Al pasar al otro lado, era como si hubieran transcurrido varias horas en la nave viajando sin dame cuenta, este mundo era GENESIS, una nueva oportunidad de vida para mí, llegue alrededor de las 6:30 de la tarde, todo se veía oscuro, todo era tierra húmeda y plantas, no habían estrellas en el cielo, solo nubes oscuras y densas que parecía fuera a llover, algo se movía entre la maleza, sentía una mirada extraña:
En un instante, una especie de mutante salto sobre mí, tenía los ojos negros y los dientes salidos, no tenía labios, no tenía cabello, tenía una apariencia como si el cerebro se le hubiera salido, era una criatura nunca antes vista, me había quedado petrificada, reaccioné cuando ya estaba encima de mí, yo trataba de defenderme para sacarla de encima, tenía rapidez para moverme y luchar sin ni siquiera saber que era capaz de eso, era mi instintito de supervivencia creo yo, terminé botando a la criatura a la maleza con un fuerte golpe, al voltear me veo rodeada por varios de ellos, cada uno con diferentes malformaciones, con garras y colmillos, me sentía perdida..
Rápidamente trate de correr y huir del lugar, las bestias corrían también a gran velocidad, uno a uno fueron cayendo no sabía cómo o porque, ¿de dónde vinieron esos tiros certeros que salvaron mi vida?, delante de mi apareció un mujer con el mismo traje que yo, traía una ballesta, poco después apareció un joven a su lado gritando.
Corrimos un poco, Mat tenía una gran destreza y saltaba entre la maleza abriéndonos el camino, tenía el cabello despeinado dándole un toque salvaje, el negro azabache de sus mechones daban un brillo medio azulado, sus ojos eran negros, su tez bronceada y cuerpo bien trabajado, el traje que llevábamos era pegado al cuerpo, haciendo notar su buen estado físico, aparentaba unos 30 años.
Laura cargaba mi maleta y corría muy rápidamente, mientras yo trataba de seguirles el paso, ella era de tez oscura pero con rasgos finos, cabello negro ondeado y ojos café, cuerpo esbelto, era toda una diosa de ébano.
Llegamos a un lugar bien iluminado por reflectores grandes, entramos a esa casa y bajamos a un sótano, habían 5 personas más 3 hombres y dos mujeres, Laura se dirigió a mí
Me quede sorprendida ante sus palabras, decía lo mismo que Carlos me había dicho antes de irme… una nueva vida… un mundo paralelo … no podía ser cierto, no podía haber tanta maldad en Carlos, algo no estaba bien…
Solo asentaron la cabeza en modo de saludo, Randy era muy amable, tenía el cabello rapado con ojos verdes, me dijo que podía dormir un rato pues ellos se turnarían de guardia, le pregunte cuando salen esas criaturas y cuando se ocultan me dijo que todo cambiaba a la puesta del sol, cuando el sol se ocultaba estas criaturas salían a buscar alimentarse con algún incauto que este a la vista, todo era como una selva desierta…
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Editado: 08.05.2020