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Capítulo catorce: Los secretos del guardián

El aire en la vieja granja de Elias Thorne era denso con el aroma a heno, tierra húmeda y el tenue olor a libros viejos. Emily, con el Medallón del Ojo cálido sobre su pecho, observaba al anciano con una mezcla de cautela y una desesperada esperanza. Sus palabras – "He estado esperando por ustedes. Por mucho, mucho tiempo." – resonaron con el peso de una verdad ancestral. Lucas, aún débil, se aferraba a la mano de Emily, sus ojos grandes y llenos de asombro y miedo.

Elias Thorne era un hombre de aspecto austero, con manos curtidas por el trabajo de la tierra y ojos penetrantes que parecían ver más allá de la superficie. Su cabello blanco y su barba canosa contrastaban con la vitalidad de su mirada. Llevaba una camisa de cuadros y pantalones de mezclilla, ropa de trabajo que desmentía la sabiduría que emanaba de él.

—Entren, niños —dijo Elias, su voz grave pero reconfortante—. Están a salvo aquí. Por ahora.

Los guio al interior de la casa. El lugar, aunque rústico, era sorprendentemente acogedor. Una gran sala con una chimenea crepitante que desprendía un suave calor, estanterías repletas de libros polvorientos y extraños artefactos de madera y metal. El aire olía a hierbas secas y a un vago aroma a éter. Era la casa de un ermitaño, de un estudioso, de un guardián.

Elias los condujo a una mesa de madera maciza en el centro de la sala.

—Siéntense. Están exhaustos. Lucas, necesitas descansar y alimentarte. Emily, tenemos mucho de qué hablar.

Emily ayudó a Lucas a sentarse en una silla de madera. El anciano trajo un plato de sopa caliente y un trozo de pan rústico. Lucas comió con avidez, sus fuerzas comenzando a regresar con cada bocado.

Mientras Lucas comía, Elias se sentó frente a Emily, sus ojos fijos en el Medallón del Ojo.

—Así que el Ojo de la Verdad ha elegido una nueva portadora —dijo Elias, su voz llena de reverencia—. Eleanor Douglas lo predijo. Tu tatarabuela fue una mujer extraordinaria. La última Guardiana Pura antes de tu padre.

—¿Usted conoció a mi tatarabuela? ¿A Eleanor Douglas? —preguntó Emily, la sorpresa en su voz.

Elias asintió.

—Fui su pupilo, en cierto modo. Eleanor me confió muchos de los secretos que los Douglas han custodiado por generaciones. Ella sabía que los Queen no se detendrían, y que necesitaríamos aliados en las sombras. Me preparó para el día en que el gen Douglas regresara en su forma más pura. Ese día es hoy, Emily.

—Nora Queen dijo que mi familia estaba "extinta" —dijo Emily, con un nudo en la garganta.

—La línea principal fue diezmada —corrigió Elias, su voz grave—. Pero no extinta. Tu padre, Robert Douglas, fue valiente. Él intentó romper el ciclo, huir de la carga del gen. Tu hermano, Katashi, también tenía una manifestación del gen, aunque no la "pureza" que posees tú. Ambos intentaron protegerte, ocultar la verdad para que pudieras tener una vida normal. Pero la oscuridad siempre encuentra su camino.

Emily sintió un dolor agudo en el pecho. Sus padres, su hermano… habían muerto intentando protegerla.

—¿Por qué? ¿Por qué los Queen están tan obsesionados con el Gen Douglas? ¿Y qué es el Consumidor?

Elias suspiró, el sonido pesado con el peso de siglos de conflicto.

—Para entender eso, debemos remontarnos al origen. El Gen Douglas no es solo una habilidad extrasensorial. Es una mutación ancestral, una anomalía genética que permite a sus portadores interactuar con la Red Etérica. Imagina el universo como un inmenso entramado de energía e información. El Gen Douglas es una llave que permite a sus portadores acceder a fragmentos de esa red, a patrones, a flujos de energía. Tus visiones del pasado, tu capacidad para sentir la energía de la tierra, para "ver" la ubicación de las personas, incluso para influir en el entorno, como hiciste en la cueva y la plaza de Hope, son manifestaciones de esa conexión.

Emily asintió, su mente tratando de procesar la magnitud de esa revelación.

—¿Y el Ojo de la Verdad? ¿Este medallón?

—El Medallón del Ojo es un foco, un amplificador —explicó Elias, sus ojos fijos en el medallón de Emily—. Fue creado por los primeros Douglas para canalizar y estabilizar el poder del gen. Sin un foco, el gen puede ser inestable, incluso peligroso para el propio portador. Puede causar agotamiento, visiones incontrolables, e incluso locura si no se maneja adecuadamente. Eleanor lo ocultó precisamente porque sabía que, si caía en manos equivocadas, o en manos de un Douglas sin la preparación adecuada, sería un faro para los Queen.

—Y los Queen… ¿qué son ellos? —preguntó Emily, su voz tensa.

—Los Queen no son portadores naturales del Gen Douglas —reveló Elias, su voz grave—. Son una línea de sangre que ha dedicado siglos a estudiar, y a parasitar, el Gen Douglas. Hace mucho tiempo, un ancestro Queen descubrió la existencia del gen y su potencial. No pudieron replicarlo, pero encontraron formas de manipularlo, de forzar a los portadores Douglas a canalizar su poder para sus propios fines. Su objetivo siempre ha sido el control. Controlar la Red Etérica a través de un Douglas "puro" para moldear la realidad a su antojo. Para ellos, el conocimiento es poder, y el poder debe ser absoluto.

Emily recordó las palabras de Nora: "moldear el mundo", "guerra".

—¿Y el Consumidor? ¿Esa sombra que vi en la plaza?

El rostro de Elias se ensombreció.

—El Consumidor no es un ente físico, Emily. Es una entidad parasitaria etérica. Una abominación que fue liberada por los primeros intentos de los Queen de forzar el gen Douglas. Cuando los Queen intentaron manipular la Red Etérica sin la pureza y el equilibrio que los Douglas defendían, abrieron una brecha. El Consumidor es el resultado de esa brecha, una especie de agujero negro de energía que se alimenta de la distorsión y el sufrimiento. Cada vez que los Queen fuerzan un ritual, cada vez que drenan energía del gen Douglas o de los "cascarones", el Consumidor se alimenta y crece. Nora Queen cree que lo está controlando, pero en realidad, es él quien la controla a ella. La atrae con la promesa de poder ilimitado.



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En el texto hay: juegos prohibidos, pantano, misterios y secretos

Editado: 08.07.2025

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