Este capítulo va dedicado especialmente para Cecilia, gracias nena por tu Estrellita…
Siento que me sacuden, me remuevo en mi lugar y giro hacia Valeria.
- Leo. Susurra Valeria.
- Qué pasa nena. Digo adormilado.
- Te… llego un mensaje.
- Así, que dice?. Digo con los ojos cerrados acomodándome para volver a dormir.
- “Que tengas bonita noche” de Aleja. Dice Valeria y mis ojos se habrán de par en par, saltando en mi lugar y dándome la vuelta para ver a Valeria. Veo su mirada y me ve seria esperando una respuesta.
desde hace un par de meses Aleja y yo nos asignaron la patrulla 09, nos llevamos muy bien, Ayer Aleja se enfermo de gripe y tenia temperatura alta, así, que sin decirle nada al comandante Miller la lleve a su casa con la patrulla, le prepare un té, le di una aspirina y la deje en su departamento para que descansara, pero al despedirme le dije “que tengas bonita noche” ella me miro a los ojos y me sonrío, no me dijo nada.
- Ayer Aleja enfermo y la llevé a su casa, cuando me despedí de ella le dije que tuviera bonita noche, supongo que igual me desea lo mismo. Le Digo a Vale un poco extrañado por el mensaje.
- A… pobrecita y cómo siguió?. Pregunta mi niña.
- Siguió mejor, hoy en la mañana la pase a traer para que fuera a firmar y no le descontarán el día.
- Eres muy bueno mi niño. Dice Valeria y me da un beso en los labios.
- Durmamos ya, descansa mi niña, TE AMO. Le beso la frente y la abrazo.
La verdad es que Aleja ha sido algo coqueta conmigo, no le había dado tanta importancia hasta que en una ocasión se le regó el café hirviendo en la playera y se la quito rápido, se suponía que quedaría con la camiseta que traía abajo pero como también se mojó, quedó pegada en su playera dejando al descubierto su sostén negro que hacía levantar su busto grande.
Trato de no pensar en eso por respeto a Valeria pero no he podido, mi mente sigue clavada en lo que vi.
1 mes después …
Voy conduciendo mi moto rumbo a la casa, estoy un poco molesto le marque a Valeria 2 veces y no me respondió, no sé qué la tiene tan entretenida que no responde el teléfono, voy aparcando la moto enfrente de la casa y la veo por la ventana de la cocina que está preparando algo, alza su mirada y me muestra una enorme sonrisa. Al instante mi enojo se va, no se porque me estoy enojando muy fácil, abro la puerta de la cerca y meto la moto, me quito el casco y camino hacia la puerta ella la abre y nos abrasamos.
- Hola nena, cómo estás?. Digo más tranquilo.
- Estoy bien mi amor, te estaba esperando, ven, te preparé panqués y chocolate con leche.
Toma mi mano y me jala hasta la mesa de la cocina, veo que ay una bandeja con los panqués y una taza de chocolate caliente alado, me siento y comienzo a comer, veo la cara de Valeria emocionada ya que tenía mucho que no los cocinaba.
- Y bien, que te parecen?. Dice sonriente.
- Ee… están ricos. Digo, pero la verdad es que no son mis favoritos. Aleja me llevo algunos al trabajo y estaban delicioso y me dijo que los preparo ella.
- Estás bien? Veo en tu rostros que no te agrado del todo. Dice Valeria algo decepcionada.
- Nada mi niña estaba… pensando en el trabajo, fue una noche pesada, que dices si salimos a comer en la noche?.
- Jejejeje si mi niño, lo que digas pero de mientras come. Dice Valeria feliz.
Seguimos comiendo y cuando terminamos de comer Valeria comienza a lavar los platos y yo me voy a bañar para dormir algo.
Estoy en la regadera todo mojado y siento unas manos en mi espalda y volteo.
- Vale, me asustaste. Digo y mis ojos se plantan en su cuerpo desnudo solo para mi.
Ella comienza a entrar a la ducha mientras nos besamos, la tomo del hermoso trasero que tiene y la levanto haciendo que sus piernas rodeen mi cintura. Comienzo a besarle el cuello, después los senos y comienzo a darle estocadas.
Oírla gemir de placer es música para mis oídos, siento su cuerpo arquearse de la ex!tacion y ya cuando voy a terminar escucho sus gemidos mas fuertes que me indican que se está corriendo lo que hace correrme a mi. Mi respiración es agitada como la de ella que tiene su cabeza reclinada en mi hombro.
Después de terminar de bañarnos, ambos nos secamos y nos vamos a la cama, le pido que me acompañe a dormir y se recuesta a lado mío, la abrazo y ambos que damos dormidos con una cobija caliente ya que hace frío y seguimos desnudos.
horas después…
Ya se está haciendo de noche Valeria se está alistando para ir ya a cenar al restaurante donde la llevaré, yo estoy sentado en el sofá viendo una serie, después de un rato escucho a Valeria.
- YA ESTOY LISTA!. Grita desde la habitación, apago la tv y me voy hacia el cuarto para alistarme. Voy entrando y veo a mi niña Valeria con un hermoso vestido corto color rosa pastel que hace juego con sus tacones altos, veo sus ojos que resaltan con el maquillaje que se ha puesto.
- Te… te vez hermosa mi niña. Observando su gran belleza.
- Jejejeje gracias mi amor te espero en la sala. Dice Valeria, toma su cartera y sale de la habitación rumbo a la sala.
Yo ya tengo lista mi ropa solo me pongo mi camisa celeste, mi pantalón color hueso y mi saco azul, me pongo los zapatos, me peino y me perfumo, tomo el reloj y me lo coloco en la muñeca después de unos minutos estoy listo y salgo para donde esta Valeria.
- Bueno, que dices si nos vamos. Digo a Valeria que está sentada en el sofá.
- Claro. Dice y me sonríe.
Ambos subimos a la moto y nos vamos al restaurant Lilia.
Un rato después vamos llegando y ambos bajamos de la moto.
- Ya tenia que no salíamos. Dice vale.
- Lo sé nena, hace días quería traerte pero no hubo oportunidad para venir hasta ahora.
Ambos caminamos hacia adentro del restaurant, le doy mi nombre al Host y nos pasa a nuestra mesa. El camarero nos da el menú y no entiendo nada de lo que dice, jamás había visitado un restaurant italiano, ok ya de todos modos lo intentaré decir, veo a Valeria viendo muy tranquila el menú y pide un fetuccini Alfredo, no tengo idea de lo que dijo yo sigo viéndola y de repente ella me ve a los ojos y rápido bajo la mirada al menú.
- Disculpe podría darnos un momento por favor. Dice Valeria al camarero.
- Mi vida, estás bien?. Dice Valeria.
- Si si lo estoy. Digo algo nervioso.
- Em… sabes que pedir?. Dice Valeria con tono suave.
- La verdad es que no es, es la primera vez que vengo a un restaurant italiano. Digo algo avergonzado.
- A, a ver, dime que te apetece y te digo cual es en el menú ok.
- Ok ok, em yo digo que pasta.
- De que pasta te gustaría, alguna?.
- Si está bien y de beber algún vino? Pero cual pido?
- Mira, vas a pedir un spaguetti carbonara te la recomiendo y de tomar pedirás un Vino Orvietto.
- Ok, gracias nena. Le digo a Valeria un poco apenado, por no saber todo esto, bueno, después de todo se que Valeria no se burlará de mi.
El camarero se acerca y le digo lo que me dijo vale, él se retira y después de un rato regresa con el vino y después con nuestros platillos. Vale y yo conversamos muy divertidos hablando sobre nuestros papás, sobre mi trabajo sobre nuestros amigos y sobre cómo ambos hemos llevado la relación.
- Recuerdas la primera vez que nos vimos.
- Lo sé, estaba tan avergonzada, me dio risa cuando tu tío ardía le hacia cara graciosas a tu papá. Se ríe
- Así son ellos, ay amor!, recuerdo ver tus ojos por primera vez ese día, te veías tan linda.
- Jejejeje gracias mi vida. Dice Vale.
Después de platicar y comer ambos nos retiramos del lugar y nos dirigimos hacia la moto.
- Nena que dices si vamos al parque Green te párese?.
- Así vestidos? Jejejeje claro. Dice Valeria y ambos nos vamos al parque en la moto.
Llegando caminamos por el lugar iluminado por las lámparas del parque, ay algunos niños corriendo otras parejas sentadas en las bancas, algunas chicas sentada en el pasto.