CAPITULO 18. CONFRONTACIÓN

CASSIE KELLER

Mi móvil recibió un nuevo texto sumando el mensaje número 55 en la bandeja de entrada por parte de mi hermana.

Los dos últimos días fueron un torrente de ringtones personalizados, y odie la costumbre que tenia de asignar un tono diferente para cada contacto de mi lista.

Me molestaba que Maddie, de todas las personas fueran tan insistente en comunicarse. Recién mi hermana regresaba de la luna de miel, y parecía no encontrar otro entretenimiento que avivar mi irritación. Además de "cierto hombre" ella era justo la otra persona con la que no me sentía preparada para hablar.

Con disgusto, sabiendo que no podía seguir ignorándola abrí el chat y deslice las burbujas llenas de información, el aleteo en mi pecho creció cuando el nombre que menos quería, ver, escuchar o leer apareció en una de esas burbujas

             "Miles vino a verme"

Mas abajo decía

             “Quería hablar"

Odiaba que Maddie escribiera los textos incompletos, por que la curiosidad siempre amenazaba en desbordarme como fuego liquido.

            “Me explico todo"

             “La razón por la que quería venir a la boda"

 ¿¿Y??....Pensé

             “Tenemos que hablar"

¿En serio, Maddie? me lanzas una bomba como esa y después un ¿" tenemos que hablar”?

Me sentí impulsada a contestar con una sarta de malas palabras a la reina invicta pero mi animo estaba por debajo de cero y llegando ya a los números negativos.

Miles Sammers era un tema tabo, que nadie había mencionado  durante los últimos meses.

Mi fuero interno deseaba que alguien comentara algo de el, como una groupie persiguiendo a su banda favorita, imploraba tener un poco de información de su bienestar, pero ni una sola palabra ni de mi madre, ni de mi padre e increíblemente ni de Tía Sarah. A todos parecía haberse le olvidado la pasmosa situación acontecida en el festín de la boda.

En el chat surgió una nueva burbuja.

            “Estoy aquí, ¿puedes abrirme?"

¿Aquí?

¿Como aquí?

¿En Vancouver? 

Salte de la cama asustando a un adormilado Jerry acurrucado en las sabanas, directo a la puerta de mi departamento. Ver a la radiante Sra. de Rob Preston, con un bronceado que evidenciaba su estadía en las islas Canarias fue lo mas excitante de mis ultimas semanas.

-Pareces zanahoria-me burle

- Oh calla, sabemos quien es la verdadera zanahoria-refuto

Nos abrazamos y realmente me sentí contenta de verla, aunque mis otros sentimientos querían graparla en una pared por ser tan misteriosa con respecto al tema M.S, trate de engañarme de que  mi alegría nada tenia que ver con que iba a hablarme de el. 

Eso, quería creer.

Pasamos al área compuesta de recepción, comedor y cocina. El departamento era minúsculo si lo comparaba con la casa de mis padres, tenía a penas lo necesario, pero me gusta la modestia del edificio y los vecinos eran  buenas personas.

-Solo tengo jugo de uva, ¿te apetece?- ofrecí

-Estaría bien

Entre a la cocina, serví dos vasos generosos de la bebida, tome de la despensa un paquete de galletas saladas y volví para encontrar a mi hermana repantigada entre los cojines. Puse las bebidas en la pequeña mesa de caoba que compre en una venta de garaje el año pasado

-¿Como estuvo la luna de miel?- me aventure

-Divina, Rob y yo nadamos con delfines, hicimos buceo y comimos en restaurantes espectaculares.- la emoción brillo en sus ojos por un instante, sin embargo, rápidamente Maddie se incorporo -Cassie- su voz se lleno de seriedad- sabes que no vine precisamente a hablar de mi luna de miel, aunque muero por hacerlo.

- lo se- resople- pero no me interesa saber nada de ese hombre. - mentí

-Deja de mentirte- exclamo- es la primera vez que te veo completamente embelesada por alguien, no me agradaba al principio- dudo - pero...

-¿Siempre supiste quien era, verdad?

Maddie asintió

- Me sorprendió bastante verlo a tu lado el día del almuerzo en el club-dijo- el no era tan guapo antes y me molesto un poco que estuviera ahí mirándote como una diosa.

-¡Oh por favor..!

- Cassie, fui una perra con el- aclaro su garganta- tenia esta cosa de jugar con los chicos y el era dulce, y tenia algo en sus ojos- suspiro- en fin las cosas no fueron bien, le rompí un poco el corazón me burle de el.

-¡¡Maddie!!

- Si lo se, era en verdad malvada en la secundaria-acepto- por eso cuando me conto que al inicio su objetivo era vengarse de mi...

-¿te lo dijo?

-Si y Cassie, está destrozado, el te ama de verdad, se nota que te extraña cada día.-Maddie tomo mis manos entre las suya dándome un apretón consolador