Una tarde llegó Niccole a casa acompañada de Edwin. Poseía un auto convertible y se ofreció a llevar a ella y un grupo de compañeras desde la Universidad hasta sus respectivas residencias. Su intención era clara, quería conocer la dirección de Niccole para poder frecuentarla en algún sitio que no fuera el Cafetín de la Facultad y sólo por un rato.
Se bajaron del auto y ella le invitó a pasar a su casa y le ofreció un aperitivo.
La conversación estuvo muy animada, Edwin era muy simpático y contaba anécdotas muy graciosas que aseguraba que le habían sucedido en la vida real.
Llegó el momento de marcharse, lamentando ambos que Charlotte no estuvo presente para que ambos se conocieran, ya que cursaban la misma carrera.
Editado: 05.10.2021