Capitulo 8: Parque

Al instante, me puse de pie y me fui al baño para darme una ducha rápida. 

Pasan varios minutos y salgo para tomar mi toalla y salir con esta.

En el proceso me encuentro con Maximiliano quien al instante pasa sus ojos por todo mi cuerpo sin descaro alguno.

—¿Acaso ya terminaste de follarme con tus ojos? — pregunto sarcásticamente para pasar hacia mi habitación cuando me toma de la muñeca

—No estas haciendo nada de esto fácil para mi.  Sabes que te deseo, ¿y te atreves a salir casi desnuda con solo una toalla? — me pregunta para después negar con una sonrisa traviesa 

—No es mi culpa que haya olvidado mi ropa, asi que con el permiso, que voy a pasar — intento salirme de su agarre y me voy hacia mi habitación 

—¿A dónde vas? — pregunta antes de que pueda poner una mano encima de la cerradura de mi puerta

—A ti no te tiene porque interesar eso — murmuro entrando 

¿Por qué lo deseaba a él? Lo trataba muy mal y era porque no quería nada con él por mi hermana, pero si no fuera por ella, muy bien sabría que buscaría una manera de repetir todo lo que había sucedido la noche en que lo “conocí”.

Me pongo mi ropa interior para después buscar en mi closet una simple camisa y un par de pantalones.

En realidad no me gustaba mucho el maquillaje asi que me decidí por dejar mi cara como estaba. Arreglé un poco mi pelo dejándolo suelto en sus ondas.

Tomé mi teléfono junto con mi cara y mi cartera. Me fui de mi habitación dirigiéndome hacia la entrada de la casa ignorándolos a todos.

Abro la puerta y me dirijo hacia mi auto.

***

Llego a la casa de Noah y toco la bocina junto con un mensaje para avisarle que ya estaba afuera de su casa.

Me pongo a esperar varios segundos cuando lo veo saliendo por la puerta vistiendo él casualmente con una camisa sencilla, unos pantalones y unos simples tenis.

Él abre la puerta de mi auto y se monta con una sonrisa.

—Hola —dice él al cerrar la puerta

—Hola, ¿qué tal todo? — pregunto con amabilidad comenzando a conducir

—Todo normal, ¿y tú? — contesta mirando por la ventana 

—Diría que todo bien también —miento, Noah era un extraño y honestamente, no creo que le interesaría mi vida personal 

—¿A donde vamos? — menciona después de algunos minutos de silencio

—¿Alguna vez has ido a uno de los parques de Disney? — pregunto con una semi sonrisa 

—Jamás y he vivido toda mi vida aquí — admite con un poco de vergüenza

—Pues es tu día de suerte porque tengo un amigo que trabaja allí y nos puede dejar entrar gratis — explico

Uno de mis compañeros del club, trabaja en Disney aparte de allí, imagino que si descubrieran su otro trabajo probablemente no lo tendrían más allí.

—¿Prendo la música? — interrumpo el silencio

—Si deseas, claro — simplemente contesta 

Enciendo la radio y una canción por la banda The Neighbourhood comienza a sonar. 

—¿Cuantos años tienes? — me pregunta con interés

—Tengo veintidós, ¿Qué tal tu? 

—Lo mismo — ríe levemente 

Noah era un chico tierno pero atractivo a la vez. Si no estuviera tan enrollada con Maximiliano, probablemente me gustara él ya que se ve que es un chico muy bueno.

***

Llegamos al parque y en el estacionamiento me reúno con Elliot, el chico que me ayudaría a entrar gratis. 

Él nos dirige hacia la entrada del parque y nos da dos de sus tarjetas para pasar como “boleto” de entrada. 

Tanto como Noah y yo, dejamos que la señora escánee las tarjetas y después Elliot.

Al entrar, le devolvemos las tarjetas.

—Buenos chicos que tengan un buen día y para ti Camila, nos vemos el lunes — me sonríe con amabilidad y se va 

—¿A donde quisieras ir primero? — miro a Noah quien mira a todos lados con atención y como si fuera un niño pequeño

—No sé, es mi primera vez aquí — ríe levemente

—Ven — lo tomo de la mano para tomar un mapa del lugar y pasar hacia adentro completamente dirigiéndome hacia donde está el gran castillo

Noah se queda callado siguiéndome mientras que pasamos por entre las personas. Lo pongo lo más cerca del castillo que puedo y tomo mi cámara en el plano ancho de manera que todo se vea.