Unos golpes desde afuera de la tienda nos despiertan, Rich aún está abrazándome y al darse cuenta saca su brazo despacio y me mira con una sonrisa.
— ¡Ya es hora de despertar! par de tortolitos— La voz de James nos termina despertando del todo.
Abro la tienda y la luz del sol invade nuestras caras y mis ojos duelen debido al impacto.
— ¿Qué hora es?— pregunto poniéndome mis sandalias.
— Son las siete de la mañana— Diana me contesta.
Doy un suspiro, pero no es tiempo de alegar por la hora aún nos queda camino por recorrer hasta llegar a nuestro último destino.
Salgo de la tienda y veo a Adrien poniendo la rueda de repuesto y James está guardando la que está pinchada.
Y como lo esperábamos el clima está igual o peor que ayer, hace muchísimo calor.
— La rueda ya está lista, y el coche igual, todo está en orden...Deberíamos irnos, ayer descubrí que es ilegal acampar por estos lados y no quiero que nos sorprenda la policía ya hemos tenido mucho por ahora— James dice sacudiendo sus manos.
Desayunamos y ordenamos las cosas para volver al Jeep, esta vez me toca ir de copiloto, leyendo el mapa y ayudando a James.
Pongo una canción en la radio y todos comenzamos a bailar y cantar como siempre lo hacemos en una carretera.
Saco mi cabeza por la ventana y dejo que el viento peine mi cabello, cierro mis ojos y sonrío por tal sentimiento, siento que estoy disfrutando de todo lo que me está sucediendo al fin, después de mucho al fin tengo lo que siempre quise: Una madre que me adora, una buena relación con mi padre, unos amigos a los cuales les podría confiar mi vida entera, y a Rich, aún no lo tengo pero el tener su amistad ya es suficiente.
— ¿Estás bien?— James me pregunta bajando el volumen de la música y los chicos ponen atención a lo que voy a responder algo preocupados.
— Claro, ¿Qué sucede?— pregunto algo confundida.
— Nada, solo que...llevas con la cabeza fuera por un buen tiempo— Dice Emma entre risas.
Río ante su comentario. Ni siquiera me he dado cuenta de cuanto tiempo llevo así.
Entro mi cabeza y me apoyo en el reposacabezas mirando el camino, hay algunos vehículos delante de nosotros.
El camino continúo por otro par de horas, hasta que el mar se comenzó a ver y también el muelle de Santa Mónica, junto con el famoso letrero de Hollywood y las palmeras en las calles.
— ¡Dios! se ve exactamente como lo muestran en las películas — Exclama Diana.
— Sí, ¡vamos al paseo!— Chilla Emma.
— ¡No! ¡Vamos al letrero!— Adrien dice asomándose hacía delante.
— ¡¿Estás loco?! son horas para llegar ahí, vamos a la playa...quiero bañarme en la famosa playa de Los Ángeles — James suspira.
frenamos en un semáforo en rojo, hay algo de trafico aún así en un Domingo por la mañana.
— Están algo desordenados...¿Qué pasó con el itinerario que creamos?— Pregunta Rich.
— No lo sé, ya se me olvidó— Dice Diana en un susurro, sonrío ante su comentario, Diana siempre despistada.
— Bien, creo que deberíamos dar una caminata por el paseo, almorzar e ir a la playa, ver un lugar donde sacarnos una foto que se vea el letrero y después podríamos ir al Pacific Park, y luego irnos a dormir para mañana por la mañana irnos de vuelta a casa— Emma nos dice lentamente para que entendamos, como una profesora le explica algo a un niño de primaria.
— Por mi está bien, me encanta— Diana asiente poniendo sus lentes de sol sobre su cabello.
— Sí, hagamos eso— Doy un aplauso dando a entender que estoy motivada.
— ¡Mira cuanta gente! es increíble— Emma exclama al ver hacía afuera a través de la ventana.
Lo más probable es que esté así de sorprendida porque ha vivido toda su vida en un pequeño pueblo donde todos se conocen entre todos y se sabe de inmediato cuanto hay alguna persona nueva y desconocida no como aquí en Los Ángeles, cómo lo que sucedió cuando nos mudamos con mamá, al otro día ya sabían todos que unas personas habían comprado la casa abandonada a un lado del bosque, pero a parte de ser un pueblo chismoso también es un pueblo muy acogedor, donde no te juzgan sin conocerte y tratan de dar una muy buena primera impresión, cuando estábamos arreglando la casa no paraban de tocar el nuevo timbre para presentarse y para traernos algo de comida para conversar un poco, pero así es Hill Street y no me arrepiento de haberme mudado con mamá allí, es lo mejor que pudimos hacer ya que hemos conocido a las mejores personas: Mamá conoció a Will con quien encontró el amor nuevamente y realmente es feliz otra vez, Y yo conocí a unas hermosas personas, a Adrien: que a pesar de que me echaba unas miradas de mala presencia al principio resultó ser una hermosa amistad la cuál sé que puedo contarle lo que sea porque él me ha demostrado que siempre está ahí para mi; A Emma, Una rubia que es muy dedicada a lo suyo, es muy ordenada y sofisticada además de respetuosa y eso es algo muy característico de ella, es una gran persona y una amiga de maravilla; a James: El italiano que a veces suele distanciarse cuando algo no le agrada, es una persona muy genial, sabe comprender cada pensamiento e idea, es un amigo el cuál le puedes confiar tu vida porque sabes que jamás te fallaría, además de ser un romántico de nacimiento se sabe expresar muy bien; Diana: Una persona muy dulce, es tan amable que hace parecer que fuera frágil y sus sentimientos siempre están a flote ya que es una persona muy abierta con ellos, los demuestra muy bien y es alguien que es muy sentimental, es una amiga estupenda, que se te hace imposible no contarle tus cosas ya que te transmite una confianza gigantesca; Cassie: A pesar de no hablar tanto con ella como lo hago con los chicos igualmente la considero mi amiga porque ha estado ahí para mi demostrándome que ella sí me considera su amiga, me ha ayudado un montón cada vez que me aconseja sobre algo y realmente es especial para mi; y luego está Rich: con quien he conectado de manera muy especial, o así lo siento yo, ya que desde el primer momento en que juntamos miradas a las afuera de la casa de Emma sentí algo por él solo que no me dí cuenta en ese entonces porque no sabía detectar ciertas cosas, y lo que conozco de él es que es una persona muy sensible, aunque algunas veces suele fingir que estaba bien y no era así, por lo menos yo solía detectar cuando no estaba estable, pero ahora está feliz, se le nota en la mirada, y es un amigo espectacular, me ha demostrado muchas veces que puedo contar con él para lo que sea. Y es por eso que le doy las gracias a mi madre, o debería agradecerle a mi padre o hasta a Kat, ya que por sus acciones he terminado conociendo a estas increíbles personas y no se que sería de mi si no los tendría en mi vida porque los considero sumamente importantes para mi.
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Editado: 26.04.2024