Hoy mas que nada me acuerdo de ti, tus ojos negros como la noche que brillaban como el sol, tu sonrisa que aun que para todos era petulante para mi era como el rocío de la mañana, tus caricias eran como el suave tacto de una flor.
Flor que con el tiempo se fue marchitando, triste fue tu desenlace y doloroso tu adiós.
Estos son los fragmentos de mi corazón roto, de los recuerdos que fueron robados.