Capitulo 2

El día paso lento y aburrido, fue la hora del receso y fui a la cafetería, tome un sándwich, un jugo, y un pay de fresa, tome mi bandeja y me fui a un de las mesas q estaban disponibles, me dispuse a darle una mordida a mi sandwich, cuando suena mi teléfono, lo reviso y es un mensaje de mi amigo Adair 

Adair

-¿Dónde andas? , No te vemos sentado dónde dijimos, te estamos esperando.

Alzo mi mirada y veo a todos mis amigos ahí esperando a que vaya pero me siento comodo aquí, pero se que si no voy con ellos, me buscarán y me harán ir con ellos, y es lo que menos quiero por que se que harán comentarios respecto a ella y no quiero ni escuchar su nombre, ya bastante tengo con escuchar que le hablan en el pase de lista, es una tortura todos los días, en fin ya no quiero pensar más en ella y me dispongo a contestar el mensaje Adair.

-Si lo sé perdón, es que tenía q resolver unos asuntos de la empresa de mi padre pues ya sabes que al final q el deje el cargo yo seré el sucesor de la empresa pero no te me alteres Ayon que ya me dirijo con ustedes.

Tomo mi bandeja y me dirijo con ellos, tengo la vista en el suelo pensando de todo, pero más en la empresa de mi padre, el me dejó estudiar lo que yo  quiera pero como la condición de que también estaría al tanto de la empresa, y que también podría tener mi propio negocio pero también tener de prioridad el negocio familiar es algo pesado pero hago mi mayor esfuerzo para no fallar, estoy tan hundido en mis pensamientos que no me di cuenta de que alguien a chocado conmigo, reaccionó tarde, veo que mi camisa está toda manchada del pay de fresa, levanto la vista con los ojos llenos de enojo cuando veo q es ella, mi corazón casi se detiene al tenerla de nuevo tan cerca.

Romina bajo la mirada, sus mejillas se tornaron rojas de la vergüenza, yo solo me quedé perplejo ante cierta acción de ella.

-Perdon, no me fijé por dónde iba, estaba distraída y por accidente choque contigo, no fue mi intención ensuciar tu uniforme y mucho menos tirar tu comida, yo lo pagaré no te preocupes Manuel.

Sentí algo muy feo en mi pecho al volver a escuchar su vos al tenerla muy cerca de mi, pero me hacía daño tenerla cerca tenía la necesidad de besarla en frente de todos, deciele que la amo todavía y la extraño pero eso solo aumentaría más mi daño y mi poca paz mental que me queda.

-No te preocupes Romina, para la próxima ten un poco de más cuidado y no es necesario que me pagues la comida gracias.

Me aleje de ella por qué la tenía cerca no se cómo fue que la tenía muy cerca de mi, me dirijo con mis amigos y me siento mal por lo que le respondí pero no me salió otra forma de decir las cosas mas que de tono frío y cortante pero se lo merecía, este día no podía ser peor, jamás pensé volver a tenerla cerca y mucho menos tener otro cruce de palabras hasta ahora.