Esto es guerra, querido vecino

4.Cena Incomoda

Oficialmente soy la persona más torpe y con más mala suerte de este planeta.

Toparme con Tyler en mi edificio había sido una total y ridícula sorpresa para mí – ¿Stone? –Aparte un par de cajas de su pecho mientras lo examinaba con detenimiento – ¿Qué haces aquí? –para colmo de males el golpe había roto por completo la pantalla de mi celular. Esta no parecía ser una broma típica más pues su cara de confusión era igual a la mía.

-¿Acaso me está siguiendo, niña tonta? –esas palabras valla que si me tomaron por sorpresa; ¿Quién se cree? ¿El rey de roma? ¿En serio cree que desperdiciaría mi valioso tiempo en él? –Eres tan… – gruñe en el momento en que tiene que recoger sus cosas –torpe –finalmente dice.

-¿Seguirte? –Muerdo el interior de mis mejillas con desespero en el momento en que su severa mirada se centra en mi –yo vivo aquí; ¿q-que haces t-tu aquí? –Dios porque no puedo tener una conversación con este chico en la que no me sienta o nerviosa, o asustada o intimidada o en el peor de los casos todos esos sentimientos mezclados.

Arruga la nariz con molestia mientras me mira como si fuera la última persona con la que le gustaría estar – ¡Demonios! de todas las chicas del instituto justo tenías que ser tu mi vecina – ¿eso podría tomarlo como algo positivo o negativo? – ahora estaré más cerca de ti… mala suerte –momentáneamente se acerca mucho más hasta el punto en que puedo sentir su respiración en mi cuello –pero tranquila, así podremos divertirnos mucho más… mientras no hagas una de esas loca lista con cada uno de mis movimientos todo estará bien –quedo inmóvil casi como un zombi, evitando a toda costa cualquier tipo de contacto visual; finalmente reacciono separándome de él, “divertirnos” quizás quiso decir “divertirme” porque para mí no será para nada bueno tenerlo cerca.

Es más, presiento que esto será toda una pesadilla… ¡pellízquenme para que despierte de este infierno!

Finalmente recobro el aliento –yo…

-¿Kelsie? ¿Tyler? –creo que comprendo muy bien el asombro de Sara, para cualquiera seria sorpresa encontrarnos hablando juntos pues somos como el agua y el aceite. Se acerca a ambos con una gran sonrisa, su mano se posiciona sobre mi hombro y su vista recae en el –Stone que buena sorpresa ¿Qué haces por aquí? no me digas que viniste a perder el tiempo con la aburrida loca de las listas de mi hermana –entrecierro los ojos y le lanzo una mirada de odio. Como puede hacerme pasar estas vergüenzas frente a mi enemigo y hacer como si no pasara nada, no es justo, no lo es en absoluto.

-Viviré aquí –su tono se nota realmente de desinteresado, da un paso pero Sara lo detienen.

-Cuando quieras podemos flitear, ya sabes tú me llamas yo entro a tu casa y… – no le da vergüenza. Simplemente pongo mi vista en blanco.

Finalmente logra tomar sus cosas con su típica sonrisa de “soy mejor que todos” –cuando quieras, preciosa – ¿Por qué no me sorprende?, ah esperen ya se la respuesta son tal para cual.

Tiene una gran sonrisa victoriosa, tomo las llaves y entramos al apartamento –creo que me voy a divertí mucho con nuestro nuevo vecinito ¿no lo crees? – la verdad el hablar sobre Tyler Stone es lo último que me interesa hacer, me es más interesante hablar sobre Tara mi tortuga que sobre ese desagradable sujeto. Tomo una gaseosa y me siento en el sillón mientras miro la bolsa llena de comida vegana que ha traído Sara, esta chasquea los dedos con enojo – ¡Presta atención a lo que hablo! –una notificación de mi celular suena (por suerte mi celular aun sirve un poco).

Papa

Hola hija, va todo bien con tu hermana

¿No ha pasado nada nuevo?

Nada de qué preocuparse.

¿Cómo están ustedes?

 

“Si papa supiera todo lo que está pasando ya nos hubiera metido a un convento eso es seguro.

Papa

Las visitaremos muy pronto, nos vemos, adiós.

Sara se ve realmente enojada por la poca atención que le presto, no tengo tiempo ni ánimos para uno más de sus berrinches así que me dirijo a mi habitación; suficiente drama para un solo día definitivamente. Espero que cuando mis padres vengan halla un poco más de tranquilidad; debo concentrarme en no tener más peleas con Sara, ni con el diablo que ahora es mi vecino, ni ser más el centro de la atención, todo tiene que volver a ser como antes ¿pero cómo carajos lograre eso?... tratare de llevar un estilo de vida menos pesado y más tranquilo.

En la cafetería se escuchan gritos por todos lados, quisiera gritarle a todos que se callaran, cuando me refería a tranquilidad pedía todo lo contrario a esto. Mi emparedado de jamón y queso extrañamente sigue intacto, por alguna razón me siento tan desganada que no tengo apetito y eso es muy, muy extraño viniendo de mí. Estoy sola en la mesa, me pregunto dónde estarán esos dos pillos de mis amigos, giro mi vista topándome con nada más ni nada menos que Stone rodeado de todos sus amigos ¿Cómo lo hace? ¿Cómo puede verse tan tranquilo y despreocupado con todas las miradas sobre él y un par de chicas que parecen querer devorarlo tan solo con la mirada? estoy segura que es un don o algo por ese estilo.

La escandalosa risa de él y sus amigos se siente por todo el lugar, sus ojos lentamente viajan hasta mí y maldigo por dentro ese sutil gesto, detesto la forma tan desagradable en que me mira (como un bichito raro que quiere exterminar), en ese instante aparto mi mirada pero alguien me hace estremecer en el momento en que tapa mis ojos y se acerca muy cerca de mi oído –cosita bonita ¿Por qué tan sola? –trago saliva fuerte en ese momento. No quiero que se siente aquí, el me hace sentir mal – ¿Qué haces mirando tanto a Tyler? –Trato de escapar de sus garras pero torpemente caigo, siendo detenida por él, lo aparto y me atrevo a mirarlo directamente.



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En el texto hay: novelajuvenil, comedia romantica, vecinos

Editado: 05.02.2020

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