CUARTO CAPITULO
- Hola Nat, ¿Puedo hablar con Tigo?.- En su voz se nota la incomodidad.
- Hola, si pasa.- La tensión se empieza a sentir en la habitación.
Como siempre nos pasamos a la cosina para hablar, le ofresco un vaso de agua pero simplemente niega con la cabeza.
- Verás sobre lo de ayer... -
- Estaba ebria, creeme no se lo que dije y perdona si te incomode.- Lo interumpir y no deje que terminara de hablar, no quería que me dijera como se sentía.
- Eso lo sé, lo que pasa es que.- No lo digas por favor.- Yo me siento.- lo vuelvo a interumpir
- No lo digas, dejemos las cosas como están, lo que dije fue por qué estaba ebria y sigamos siendo buenos amigos. Mantendremos las cosas así ¿ Vale?.- Por eso mismo no quería que se enteraran, está situación no me gusta. Me facina estar con ellos son grandes personas con un lindo corazón pero si estas situaciones se llegarán a presentar todo cambiaría la incomodidad e inseguridad por parte mía atacarían hasta que mi razón me alejara de ellos.
- Eso es lo que tú quieres pero yo no... Aún que lo hayas dicho mientras estabas ebria yo me siento igual que tú, te juro que va a pasar de todo pero las cosas nunca van hacer como antes.- su mirada se clava por completo en la mía y sin retirar su mirada de la mía continua.- Mis sentimientos por ti son verdaderos y aunque no los correspondas no los voy a poder cambiar.
Alejo mi mirada y me intento mover hacia la sala para no estar en esa incómoda situación. Pero me toma de la mano y me detiene.
- Yo no puedo ocultar el amor no correspondido como todo el mundo; por ello te puse al tanto de mis sentimientos, no quiero que estés incómoda, voy intentar calmarlos ¿De acuerdo?.- Se para del banco donde estaba sentado para ponerse enfrente de mi.- Solo a eso venía.
- ¿Y por qué si dices que sientes algo por mi te besaste con Alex?.- No sé cómo esas palabras salieron de mi boca pero frenaron a Frank quien ya se Hiba.
- Eso fue un error, creeme entre Alex y yo no hay nada.- Dice mientras su mirada se ve triste.
- Esperaba que me lo explicarás pero sin embargo no resivi ninguna expicacion por parte tuya y ahora apareces aquí diciendo que te gustó, que correspondes a mi confesion de ebria ¿Que justamente esperas de mi ?.- Digo un poco exaltada y con confusion en mi cabeza.
- Nada, no espero nada, lo siento por solo confundirte.- Baja la cabeza y respira ondo.- Solo espero que me perdones y que estés al tanto de mis sentimientos, haré lo posible para que me creas.-
Suelta mi mano y se retira, había deciado tanto poder escuchar esas palabras de su boca pero ahora que lo hizo simplemente no sé qué hacer o qué pensar, no tenía mucho que lo había visto besarse con Alex y ahora biene y me dice esto. No entiendo por qué de la noche a la mañana mis sentimientos por el se apagaron.Tal vez me gustaba solo por capricho o por miedo el siempre a estado a lado mío, su compañia es única y me acostumbré a ella, pero su compañía siempre fue en un lazo de amistad y ahora que el lazo puede cambiar da un poco de miedo. Y si a eso le sumamos que los encontré besandose y que no me dió una explicación hasta ahora y eso por qué yo sé lo saque.
Subí a mi habitación para Intentar ponerme en contacto con Hani para contarle pero simplemente su buzón de voz contestaba. Necesitaba contarle a alguien y que me diera su opinion sobre esto, el sonido de una piedra estrellándose en mi ventana me hizo sobresaltar, al asomarme era Lay quienes las aventaba.
- ¿Puedo subir? He estado solo todo el día y ya me aburrí.- Me sorprendió mucho que Lay estubiera aquí aventando piedras para hablar con migo.
- Si está bien.- Abro más mi ventana para que el pase sin ningún problema. Mi cabeza estaba tan impactada con lo anterior que ni siquiera racciono al dejar pasar al chico que altera mi corazón.
- ¿Que pasó? Hace rato Vi a Frank pero no sé veia muy animado.- Cierra la ventana y se sienta el la orilla de mi cama
- Nada en especial, solo que...
- ¿Lo de la confesion?, Cómo te dije nadie se la esperaba.- Me interumpe para dicer algo que Hiba a decir yo.
- Si eso, los problemas que puede causar estar ebria.- Y no es mentira todo esto paso por el estúpido alcohol.
- ¿Entonces lo que quieres decir es que Frank correspondió tu confesión de borracha?.- Este chico entiende muy rápido las cosas. Yo solo hacento con la cabeza.
- ¿Y cuál es el problema? El es guapo, alto, piel clara, cabello oscuros es lindo en todos los aspectos o es acaso que ¿No te gusta?.- Ese brillo en sus ojos me daba un poco de escalofríos.
- No es eso, estoy segura que no lo es. Pero el día de la fiesta lo ví besándose con Alex por su culpa fue que el alcohol invadió mi cuerpo y más aparte tengo miedo de que andemos y después terminemos y nuestra gran amistad se pierda.- Que hago aquí contándole todo esto a Lay que no tiene mucho que acabo de volver a ver.
- Eres cobarde Nataly Brow, te aseguro que lamentaras el averté quedado estancada en el no intentarlo, rendirte no es tu aliado.- Dice con una gran sinceridad en su voz.- Y respecto a Álex todos hacemos estupidez y media en una borrachera la de él fue un beso la tuya una confesión.- Dice mientras arquea una seja.
- ¿Pero entonces qué hago? No soy una experta en estas cosas y a Hani en estos tipos de cazos no es su fuerte, siento que si lo intento yo sola me voy a undir.- Y es verdad soy un asco en esto, de echo si se diera el caso Frank sería mi primer novio.
- Se que nos acabamos de encontrar de nuevo y que tú has cambiado y que yo también lo e echo pero recuerda que en la infancia fuimos muy cercanos y quiero recuperar esa sercania, haci que yo te ayudaré ¿Estas de acuerdo?.- No sé si fiarme de las palabras de Lay, pero de verdad quería intentarlo y no quedarme estancada. Quería que se arrepintiera por besarse con ella pero y ala vez estar con el, sin embargo yo no sé cómo lograrlo y Lay si.
Haci que sin más pensarlo - Está bien acepto.- Digo extendiendo mi mano para cerrar el trato.
- Está bien pero tengo dos condiciones, una no le puedes decir a nadie sobre esta conversación finjamos que ninguno de los dos sabemos de esto y dos el trato se acaba cuando sienta que esté preparada para el gran Game Over ¿De acuerdo?.- Su sonrisa emitía confianza, no sé en lo que estaba pensado cuando dije:
- Echo, yo soy tu cliente y tú mi cómplice.- El trato se cerró con un gran apretón de manos.
- Bueno, ahora me voy, te informare después de los pasos a seguir.- Vuelve abrir mi ventana para salir.
- Por que no ocupas la puerta como la gente normal.- Señaló mi puerta y le hago un gesto de risa.
- Por qué tendría que entrar yo por mi puerta y por el momento estoy castigado haci que no panquesito.- Dice con con voz aburrida
- ¿Panquesito?.- Pregunto mientras me río
- Ese es tú apodo, si vamos hacer esto necesitamos identidades.- Se sienta en el borde de mi ventana y se empieza a reír.
- Apodos ¿Eh?, Está bien Gute.- Digo mientras cruzo mis brazos
- Me agrada, bueno panquesito me voy ahora, y de favor no me extrañes mucho.- Saca sus largas piernas y empieza a bajar por el tronco de mi árbol.
Me asomo y solo me giña el ojo y se va, yo por mi parte cierro mi ventana. Tiempo después pude contactar a Hani y le comenté solo lo de Frank evite todo lo de la charla con Lay por que ese fue el trato. Mientras estaba haciendo mi tarea me llegó un mensaje pero el número no estaba registrado.
Hola panquesito soy yo Gute, guarda mi número que por aquí estaremos poniéndonos de acuerdo para que no hablemos en persona.
A por cierto nuestra sala de juntas será la cerca que está en nuestros patios, la división, solo te sentaras y hablaremos haci nadie se dará cuenta. La primera junta es mañana por la tarde noche te mandaré mensaje para confirmar. Linda noche panquesito.
PD: No me extrañes
¿Cómo rayos consiguió mi número?. Tal vez se lo dió Hani, pero eso por el momento no importa ya que es mi aliado. Pensándolo bien no estuvo tan mal mi decisión si logro que las cosas salgan bien mataría dos pájaros de un Tiro, olvidaría los sentimientos por Lay y conseguiría tener un lindo novio como Frank. Es justo.
Pero regresando a Lay, su comportamiento es raro, en la escuela es frío y casi no habla, el no muestra este lado que me a enseñado a mí. Todo mundo tiene sus motivos y el a de tener los suyos.
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Hoy es domingo y mis padres no va a trabajar, es constumbre de nosotros salir a algún lado para estar juntos y tener un lindo día en familia. Sin embargo esta vez no es posible ya que mi papá se enfermó de gripe y mi mamá está doblemente cansada. Haci que decidí hoy atenderlos.
Primero fui a la farmacia por medicamento para mi papá y pase al centro comercial para hacerle fruta picada a mi mamá. Le di el medicamento a mi papá y lo recosté en su cama para que descansara, yo prefiriria que fuera al doctor pero a él no le gusta.
Mientras que mi madre estaba en la sala revisando unos papeles de su trabajo, le dejé su plato a lado de ella y me contestó con una linda sonrisa. Ahora que mis objetivos estaban cumplidos ya no tenía nada que hacer haci que me fui al cuarto donde está el piano y algunas otras cosas más, la gran mayoría mías.
Empeze a tocar una canción que mi mamá me tocaba cuando no me quería dormir, me recordaba a mí cuando era pequeña y la gran sonrisa de mi mamá, realmente el bebé llegó a una buena familia.
- Tendré que volver a tocar esa canción en poco tiempo.- La voz de mi mamá desde la puerta me hizo sonreír
- Supongo pero también puedo yo.- Digo mientras cambio las notas.
- Supongo que eso estará bien.- Se va acercando al piano y yo me recordó en el banco para que se siente mi madre.
Cuando yo cumplí 5 años y estaba aburrida fingía tocar el piano y ser una gran artista, mi madre una vez me vio y me empezó a darme clases todos los domingos y sábados por la noche. Con el tiempo ya no fueron lecciones si no nada mas una actividad de madre e hija.