Cuando inicie mi tercer año de carrera no tenía amigas.
O quizás sí, pero la que tenía solo pensaba en tener sexo con su ex novio y mis otros dos amigos se encontraban en otro estado estudiando e Itzel, bueno ella estaba vagando por la vida. Así que ahora estoy sola, comiendo un sándwich observando a la gente pasar.
- ¡Hola! – Escuche una voz un poco chillona a mi lado. – Me llamo Aracely y seré tu nueva amiga.
- ¿Quién te dijo que necesitaba amigos? – Calla la boca y solo acepta tener a esta pobre e inocente chica aquí contigo para no tener que estar almorzando en los baños sola.
-Bueno, estas sola, estoy sola. Una pareja perfecta. – Y vi como agarraba mi otro sándwich y lo empezaba a comer. – Estudio para ser maestra de español, no le caigo bien a las personas por ser genial y no me importa. Tengo 20 años, vivo cerca de aquí, estoy becada y me encanta la música en inglés.
-Que bien. – Y seguí comiendo.
-Sí, ¿no me hablarás de ti? – Vi empezaba a agarrar mi agua.
-No, oye ¿podrías parar?
-¿Disculpa?
-Sí, para de agarrar mi comida.
-Las amigas comparten su comida.
-Bueno, no somos amigas.
-Lástima que no me importa lo que digas. – Y agarro mi botella de agua para beberla en frente de mí casi burlándose.
***
-Así que estudias psicología.
-Sí, así es.
- ¿Y no tienes amigas?
-Bueno sí, es esa que esta con el tipo moreno de haya, – Dije viéndolos desde el banco en que estábamos – pero ella ahorita está ocupada en otras cosas.
-Uh, ¿en sexo?
- ¿Qué?
-Amiga, toda la escuela sabe que Irma y ese tal Carlos se van una que otra vez a los baños a calmar su calentura. No te preocupes todo está bien, aquí entre nos ese tipo es horrible. – Dijo susurrando y con un poco de misterio haciendo que me acercara a ella. –Ella pudo conseguirse a alguien mejor.
-Él es buen amigo, muy buen consejero y aparte...
-Buen amigo mi pecho izquierdo. – Dijo tocándose su pecho. – Es tiempo que lo dejes aparte y te vengas conmigo.
-No estamos en las mismas carreras.
-Pero, que pensamiento tan estúpido te cargas. Soy mejor que tú en muchos aspectos y podré darte mejores consejos que él, y ¿sabes por qué?
-Porque eres Aracely. – Dije con un poco de aburrimiento y pena.
-Porque soy Aracely y soy mujer. – Dijo aplaudiendo y dando unos pequeños saltos. – Ya me conoces mejor, ¿notas cómo sí seremos mejores amigas?
-No. – ¿Por qué seguía con ella? Bien podría levantarme he irme, pero no. Estoy sola y ella es la única que me ha notado.
-Ahora, ven. – Dijo ignorando mi "no." – Te voy a presentar a mi lugar preferido de esta escuela.
Y después de presentarme otros cinco lugares favoritos, era fin de nuestra hora libre y era tiempo de regresar a nuestras aulas.
-Antes de que te vayas – Dijo sacando mí celular de mi pantalón – Este es mi número. – Dijo escribiendo. – Y cuando termino de escribir su número entro a Facebook. – Y este es mi Facebook, te aceptare en cuanto llegue a casa. Mi celular a muerto por el bien de la patria. Así que planeo ir a comprar otro saliendo de aquí. – Después de decirme eso, se fue riendo y casi corriendo a su aula porque no la dejarían entrar. Lo contrario a mí, pues a mis profesores no les interesaba si entraba 15 minutos tarde.
-Bien Jennifer – Me dije susurrando y viendo cómo se perdía la pequeña Aracely entre las personas. – Parece que ya tenemos una nueva amiga.