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Félix

Como era posible que eso me estuviera pasando a mí, recuerdo cómo me encontré corriendo por mi vida, como llegué a esa situación, ¡ah sí es cierto!, todo fue porque me comí ese delicioso pai de manzana. Pero a quien se le ocurre dejarlo en la ventana. Mi estomago rugía de hambre, y de pronto ese aroma me llegó de lleno, solo seguí ese rastro y me llevó al pai, solo hice lo que cualquiera haría, comérselo. Pero luego me agarraron con la boca en el pai. Entonces fue como terminé corriendo por mi vida, a todo lo que esas patitas me daban, pues detrás de mí, venia esa señora loca con su escoba, por un momento creí que volaría con ella, y me convertiría en un renacuajo.

Pero logré perderla de vista, pero en el transcurso, me lastimé mi patita delantera, era un dolor y no pude evitar maullar, si, eso es mi vida ahora. Soy un simple gato, tengo 7 vidas, todo se lo debo a la madre luna, porque me dio una segunda oportunidad de vivir, claro no como humano, pero algo es algo, solo debo hacer mi familia de gatitos y ya. Aun me queda estas vidas, eh intentado acabar con mi vida, pero recuerdo el sacrificio de mi amada, y trato de ver lo mejor de la vida. Soy un gato callejero, no tengo hogar, no tenia, bueno aun no se si me quede aquí.

Aquí en casa de estas personas, con mi aullido, una joven se acercó a mí, debí huir o arañarla, yo que se, pero no lo hice, me quedé ahí con mis ojos cerrados, ella fue amable, de hecho, ella es la primera persona que se acerca a mí, y me habla de esa manera tan dulce y delicada. Ella me preguntaba y yo solo maúlle, se que para cualquiera esto sería estúpido, quizás ella no este bien de su cabeza, que locura y lo digo yo, un joven en el cuerpo de un gato.

Al llegar a su casa, su madre la interroga, ya se me había olvidado eso, una madre siempre sabe cuando algo va mal, me recordó a mi madre, cuando ella sabía cuando yo tenía algo. Al parecer el esposo de Grace, eso escuche de su boca, cuando ella dijo en un claro y alto: —O dejo de llamarme Grace Owens. Joe es alérgico, y eso hace difícil que yo me quede aquí. Pero la señora Grace a buscado la manera para que me adopte, y todo lo hace por su querida hija, la joven castaña llamada Gwen, esa dulce joven que me rescató.