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JIMIN Y JUNGKOOK.

Ya había pasado una semana para ser exactos desde aquel terrible suceso, al volver a la mansión Jungkook le confesó todo a Jimin y este último decidió tomar distancia. Jungkook no era malo, él estaba seguro de eso pero aún así no podía seguir involucrándose, ¿Y si su mamá llegaba a correr peligro por su culpa? No podía exponerse a eso.

Había evitado al pelinegro toda la semana, siempre que lo buscaba saliendo de la escuela o de su trabajo de medio tiempo Jimin le decía que tenía algo que hacer, entre más lejos estuviera de Jungkook sería mejor para él y para su madre.

Aunque no podía negarlo, le dolía demasiado, su Omega estaba profundamente enamorado de aquel Alfa y a él realmente le gustaba la manera en la que Jungkook lo trataba, era tan cariñoso y lindo que no podía evitar sentir ese tipo de cosas.

Volvió a casa a las 5:00 pm, se cambió los zapatos y se adentro a la sala encontrándose con quién menos esperaba ver en aquel momento ¡Jungkook estaba sentado en su sofá tomando el té tranquilamente con su madre! Tenía que ser un sueño o una pesadilla.

Oh Minnie que bueno que llegaste, este joven y apuesto Alfa dice ser tu novio, ¿Por qué no le contaste nada a tu omma?

Jimin prácticamente se ahogó con su propia saliva, ¿En qué momento se había echo novio de Jungkook? Si tenían algo, bueno, realmente solo estaban saliendo pero no eran novios ¿O si?

O-omma.... Y-yo, ammm. –No sabía que decir y empezó a balbucear cosas sin sentido–.

Señora Park, ¿Me permitiría unos momentos a solas con Jimin? Hace mucho no nos vemos y me gustaría hablar algunas cosas con él.

Claro que si hijo. Minnie, iré a mi habitación para darles privacidad, luego quiero que me expliques.

La señora Park se despidió de Jimin dando un beso en su frente y luego se dirigió a su habitación dejando a ambos completamente solos.

Tu madre es un amor de persona, enserio debiste presentarmela antes Minnie. –Le hablo dulcemente, realmente había extrañado mucho a su Omega–.

¿Qué haces aquí Jungkook? No debiste venir a mi casa, ¿Y si alguien te siguió? Si le pasa algo a mi madre te juro que voy a....

Sus palabras fueron calladas por los labios del Alfa, al principio se negó a corresponderle pero segundo después sus labios se movían al mismo compás.

Jimin, ni a tí ni a tu madre les va a pasar nada, te lo juro, te amo tanto y te extrañe como no tienes idea. Mi amor, mi lindo Omega, ya no te alejes más, te lo suplico.

Kooki~ –Le susurró para luego aferrarse a él con fuerza, sus palabras lo derritieron completamente– Y-yo también te extrañe mucho, pero tengo miedo, no quiero que te pase algo o que le hagan daño a mi mamá si estoy contigo, lo lamento.

El Alfa negó ligeramente antes de volver a unir sus labios con los del tierno Omega que tenía como destinado, nada en este mundo lastimaría a su Omega mientras el estuviera vivo.

Voy a solucionar todo mochi, te lo prometo, dejaré todo este mundo atrás pero por favor no te alejes de mí.

¿E-enserio harías eso Kooki?

Yo haría cualquier cosa para estar contigo mi dulce Omega, mi Jimin precioso.

Oh Kooki~ gracias por todo, enserio.

Te amo Jimin, te amo mucho, realmente lo hago.

Juntaron sus labios una vez más demostrándose todo el amor que sentían el uno por el otro, realmente nada podría separarlos, la madre luna los había unido y ningún Alfa u Omega sobre la faz de la tierra podría separarlos, aunque Jimin no tuvieran una marca su lazo ya era muy fuerte.

Yo... también siento cosas por tí... Te amo Jungkook.

Le susurró con las mejillas completamente rojas, ante los ojos del Alfa parecía una fresa, una muy apetecible.

Entonces, ¿Me harías el honor de convertirte en mi novio?

Sería un placer para mí ser tu novio Jungkookie~

Jungkook acaricio la mejilla de Jimin con suavidad y le regaló una hermosa sonrisa de conejo antes de repartir besos por toda su cara, ambos eran completamente felices cuando estaban juntos y eso nadie lo podía negar.