Tuve mi primera menstruación a los 10 años, realmente joven.
En frente de mis padres era la típica chica no problemas, hice todo lo que mis padres querían, jamás salí a una fiesta ni bebí alcohol.
Pero tengo más secretos que una tumba, secretos que nadie sabe y que disfruto al maximo. Me encanta ser la nena que no hace nada, pero si supieran.
Recuerdo perfectamente mi primer celular, era un frijolito. Lo tuve a los 17 años, realmente lo adoraba, le ponía saldo a diario, casi llegaba a gastar 50 quetzales en el, y era solo para enviar mensajes de texto.
Ahora nisiquiera envío un WhatsApp, ni le meto saldo al teléfono. Como cambio todo, pero bueno.