-Dania, acepta mis felicitaciones por tu triunfo- dijo la directora acercándose a la muchacha, colocándose a su lado para hacerse una foto. Bajo las luces de los flashes, relucían el trofeo y el cheque entregados a Dania por su victoria.
-Gracias, directora, fue un honor haber ganado nuevamente- la voz de Dania retumbó con un tono vibrante de alegría.
Dania y Tom, su profesor, habían abordado un vuelo de regreso a Brasil. Al aterrizar al día siguiente, cada uno se fue a su casa antes de reencontrarse en la escuela, donde a Dania le esperaba una pequeña fiesta organizada por el personal del colegio en honor a su triunfo.
-Profesor Tom, agradezco enormemente su apoyo en este viaje- la directora se dirigió a Tom antes de darle la palabra a Dania con una sonrisa indulgente. -Por primera vez, no tenemos ni una queja acerca de nuestra famosa estudiante. Parece que este viaje ha tenido un buen efecto en ella.
Dania respondió con una mirada de desdén antes de sonreír tristemente. -Este ha sido mi último concurso representando a esta escuela- dijo suavemente.
-Fue un viaje increíble, todo muy hermoso, realmente vamos a extrañarte Dania- aseguró Tom.
Dania se levantó y miró a todos. -Este viaje ha sido más que increíble. Aprendí mucho, y por eso quiero anunciar que mi comportamiento cambiará a partir de ahora; de verdad, quiero cambiar.
Las palabras de Dania quedaron suspendidas en el aire, sorprendiendo a todos. Tendrían que esperar y ver si esto era solo una broma más de Dania o si representaba un verdadero cambio en ella.
Tom salió de la sala de maestros para continuar con sus clases.
Al salir choco con una persona o para ser precisos una chica.
-perdón profesor no vi por donde caminaba- se disculpó aquella chica pelirroja.
-no te apures- Tom ayudo a la chica a recoger lo que se le callo -solo ten cuidado la próxima vez...- No terminó de decir la frase ya que dudo sobre el nombre de la chica ya que no lo recordaba.
-Sophia, me llamo Sophia profesor Tom de hecho soy su alumna- sonrió la chica
Tom le regreso la amable sonrisa y trato de continuar con su camino, pero la chica lo detuvo
- ¿y como le fue en su viaje con... Dania? - menciono el nombre entre dientes dando un suspiro pesado
-me fue bien, pero ¿por qué mencionas a Dania con ese tono de molestia? - entrecerró los ojos esperando una respuesta de la chica
- es obvio profesor a nadie le cae bien Dania, cree que es la gran cosa por ser tan inteligente y tener muchísimos reconocimientos, ella piensa que está por encima de los demás lo que no sabe es que hay más personas que la pueden vencer en todo lo que ella es buena-
- ¿y tu serías una de esas personas? -
-claro que sí, pero no lo hago por no humillarla frente a todos y vean que no es tan perfecta como todos creen- Esta chica realmente piensa muy mal de Dania y lo único que hizo Tom fue darle unas palmadas en el hombro y continúo con su camino.
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Tom estaba dando su clase y para sorpresa de todos Dania estaba sentada en su lugar observando la clase con atención, era extraño ya que la chica se saltaba todas las clases y por primera vez estaba en una clase desde inicio y pretendía quedarse ahí hasta el final.
Lo curioso aquí es que Tom y ella de vez en cuando compartían miradas sin que nadie se diera cuenta.
Nadie jamás hubiera creído que ellos dos formaron una amistad o eso se podría decir.
- ¿Y qué tal te pareció mi clase? - pregunto Tom a Dania cuando termino su clase
- bueno no está nada mal- la chica le guiño el ojo
- Hey, vámonos a casa estoy muy cansada- se acercó Katy a ambos
-lo bueno es que tu no viajaste 11 horas en un avión- río Dania junto a su amiga
-van hacia la salida chicas- ambas asintieron -voy con ustedes deje mi coche justo en la entrada- Tom fue con las chicas
Los tres caminaban juntos hacia la salida platicando sobre el viaje, obviamente omitiendo la noche en que tomaron vino y omitiendo el beso entre ellos dos.
-en pocas palabras nos encantó el viaje- dijo Dania con mucha emoción
-El lugar estuvo muy hermoso-
-hay que padre, yo después de que termine la escuela me iré a vivir a Londres- comentó Katy
Continuaron su camino hacia la salida, disfrutando de la compañía mutua cuando Katy señaló algo con entusiasmo.
- ¡Miren qué bonito! - exclamó, apuntando hacia un joven que esperaba a su novia con un ramo de flores en la mano. Su cabello castaño, su altura, su piel blanca y sus ojos verdes lo hacían destacar. -Sería maravilloso que tu novio te recibiera así, ¿verdad, Dania?
Dania se quedó paralizada, observando al joven con asombro y sin moverse de su lugar. En ese instante, las emociones la invadieron y...
- ¡Diego! - gritó Dania, corriendo hacia él y fundiéndose en un abrazo apasionado.
Katy y Tom se acercaron, curiosos por las emociones desbordantes de Dania.