Que necesito que alguien venga
y me salve de tanta oscuridad,
o mejor dicho,
de mi misma.
Que sueño con ahogarte cada noche
y ya no sé si es a besos
o haciendo que te tragues tus propias mentiras.
Que la luna se ríe de mi,
porque ella esta sola cada noche
y no llora como yo.
Que los parques,
des de hace un tiempo
me hacen llorar.
Que el cielo,
des de que te fuiste
ha dejado de sonreír
y eso es lo que más pena me da.
Que te sigo esperando
en un continuo invierno,
temiendo a la siguiente estación por el simple hecho
de que sé
que
desaparecerás.
Que necesito que alguien venga
y me devuelva las ganas de follar,
porque des de que sé
que el sexo sin amor es un vacío lleno de orgasmos,
correrme me parece pecado.
Pero más pecado es
que diga que necesito a alguien,
cuando los dos sabemos que al único que necesito,
es a ti.