CAP 44: Una verdad desapercibida

Había pasado un mes desde aquella pelea, tal como Senku se lo imaginaba, Nyoko había tomado distancia e ignoba su presencia en frente de todos, ya sea llendo a apoyar a Taiju en la cosecha o pasando sus tiempos libres a lado de Gen, quién ahora había pasado a reemplazarlo, ya que últimamente, Nyoko abrazaba, bromeaba y caminaba a todos lados de él cada vez que podía. Por supuesto, Gen no tenía ninguna queja a este tipo de atención y descaradamente, solía abrazarla por más tiempo cuando Senku los observaba;  este hecho desconcerto a todo el mundo, incluso los niños notaron que Nyoko se rehusaba a convivir con Senku. 

Kohaku intentó averiguar qué pasaba, pero Nyoko siempre se excusaba con que simplemente, no tenía tiempo para él.

Por otro lado, Senku tampoco se quedaba atrás, aún le costaba comprender por qué había actuado así y por qué últimamente estaba de mal humor.

Aunque se había hecho un gran avance cuando Chrome encontró una mina de hierro, ahora tenían algunos caminos alfaltados y material suficiente para continuar con la construcción del barco.

—Nos vemos más tarde Nyoko-san—se despidió un poco sonrojado luego de que Nyoko se despidiera con un beso su frente antes de ir a ayudar a los demás con la descarga del hierro—, esto no era lo que esperaba, pero tener a una linda chica que te mime nos es para quejarse—se dijo así mismo con ensoñación antes de ver a Senku acercarse—, Nyoko-san acaba de irse hace poco, ¿por qué no la vas a saludar?—preguntó con una sonrisa de oreja a oreja; puesto que, intuía que ambos habían tenido una pelea, más no sabía el por qué, pero le parecia divertido sacar el lado celoso de Senku.

—No es por eso que vine—expresó un poco irritado, sabía perfectamente que a estas alturas, Nyoko ya le había dejado bastante en claro que su amistad ya no existía, lo cual le dejaba un poco triste, pero entendía sus razones—, ¿Has podido averiguar algo?—preguntó, aún si ya no podían ser amigos, quería ayudarla a que sus recuerdos volvieran.

—No es muy habladora que digamos—expresó dejando atrás las bromas—, puede incluso que no le interese recordar su pasado, lo que si puedo decir con certeza es que nuestra Nyoko-san, no es una aldena de esta era. Eso es todo lo que puedo decir desde mi perspectiva.

—Ya veo—dijo antes de voltear y regresar a su laboratorio, sin embargo la voz de Gen, le hizo detener el paso

—Senku-chan, deberías tener en cuenta que a Nyoko-san, no suele tener las mismas actitudes qué nosotros. Luego lo entenderás—expresó antes de despedirse y volver a sus asuntos, dejando confundido a Senku con aquellas palabras.

Senku al llegar al laboratorio, encontró a Taiju y Yuzuriha que estaban preocupados ante esta situación.

—¿No deberían estar en sus labores?—preguntó extrañado al ver a ambos.

—Estamos preocupados por ti y Nyoko—habló Yuzuriha, sorprendiendo a Senku que desvió la mirada.

—Chrome nos comentó que Nyoko suele tener esta actitud cuando algo le incomoda o fastidia—continuó Taiju.

—¿Pasó algo?—finalizó Yuzuriha con una pregunta.

Senku suspira, sabía que tarde o temprano irían tras él tras no recibir una respuesta por parte de Nyoko, por lo que para no alargar mucho este dilema, optó por contarles lo sucedido. 

—Todo empezó luego de que Nyoko y Magma regresaran de su aventura y que Chrome confirmara la veracidad de su historia—dijo masajeando sus sienes—, sin querer ví que poco después ella se iba con Ryusui se alejaban, y cuando me dí cuenta ya los estaba siguiendo—hizo una mueca con desagrado recordando las mejillas sonrojadas de Nyoko—, y me enteré que ellos dos estaban saliendo a escondidas—hace una pausa—, esto me hizo dar cuenta que Nyoko no era la persona que creía que era—dijo descepcionado y enojado—, resultó ser igual de superficial que los demás—suspira—, luego de eso me alejé, me encontró y le dije cosas sin pensar, la lastimé y es por eso que se distanció. Sigo sin entender por qué le dije esas cosas hirientes a Nyoko.

Al finalizar se apoyó en la pared. Aún seguía sin comprender las sensaciones que estaba sintiendo, llegando a frustrarlo. Sin embargo las palabras que dijo a continuación Yuzuriha, hicieron eco en su cabeza.

—...No puedo creerlo, a ti te gusta Nyoko—dijo sorprendida—, te pusiste celoso del repentino acercamiento que tiene con Ryusui.

—Tenia mis sospechas,  Yuzuriha tiene razón Senku—añadió Taiju.

—...Eso es imposible—expresó consternado—, ¿se dan cuenta de lo irracional de esa afirmación?

—Pero lo es—contestó Yuzuriha—, si lo piensas bien y comparas con tus reacciones, te darás cuenta de que aquellas sensaciones que has sentido, son de una persona que tiene celos al ver que a quién le gusta, sea cortejada por otra persona ajena.

—Ademas de que tus pensamientos, no dejan de recordarte lo especial que se a vuelto esa persona para ti.

Tras aquellas afirmaciones que dijeron, Senku no pudo evitar recordar todos aquellos buenos momentos que pasó con ella; como su sonrisa, sus muestras de afecto, sus ojos fucsia que transmitía ternura las pocas veces que hablan y aquella impulsiva actitud que solía poner al trabajar en conjunto en los inventos que poco a poco creaban. 

Le abrió los ojos y entendió, que sin saber cuándo empezó, había quedado flechado por Nyoko.