Tu frío abrazo me descolocó de una forma inimaginable.
Esperaba sentir tu calor, tu amor, tu aroma.
Pero me llevé una gran sorpresa, cuando solo recibí uno frío que estremeció todo mi ser.
No entiendo que fue lo que sucedió, porque me has roto el corazón de esta forma.
Pero tal vez sea mi error haber pensado que yendo a ti, iba a recibir amor.
Tal vez debí marcharme cuando tus ojos se posaron en mí y vi tu frialdad.
Tal vez tuve las señales ante mis ojos y no lo quise ver.
Pero, ¿puedes culpar a un corazón por sentir tanto por ti?
¿Puedes culparme por ilusionarme?
¿Puedes?
Pero entiendo, tal vez no era el momento correcto.
Tal vez, algún día, entiendas que eras único para mí y por eso no pude alejarme cuando debía.
Tal vez, algún día, entiendas que solo pedía un poco de amor.
Pero también sé que ese fue mi error, lo sé, perdóname por pretender algo que nunca ibas a darme.
Perdóname por buscarte, cuando tú no querías verme.
Entiende que te amaba y a veces, aunque estuviera mal, me conformaba con solo verte.
Espero que algún día encuentres a la mujer a tu medida.
Porque yo me marcho, te libero, te suelto, de dejo ir.
Aunque mi corazón lo resienta, aunque se marchite.
Pero todo se cura con el tiempo y me aferraré a eso con uñas y dientes para no volver nunca más a un lugar que solo me dio dolor y desamor.