28 - Los seis jóvenes elementales.

Región de Althohalla.

Bosque de tinieblas.

9:25 de la noche.

En una zona un tanto apartada de donde actualmente se estaba llevando a cabo la gran batalla final, un joven pelirrojo se encontraba dentro de una pequeña cueva escondida entre la inmensa oscuridad del lúgubre bosque, además de estarse dedicando exclusivamente en cuidad a sus dos compañeros que aún permanecían totalmente inconsciente.

Gaara: Cuando despertaran chicos.

Se preguntó a sí mismo el actual espíritu de la tierra en voz baja, el cual a su vez también se visualizaba sentado a un costado de sus dos queridos amigos.

El joven de cabello rojo había sentido horribles estruendos desde que prácticamente encontró este pequeño refugio, pero él mismo sabía bastante bien que eso se debía al combate que en estos momentos se estaba desarrollando en las oscuras profundidades del lúgubre bosque.

Aunque para su gran suerte, solamente fue cuestión de minutos para que una voz muy bien conocida para el joven pelirrojo pronunciará una simple palabra.

Natsu: Ga...Gaara.

Llamó el pelirosa con una voz un tanto entrecortada, al mismo tiempo que también procedía a abrir sus ojos con un poco de dificultad.

Gaara: Natsu que bueno que despertaste, me tenías muy preocupado.

Respondió con una clara sonrisa de felicidad en su rostro, aunque a su vez no siendo el único que había logrado despertar, ya que una bella joven de cabellera azul procedía de igual manera a abrir sus hermosos ojos azules de una muy lenta manera.

Juvia: ¿Donde...donde estoy?.

Pronunció la nueva espíritu del agua con un tono muy bajo de voz.

Gaara: Tranquila, ya estas a salvo.

Natsu: En...en donde estamos.

Comentó el pelirosa mientras enfocada de una mejor manera su visión.

Por su parte, el espíritu pelirrojo sin poder contener mucho mucho más tiempo, solo se abalanzó con un fuerte abrazo sobre los dos jóvenes que apenas habían logrado despertar, de esta manera sorprendiendolos de gran medida por tan repentina acción.

Gaara: Yo...pensé que los perdería.

Habló el joven pelirrojo mientras continuaba abrazando a sus dos queridos amigos, al mismo tiempo que también unas cuantas lágrimas comenzaban a brotar de sus ojos azul turquesa, los cuales eran muy similares a los de cierta princesa procedente del reino de Arendelle.

Natsu: Lamentamos haberte preocupado tanto, no era nuestra intención.

Juvia: Perdónanos.

Dijeron ambos jóvenes al momento de corresponder el fuerte y cariñoso abrazo.

Una vez que este mismo abrazo terminó en su totalidad, los tres jóvenes pertenecientes a Fairy tail decidieron ponerse rápidamente de pie, para una vez en esta simple posición adoptar de forma inmediata un semblante completamente serio.

Natsu: Dime...nos hemos perdido de mucho?.

Gaara: Mejor dicho, de que no se han perdido.

Durante los siguientes minutos transcurridos, el poseedor de la tierra se encargo de contarles todo lo sucedido desde que ellos dos habían quedado totalmente inconsciente, desde el regreso de Elsa como el quinto espíritu, hasta la resurrección del joven pelinegro llamado Sasuke, algo que a su vez provocó una enorme sorpresa por parte de los dos recién despiertos espíritus elementales.

Juvia: Sa...Sasuke ha vuelto, pero...como?.

Mencionó la peliazul con una mirada incrédula.

Gaara: Digamos que ni yo mismo lo sé, pero él prometió que me contaría absolutamente todo cuando este gran asunto terminará.

Comentó el pelirrojo mientras brindaba una ligera sonrisa.

Natsu: Entonces no hay tiempo que perder, necesitamos regresar al campo de batalla.

Pronunció el pelirosa al momento de comenzar a crear pequeñas llamas en ambas manos como forma de motivación.

Gaara: Están seguros, no quiero obligarlos a regresar a ese terrible lugar.

Al escuchar con claridad estas tristes palabras, Juvia simplemente caminó hasta posarse justo en frente de su querido compañero de cabello rojo, para después solo colocar una de sus manos con suma suavidad sobre el hombro de Gaara.

Juvia: Tenemos que hacerlo, es nuestro deber como parte de los nuevos espíritus guardianes.

Gaara: Lo se...pero estuve a punto de perderlos, no quiero que eso suceda de nuevo.

Dijo al bajar levemente su mirada.

Natsu: Juvia tienen toda la razón, aunque nos cueste la vida...tenemos que proteger al mundo de ese maldito demonio.

Hablo el pelirosa al acercarse de igual manera a su amigo de ojeras negras.

Por su parte, el joven pelirrojo pudo ver notoriamente la clara confianza en el rostro de sus dos compañeros, así que ahora contando con una mirada totalmente positiva solo mencionó.

Gaara: Entonces...que estamos esperando.

Con esta escena completamente terminada, los tres jóvenes elementales comenzaron a caminar para poder salir de la pequeña cueva en la que se encontraban, aunque antes de que la peliazul lograra salir por completo, Natsu tomó con suma suavidad una de las manos de esta misma, provocando con esto que Juvia mirará de forma inmediata al poseedor del elemento fuego.

Natsu: Te prometo que cuando todo este terrible asunto termine, te daré una respuesta.

Le dijo Natsu mientras le regalaba una gran sonrisa.

Juvia: Descuida, ya tendremos mucho tiempo para poder hablar de eso.

Respondió la peliazul con una mirada sumamente tranquila.

Sin nada más que decir, los dos espíritus salieron inmediatamente de la oscura cueva, donde en estos momentos Gaara solamente los esperaba pacíficamente, para una vez todos afuera comenzar a correr a gran velocidad hacia las profundidades del terrorífico y lúgubre bosque de las tinieblas.

Natsu: ( Orochimaru...yo se como derrotarte ).

Pensó el pelirosa mientras continuaba corriendo entre la espesa oscuridad del bosque junto a sus dos queridos compañeros.

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