Estrellas y ella

Caminamos un rato dejando así el sendero por el cual se conecta la casa de Ty con el bosque, estrellita parecía estar en su terreno, es decir, conocía casi todo a la perfección e incluso me indicaba cuando había una piedra o algo con lo que pudiese tropezar.

¿Preparado para lo que verás? — Preguntó al estar cerca de unos arbustos que parecían una especie de "puerta" hacia algún sitio desconocido. Le dije que si con un gesto y ella atravesó los arbustos.

No perdí tiempo y la seguí, era realmente impresionante donde estábamos. Un hermoso lago estaba a poca distancia adornado por un cielo lleno de estrellas, también había algo que parecía una fogata antigua con unos troncos donde sentarse.

¿Cómo...? — empecé a preguntar, pero no pude seguir hablando.

Un día caminaba por aquí y tropecé cerca de los arbustos — comentó mientras se sentaba a la orilla del lago. Imité su acción y me senté con ella.

Es maravilloso — exclamé luego de unos minutos de silencio.

Sabes — dijo captando mi atención — nunca imaginé traer a alguien aquí, menos a alguien que básicamente no conozco, incluso no logro recordar bien tu nombre — admitió ruborizándose un poco.

No te preocupes para ser sinceros yo tampoco recuerdo cómo te llamas, pero me encantaría poder conocerte — dije sin despegar la mirada de sus ojos, en ellos encontraba magia y paz, una mezcla que me parece muy difícil de encontrar.

Ella asintió y volvió a observar el cielo estrellado que nos arropaba, me tomó por sorpresa cuando se puso de pie y se alejó un poco, sin embargo, me quedé sentado observando cada movimiento que hacía en la oscuridad.

Saqué mi teléfono queriendo capturar eternamente el hermoso paisaje que veía y eso incluía a estrellita; ella parecía sumamente concentrada en lo que sea se estaba haciendo.

De pronto extendió sus brazos y fue entonces cuando aproveché de tomar la foto. Mi cámara sonó ocasionando que estrellita se acercará, sin embargo, la foto salió perfecta.

¿Me tomabas una foto? — Preguntó en voz muy baja, casi parecía que temía la respuesta.

Si — respondí sin pensar.

Esperaba que se molestara o dijera algo más, pero ella solamente asintió y se volvió a sentar a mi lado.

¿Realmente me quieres conocer? — Preguntó, divisé como temblaba levemente. Ojalá tuviera un abrigo, me sorprendí pensando mientras afirmaba con un leve movimiento de cabeza.

La escuché resoplar mientras miraba las estrellas, podría jurar que murmuró un pequeño "de acuerdo". Nos quedamos un rato más observando las estrellas en un silencio, que no era para nada incómodo.

No sé cuánto tiempo pasó antes de regresar a la casa de Tyler. La fiesta parecía seguir igual de energética como lo estaba antes de irnos. A mi lado, estrellita se tensaba mientras ingresábamos al interior de la casa sin un rumbo fijo, ella parecía frágil en aquel momento despertando en mí la necesidad de protegerla de cualquier cosa.

Al llegar a la cocina estrella parecía moverse con soltura, diferente a cuando caminábamos por el pasillo, sin preguntar preparó dos vasos y me tendió uno, no sabía que contenía, aun así, tomé la mitad del líquido en un intento desesperado de reunir coraje. Estrella me miró de forma desafiante e incluso divertida diría yo, antes de imitar mi gesto.

Volvimos al patio, quería alejarla de ese ruido intenso para poder conversar bien, era consciente del poco tiempo que tenía y quería descubrir más de una cosa sobre ella.

Mi nombre es Lucía, no me gustan los diminutivos de mi nombre así que por favor no digas ninguno de ellos. No asisto a tu instituto, es por eso que no me habías visto antes. No suelo salir de día, no me gustan las citas, detesto que se quieran pasar de listos conmigo o que se esfuercen en obtener mi atención. — Alzó su mano indicándome que no hablara mientras tomaba un sorbo de su bebida.

»» prefiero que sean reales, honestos. No me gusta conocer a la familia de nadie así que ni pienses en invitarme a cenar en tú casa o algo por el estilo, tampoco esperes que haga lo mismo. Odio toda la tensión que se forma en el aire durante esos eventos. Asisto poco a las fiestas y queda realmente prohibido ir o llevar a alguien al sitio que te enseñé, es una clase de santuario para mí, donde puedo liberar, callar, ahogar a mis demonios ¿comprendes? — Volvió a tomar de su vaso y se quedó allí, observándome, me estaba analizando.

Vaya... Lo comprendo Lucía y con lo del lago, no debes preocuparte sé bien a que te refieres o al menos me hago una idea y respeto el espacio de cada quien. Solo quiero conocerte, no pido nada más, quiero verte brillar como las estrellas lo hacen. No me juzgues si digo cursilerías, ni me pidas que deje de hacerlo pues es la primera vez que alguien despierta mi curiosidad como tú lo haces. ¿Podrías permitirme conocerte? — asintió en respuesta, algo a lo lejos se captó su atención, pero no me volteé a ver que había sido.

Debo irme, anota tú número — Dijo mientras me daba su teléfono — yo te escribiré luego.

Y desapareció sin más...

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NOTA: Hola queridos Bookslovers, sé que no he subido más capitulos, sin embargo les aseguro que no dejaré esta historia a la mitad, ahora es que nos queda mucho por leer de "estrellita". Y si la conversación de Matt y Lucía les parece un poco incómoda, es porque yo considera que siempre las primeras conversaciones lo son, casi sin excepción. Les agradezco por leer hasta aquí y espero que me sigan apoyando en éste y otros proyectos que están por venir.