SINOPSIS

Después de cada caída hay un nuevo comienzo, es lo que siempre me repetía yo misma todos los días, ya parecía una loca, hasta creía que había otra voz en mi cabeza que me decía que hacer, pero yo tan cobarde que era nunca lo hacía, por eso termine haciendo lo que nunca me ha gustado ni me gustara.

Al entrar a la universidad tus padres te obligan a seguir una carrera que quieres o le alientan a seguir lo que tu ama, pero cuando ni quieres entrar a la universidad que harían tus padres, bueno yo les voy a contar que hicieron, primero me tacharon de loca ósea de irresponsable, luego de me dieron una charla sobre superación y que un título es importante para trabajar y bla, bla, bla ustedes ya saben esas charlas y bueno si no ya entenderán después, y por ultimo me obligaron a escoger una carrera pero como yo no quería entre a estudiar contabilidad, si aunque piensen  que es algo loco, para mi imagínense matemáticas nunca, pero nunca me han gustado esa materia, bueno tampoco que sea mala en eso, pero igual, acabe estudiando contabilidad y después de cuatro largos de mi vida por fin me había graduado de licenciada en contabilidad, mis padres felices estuvieron de mi y yo pues sonreía aunque en esos años que estaba estudiando entendí lo que yo quería seguir.

Ahora mi meta era seguir mis propios sueños, pero antes de eso era conseguir un trabajo y para mi suerte me contrataron para ser secretaria de una clínica de salud, aunque no era complicado, ya que en mis prácticas en la universidad me ayudaron mucho y también las demás secretarias ya que habían dos más, me enseñaron todo lo que debía hacer, gracias a dios aprendí rápido no era complicado solo era recibir llamadas para citas médicas y organizar todo.

Al fin después de dos largo años que para mí era una eternidad, tenia ahorrado un poco, ahora vivía sola en un hermoso departamento pequeño y era mi propia dueña, pues ahora tenía privacidad y podía hacer lo que quería, mis padres vivían juntos con mis hermanos, cierto me olvide decir que tengo dos hermanos uno tiene 18 años y el otro 16, bueno como verán soy la mayor. Como decía ahora podía hacer lo que mas deseaba en el mundo, pero no, pues me enamoré o yo pensé, es un chico tan lindo no solo físico sino también sentimental, era caballeroso y muy detallista, es abogado amiga de una de la secretaria que ahora eran mis amigas. Todo parecía bien, aunque como toda pareja teníamos discusiones que siempre solucionábamos, no como piensan (ósea con sexo), bueno teníamos una relación bonita y estable.

Toda mi historia comienza a partir de ahí por eso me he vuelto tan cobarde y siempre me repetía la misma frase DESPUES DE CADA CAIDA HAY UN NUEVO COMIENZO y si quieres saber mi historia y quieres descubrir si seguí mi sueño sigue adelante y si no retrocede, porque esta es mi historia y no es para cobardes, no seas como yo cobarde.

Si decidiste seguir adelante…