche.
—Ni te imaginas —suelta una risa avergonzada.
—Supongo que se viene bebé...
—Eso espero. Cuando Jungkook llego en la tarde le conté sobre adoptar un bebé, pero se negó y propuso intentarlo nuevamente —suspiro Eyol.
—Mira Eyol, a veces pienso que Jungkook es un poco egoísta con el tema de adoptar —Eyol puso una mueca por lo que dijo BongYon—. Pero vamos, es un bebé. Yo sé que tú lo vas a querer mucho como si fuera de tu sangre y la de él. Pero bueno, espero verte con una pancita dentro de poco. Yo sé que serás una gran mamá.
Le anima BongYon imaginando a Eyol protectora y estar cien por ciento dedicada a su bebé.
—Solo espero que la fertilización sea un éxito. No quiero desilusionar a Jungkook, ni a mí. Tanto él como yo queremos este bebé.
Emitió esperanzada. BongYon afirmó con su garganta en la línea telefónica dándole su apoyo.
—Bueno para lo que te llamaba era....
Y así se la pasaron hablando, entre risas y siendo como viejas metiches. Y también con ello, hablar un poco de la vida privada de ambas. Sin duda BongYon y Eyol son unas verdaderas amigas, se podía decir que su amistad lleva en pie desde los siete años. Ambas pelearon por el mismo chico cuando eran niñas, ambas se unían cuando una de las dos estaba mal. BongYon estuvo allí cuando Eyol tuvo la primera discusión con Jungkook, donde la vio destrozada.
Para ser exactos, BongYon pensaba que Eyol y Jeongguk jamás se iban a casar, ya que estos llevaban siendo novios desde los catorce años y prácticamente al verlos felices y despreocupados por la vida parecían ya casados. El día que Eyol llegó a su casa en la madrugada llorando y chillando de felicidad a BongYon le preocupó bastante porque nunca la había visto en ese estado, pero Eyol al contarle que Jungkook le propuso matrimonio el mismo día de terminar la escuela, se siento muy feliz al ver que su amiga por fin iba forma la familia que anhelaba junto a Jungkook. Por eso BongYon le llamaba cuando podía y más para ver cómo iba el proceso del embarazo de Eyol.
Solo esperaba que funcionara esta vez con el embarazado de Eyol.
Mientras tanto las dos amigas hablaban por teléfono, Jungkook está en su oficina con la mirada perdida a lo que decía su mejor amigo llamado Kim Taehyung. Su vista estaba en un punto invisible de la gran puerta de su oficina. Colocó una mueca en su rostro botando un suspiro llamando la atención de su mejor amigo.
—¿Pasa algo Jungkook? —pregunta en susurro Taehyung, frunciendo su ceño mirándolo.
Jungkook se sobresalta y mira con sus ojos abiertos a su mejor amigo.
—Mm... más o menos.
—¿Tiene algo que ver con Eyol?
Jungkook suelta una pesada risa y rodando sus ojos.
—¿Mi papá te dijo algo del tema? —pregunto sonando con falsa sorpresa, Tae rio dándole entender que sí—. Ya veo.
—¿Y por qué simplemente no adoptan uno? Se ahorrarían malos ratos para ambos.
—¿Estás loco? Quiero un bebé MIO, no adoptado, quiero a un heredero que sea de mi sangre. —dijo mirándole con seriedad a Taehyung.
—Creo que estas siendo un poco mezquino con esas pobres criaturas que anhelan por querer una familia.
Jungkook traga saliva a la intimidante mirada de su amigo y los nervios aparecen.
—Lo sé, pero... —susurro provocando que Tae alzará una ceja a lo que Jungkook quería decir—, per...
Pero no terminó lo que quería decir, ya que el sonido de la puerta llamo la atención de los dos jóvenes que se encontraban conversando. Jungkook trago saliva nervioso al ver el rostro de MiYong asomándose con una ligera sonrisa por su puerta.
—Señor Taehyung, ha llegado el señor Jeon para la reunión de las once quince. Lo espera en su oficina.
—Gracias MiYong —dice agradecido.
Ella asiente con una ligera reverencia de cabeza y cierra la puerta despacio. Taehyung se da la vuelta para mirar a Jungkook que se encontraba aún mirando la puerta de su oficina con su ceño ligeramente fruncido y sus ojos mostrando preocupación y miedo a la vez. Suspiro rendido y se puso de pie. No quería seguir estresando a su mejor amigo con el tema de los hijos.
—Bueno como sea. Piensa en la adopción y el bien de ustedes. Y por nada del mundo cometas algo estúpido.
Jungkook pestaño y una pequeña sonrisa aparece, se le hacía divertido como Taehyung se preocupaba de su relación con Eyol.
—¿Por qué me dices eso?
—Lo digo porque te dejas influenciar por las otras personas. Recuerda tus tatuajes que te hiciste a los veintidós, todo por influ...
—Ya —le cortó—. Ya lo tengo claro —suspiro un poco molesto. Taehyung alzo una ceja mirándole—. Lo tengo claro Taehyung.