Capítulo 9

Miriam

Pontedeume

—Creo que tuve que pensar mejor el venir—Suspiro abrazada a mi peluche mientras mi prima me mira—. Ahora Mimi está enfadada conmigo, estoy a kilómetros de ella y me frustro, joba. 

—Llámala y habla con ella enserio—Veo como encoje de hombros. Se de sobra que vive igual de perdida que yo—, o... coge un vuelo a Madrid, habla con ella y vuelve. En avión todo es más rápido y puedes ir y venir.

—Es una locura y además, ¿qué le digo a mis padres? ¿a Efren? El me mataría después de la paliza de viaje que le hice tener. 

—Miriam chica, ¿qué te digo entonces? La última opción es ignorar la situación y descansar. Tu problema es Madrid y todo el estrés que tienes. 

Por una parte tiene razón. Madrid desde la salida de la academia ha sido mucho más estresante de lo normal, pero en el fondo he vuelto desde que se que Pablo no está en el pueblo y porque necesitaba a mi familia. Eso no quita que me sienta mal por lo de Mimi. Me siento una completa idiota.

一Se que quieres irte a Madrid, aunque sea hablar con ella一Miro confusa a Ana一. Puedes hacer una cosa, aunque sigue siendo una locura.

一Sorpréndeme一Me inclino hacía atrás apoyando mi espalda一. Pero por favor, algo que no sea una completa locura.

一Locura no...一Se encoge de hombros mirándome graciosa一. Quédate unos días, piensa y luego con la cabeza fresca haces el viaje de ida y vuelta a Madrid. 

¿Y si es lo mejor? Quedarme, descansar y no pensar en nada. Cuando tenga las ideas claras actuaré. Ahora mismo no está la situación bien como para forzarla y no me siento con fuerzas de pisar Madrid de nuevo. 

Llevo unos días ya en casa, pero no voy a negar que no paro de pensar en Mimi, en Pablo y en toda la situación que tengo encima. Para males, tengo que escribir temas para el segundo disco y estoy en blanco. No soy capaz de que salga ninguna melodía que me guste o ninguna letra que sienta. 

一Llevas toda la tarde encerrada一Doy un rebote al escuchar la voz de mi padre. Estaba tan concentrada que no me dí cuenta que estaba en mi habitación一. Llevo un rato aquí dentro y no te habías dado cuenta de nada. Por cierto, deberías descansar, bajar y disfrutar un rato de la familia. 

一¿Qué hora es?一Me estiro, dejando la guitarra a un lado. 

一Casi la hora de cenar一Doy un bote al escuchar eso一. Estuviste toda la tarde encerrada intentando componer. 

一Y no me ha servido de nada一Suspiro agobiada. 

Además de querer encontrar la tranquilidad, también vine para encontrar inspiración para escribir las canciones necesarias. Tengo pocas semanas para mandar las canciones e irme a Londres y no me siento con ganas de cambiar de país. 

Me levanto y acurrucada en papá, bajamos hasta el salón. Ahí están mamá y Efren, que quedan callados al verme -seguro que hablaban de mí y no se si es algo bueno-. 

一Por fin Mickey一Voy directa a los brazos abiertos de mi madre, para abrazarla fuerte一. Pensé que no sería capaz de sacarte de la habitación. 

一Me centré tanto en intentar hacer una canción que se me pasó el tiempo volado一Echo la cabeza hacia atrás一. Buah, me duele mucho la cabeza. 

一Normal Mickey, todo el tiempo entre cuatro paredes.

一Joba, ya me pase mucho. 

一¿Volviste a saber algo de Pablo?一Me incorporo extrañada ante su pregunta一¿Por qué me miras así?

一¿Por qué no entendí tu pregunta Efren? Si supiera algo lo hubiera dicho一Agradezco que mis padres hubieran salido del salón. No es un tema que me guste hablar y mucho menos delante de ellos一¿Por qué lo dices?

一Por nada en especial一Lo noto raro y se que detrás de esa respuesta, oculta algo一. Miriam...

一Efren, nunca me llamas Miriam si no es para algo serio, ¿qué pasa?

Presiento que algo malo pasa. Veo como mi hermano piensa si contarle o no y por su suerte espero que sea que si, porque no pienso dejarle tranquilo. 

一Miri...

Comienza a sonar esa melodía que tanto llevaba esperando estos días y estoy debatiendo entre levantarme y no hablar con Efren o dejar la llamada pasar y hacer que su enfado vaya a más, porque no responderle ocasiona eso. 

一Luego hablamos, creo que te vendrá mejor hablar con ella一Me guiña el ojo sonriente.

¿Efren guiñando? Me levanto sorprendida ante su reacción, pero nerviosa ante su llamada. Salgo corriendo hasta el porche y me siento en las escalerillas descolgando.

一Mimi...

一Gallega, ¿te pillo ocupa'?一Doy pequeños saltos en mi mente al notar en su voz que todo va bien一Quiero hablar contigo.

一Yo también quería hablar contigo Mimi一Suspiro. Quiero decirle millones de cosas pero solo me sale...一. Lo siento.

一Da igual, realmente no soy nadie para que me avises si sales o no de la ciudad一La conozco demasiado y se que ahora mismo estará paseando por cualquier sitio de su casa一. La que tiene que decir lo siento soy yo. Llevas días intentando llamarme...