Habían pasado 5 años desde el nacimiento de Peter, el hogar de los Bell se encontraba en perfecta armonía.
Peter heredó los ojos de su madre, de un color azul casi tan profundo como el mar, y el cabello de su padre, un castaño con algunos destellos dorados que lo hacían parecer rubio. En su nariz respingada poseía unas pequeñas pero coloridas pecas. Casi siempre se le veía sonriente, era un niño muy alegre, valiente y bondadoso.
Su madre le había regalado un collar de plata con un dije en forma de una flauta de pan, servía como silbato. Ella le mencionaba que cuando necesitara de su madre podría tocarla y ella de inmediato vendría.
Peter salía a jugar como cualquier otro niño, los vecinos fácilmente le tomaron cariño, ya que era muy respetuoso, propio y simpático al hablar.
Conoció a un niño llamado Daniel Smith, era un niño tres años mayor que Peter. Con el paso del tiempo se volvieron inseparables. Peter se convirtió en su mejor amigo de Daniel y viceversa.
Todas las mañanas Peter y Daniel jugaban que viajaban por todo el mundo. Cada día un país diferente. Ya que el sueño de Daniel, era irse de Londres y poder tener riquezas para poder comprarse todo lo que quería.
Daniel tenía el cabello negro, sus ojos eran verdes. La familia de Daniel se integraba por Daniel y sus tíos. Sus padres murieron en un accidente vehicular cuando Daniel tenía 3 años. Fue el único que sobrevivió, ya que se escondió debajo de un asiento, se encontraba dibujando en los asientos de atrás cuando aquel accidente ocurrió. a diferencia de Peter, Daniel tenía un carácter un poco más inestable, ya que a veces podía ser un poco mal educado y un tanto agresivo. Sin embargo, nunca había tratado mal a Peter. Daniel lo veía como un hermano pequeño.
Henry y Marian regresaron a sus respectivos trabajos. Marian trabaja en las mañanas y Henry lo hacía en el turno de la noche. Con la finalidad de estar cuidando a Peter. Peter por su parte seguía siendo él, con su característica sonrisa y su forma de ser amable y dulce.
A la mañana siguiente, la madre de Peter, Marian. Se había levantado con náuseas y mareos. Henry decidió llevarla al hospital, tomó a Peter y se encaminó hacia aquel lugar.
Esperaron alrededor de 1 hora y Henry estaba jugando con Peter para distraerlo ya que él sabía que Peter se preocupaba por su madre. El doctor salió y le mencionó a Henry que Marian estaba embarazada. Henry sonrío y junto con su hijo fueron con Marian. Peter no comprendía nada. Marian le dijo a su hijo que iba a tener un hermano o una hermana. Peter sonrío y abrazó a su madre.