Cap. 3

"Él chico de mis sueños"

• Confía en mí - dice el chico frente a mí- no voy a dejar que nada te pase
• Pero…- digo sollozando mientras corremos por un lugar oscuro- mi familia… ellos…
• SE ESCAPAN!- un grito hace que el chico frente a mi apriete más mi mano y acelere nuestra corrida
• Tengo miedo- sollozo
• Yo te voy a cuidar, lo prometí y lo voy a cumplir- dice él- Confías en mí? - vuelve a decir mientras se detiene y se gira...

Me despierto de golpe, estoy agitada y sudor cubre mi cuerpo, miro a todos lados y estoy en mi cuarto, mi respiración esta agitada.

Mi pecho sube y baja rápidamente, trato de calmarme respirando, ese sueño fue tan real.

Me levanto y camino por el pasillo, un viento frío me detiene, frunzo el ceño, miró hacia la puerta del estudio la cual está abierta.

Me adentro y veo la ventana abierta, me acerco a cerrarla, quizás me la olvide en la mañana al irme, el viento se detiene, me giro y lo primero que veo es mi lienzo de esta mañana.

Me siento en mi taburete, y lo observó por un instante.

Cierro mis ojos, respiro profundo

• Confías en mí?  - esa voz vuelve a mi tan audible como si estuviera conmigo en esta habitación, trato de ver su cara, pero no puedo, todo es oscuro.

Estoy corriendo una vez más, me sujeto fuerte de su mano, estamos en un bosque, siento las ramas bajo mis pies, giro mi rostro y veo fuego, no entiendo que pasa.

• Llegamos- dice él mientras aparta una ramas y hojas, yo lo miro confundida, siento pasos acercándose
• Están viniendo- digo acercándome- nos van a descubrir
• No, no lo harán- dice él y se voltea, lo único que veo son sus ojos, son de gris azulado, me atrapan totalmente pero más que nada, me emanan confianza- tu entraras ahí y te salvarás
• Y tú?  - pregunto volviendo a llorar- no me iré sin ti
• Tranquila, te encontrare- él acaricia mi rostro, su tacto es tan cálido- espérame

ESPERAME.

La luz molesta, trato de tapar mis ojos, necesito verlo, necesito saber quién es y porque sueño con él.

Bufo molesta al no poder volver a dormirme, pestañeo, siento duro debajo de mi dándome cuenta de que estoy en el piso, me levanto y no estoy en mi cuarto, estoy en el estudio, miro mis manos y las veo con pintura.

Miro a mi alrededor y veo el lienzo de las líneas negras, el cual no es el mismo, sino que ahora tiene forma, me acerco para verlo mejor.

Es un castillo antiguo, de color crema, el sol sale detrás de este iluminando el hermoso bosque que lo cubre, mi mirada cae en los arboles y flores que nunca vi, acaricio las formas sin entender como esto salió de mi mente.

• Hija se te hace tarde! - mi padre grita desde abajo
• Ya voy- digo volviendo en si

Salgo hacia mi cuarto aun confundida, me meto rápido a la ducha, trato de recordar cuando pinte eso, pero no, solo recuerdo cerrar la ventana y luego mi sueño.

Salgo y me cambio, me pongo un jeans claro y una camisa negra con vans negras, peino mi cabello y lo dejo secar al viento, me pongo mis pendientes de perlas y el colgante que me regaló mi doctora

• Buen día papá- digo al entrar a la cocina
• Buen día Bonita- contesta él dejando un plato con panqueques delante mío

Comienzo a comer, mientras toma su café

• Anoche tuve un sueño raro- comentó y él levanta su vista- no sé bien que es, pero era tan real
• Tranquila cariño, sabes que tu mente puede confundir algunas cosas- dice él mirándome con cariño
• Si lo sé, pero…- niego con mi cabeza- quizás me emocione demasiado con los regalos- asiente en respuesta

Termino de desayunar, y me levanto para dejar el plato en el lavamanos

• Voy a ir a retirar unas pinturas y luego a mi sesión- digo mientras camino hacia la sala- volveré a la tarde
• Bueno hija, cuídate sí?  - dice él besando mi cabeza- tienes dinero?
• Sí papá tengo- digo sonriendo- tú también cuídate- él sonríe

Salgo de mi casa, y camino hacia la tienda de pinturas, la mañana está fresca pero no tanto, el tránsito está más tranquilo ya que son alrededor de las diez de la mañana.

Siento pasos detrás míos, lo preocupante es que me siguen cada vez que giro, respiro hondo antes de mirar para atrás, pero no hay nadie, acelero un poco mis pasos.

Giro y me meto en la tienda, respiro hondo con mi corazón acelerado, me doy vuelta para ver si alguien pasa, pero nada.

• Josie todo bien? - pego un saltito y llevo mi mano al pecho
• Me asusto Sr. Edgar- digo
• Lo siento niña- dice él sonriendo, gesto que le devuelvo
• Vine por las pinturas que encargue- digo acercándome
• A si- dice él- llegaron ayer, ¡BEN!!- grita y su hijo aparece

Ben es un chico de 19 años, alto y rubio, se ve que va al gimnasio, pero es bastante callado y reservado, solo converse muy pocas palabras

• Hola Ben- digo sonriendo
• Hola Josie- dice el sonriendo- aquí están tus pinturas

Me entrega una caja, la abro y ahí están, son pinturas de Australia, las he esperado durante un mes

• Están perfectas- digo sonriendo