CAPITULO 19

HOLA A MIS QUERIDAS CHICAS..... QUIERO PEDIRLES DISCULPA POR NO ESTAR ACTIVA SUBIENDO CAPITULOS, PERO ESTOY MUY LIADA EN MI TRABAJO Y LLEGO TARDE A CASA. ACA LES DEJO UN POCQUITO MAS DE LIAM Y DANNA.

DANNA

Me veía ahí en una disco con mi prima, su futuro esposo y el gran amor de mi vida, como la primera vez que Thomas vio Alina y quedaron flechados; o yo llena de ilusión encontré a Liam por segunda vez para darle inicio a nuestra maravillosa relación de un corto verano.

Me sentía incomoda, Liam no me quitaba la vista y sentía que me desnudaba con la mirada; es cierto que vestía un vestido muy corto y tacos altos, pero por eso él no tenía que desnudarme con los ojos.

Pienso que Liam no quiere entender que ya no somos parejas y que él ya tiene a otra mujer en su vida, no les voy a negar que eso me duele, pero pienso que ya que él siguió su vida yo también debería seguir la mía y darme la oportunidad de tener a alguien en mi vida.    

Luego que buscamos una mesa y Thomas pidió bebida para todos, la feliz pareja se fue a la pista de baile y por supuesto yo me quedé sola con él.

No sabía que hablar con él porque una simple mirada me ponía muy nerviosa.

─Deja de mirarme tanto ─le dije porque ya no aguantaba su mirada sexi y al mismo tiempo inquisidora. Mi cuerpo se estremecía cada vez que veía sus bellos ojos. 

─Siempre te gustó que te mirara ─dijo con tono seductor.

─Eso es pasado, ya te lo dije. Liam por favor no hagas las cosas más difíciles entre nosotros, tú tienes pareja y yo… yo sigo con mi vida.

Mientras yo le decía esas palabras para marcar distancia entre ambos él se movía lentamente hacia mí.

─¿Qué estás haciendo? ─pregunté cuando estábamos frente a frente, en un rápido movimiento estaba acariciando mi cabello, luego se movió lentamente hacia mi oído. Sentía su respiración agitada, su cálido y rico aliento.

─Porque tu cuerpo aún me quema, las noches sin ti son eternas Nena. Siento un abismo inmenso desde que no te tengo. Tu aroma y besos siguen ahí torturándome y no me dejan avanzar. Tus labios me queman.

Sus palabras me hipnotizaron, estaba cautiva con su dulce y sensual sonido que despertaron mi sentido, mi deseo por besarlo, por estar entre sus brazos.

Nos miramos con deseo, con hambre de devorarnos y fue en ese instante cuando no aguantamos más y nos besamos. Un beso salvaje, devorando nuestros labios; nuestras lenguas hambrientas se enredaban con feroz frenesí.

─Nena te deseo, te necesito conmigo ─susurró lentamente haciendo que cada poro de mi cuerpo sintiese sus palabras.    

Tomé mi trago y lo bebí hasta que no quedó nada en el vaso. Le di una tierna sonrisa. Sus ojos estaban brillando de deseo y mi cuerpo solo quería estar con él.

En ese momento llegó Alina y Thomas. Después que tomaron asiento se miraron y al unísono nos preguntaron si pasaba algo, ambos negamos moviendo la cabeza.     

Fueron muy inoportunos, llegaron para interrumpir nuestro coqueteo.

─¿Les importaría si me robo a Danna? Necesito hablar en privado con ella ─ les dijo a nuestros acompañantes, lo miré un poco extrañada por su atrevimiento.

─¿Y si yo no quiero ir? ─pregunté para ver su reacción, sabía que eso le dolería y se iba a molestar.

Se acercó a mí de una forma rápida y me susurró al oído ─Sino te paras y te vas conmigo te voy a sacar cargada, tú decides ─Abrí los ojos, no pensé que se iba a convertir en un estúpido cavernícola y asentí porque no quería que diéramos un espectáculo delante de todos en el lugar.

Con una seña le indique a la feliz pareja que me iba con Liam antes que hiciera de estúpido y dañara el momento. 

Ya montados en su coche, el pisó el acelerador a toda prisa sin decir nada.

─¿A dónde vamos? ─pregunté un poco exasperada

─A mi departamento, quiero que hablemos y no quiero que nos interrumpan.

Abrí los ojos como huevos fritos, iba a estar en su espacio, en su terreno indefensa, sabía que eso era un grave error, pero, ¿qué es lo peor que puede pasar? ¿qué peleemos y rompamos las cosas? Para nada, no tenía la intención de hablar, solo lo voy a escuchar y tomare un taxi y me iré a casa de mi prima, ya mañana tendremos tierra de por medio y seguiré con mi vida, aunque sé que eso me dolerá mucho porque aún sigue existiendo ese sentimiento en mí por él.

Cuando salí de mis pensamientos ya estábamos llegando a su edificio. Subimos el ascensor, vi cuando coloco una llave para digitar un código que nos conduciría al último piso del edifico.

Cuando las puertas del ascensor se abrieron me sorprendió lo bello y acogedor de su espacio.

Estaba todo decorado en blanco y negro, una decoración exquisita todo combinado y de muy buen gusto.

─Siéntate, por favor ─Me pidió mientras se servía una copa de whisky de su enorme bar.

─Es un lugar muy espacioso para un hombre soltero ─me salió decir para romper el hielo.

Me miro con un aire de conquistador y su mirada coqueta que me dejaron sin aire, cada gesto que hacía era para ver como reaccionaba a sus encantos, pero tenía que mantenerme fuerte y no dejarme llevar por el deseo y el amor que aun sentía por el…. Es difícil desear tanto a una persona y no querer pecar.