Guardianas del Bosque

Capítulo 8

 

Seguimos caminando en un agradable silencio y acompañados por los sonidos del bosque los cuales juntos a los árboles, las flores y los rayos del sol que se cuelan entre las plantas, hacen de este bosque un lugar mágico. 

Luego de unos minutos de observar el camino este se me hace vagamente familiar, trato de buscar en mi mente pero no logro encontrar nada, hasta que observo unas marcas casi imperceptibles en un árbol, de inmediato corro hasta él  ignorando los gritos de Leo, cuando llego noto que tiene unos nombres escritos, al verlos me sorprendo y a mi mente comienzan a llegar pequeños fragmentos desordenados de mi niñez pero hay uno que se abre paso entre los demás y es del momento en que escribimos nuestros nombres aquí.

 

Flashback 

Una pequeña Madison de 5 años sale corriendo de la casa y entra al bosque deprisa mientras sigue una pequeña luz que vuela entre los árboles, su hermano al ver esto decide seguirla en contra de su voluntad pues aunque él no comparte la locura de su hermana para él lo más importante es cuidar a su compañera de aventuras.

De repente la pequeña se detiene al notar que había perdido a la lucesita voladora como ella le había apodado, segundos después llega su hermano junto a ella muy enojado.

_¿Qué te pasa?, ¿ por qué corres así?

_Es que ví a la lucecita voladora otra vez, pero se me escapó.

_ Aja 

_ No me crees _ le dice la pequeña triste.

_ Es que no entiendo porque eres la única que puede verla _ responde él con más calma 

_Si estas ciego como la vas a ver _  su hermano desconcertado por sus palabras decide dejar las cosas ahí _ ¿Sabes como regresar?

_ No y tú  _ le responde la niña por lo que su hermano la mira mal.

De pronto sale de entre los árboles una chica quien los mira con una sonrisa.

_ Hola 

_ Vic _ gritan los niños felices y al unísono.

_ Vengan que quiero mostrarles algo _sin replicar ambos niños siguen a su amiga hasta un hermoso río que sigue su curso hasta las profundidades del bosque.

Los niños emocionados comienzan a jugar con su amiga hasta que se les hace tarde y su amiga decide regresarlos a casa.

_ ¿Volveremos? _ dice Madi

_Solo si ustedes quieren 

_ En ese caso si queremos _ responde la pequeña emocionada

_¿Cómo podemos volver?_ le pregunta ahora Ethan.

La chica ya conociendo lo insistentes que pueden ser esos niños suspira mientras piensa en cómo puede explicarles el camino.

_ Ven este árbol _ ambos niños asienten _ ese será nuestro punto medio.

_ Y como sabremos cual es si todos son iguales _ dice Ethan

_ Eso se resuelve fácil _ dice la chica mientras con una roca escribe su nombre en el árbol y le pasa la roca a los niños para que hagan lo mismo _ Bien, lo único que tienen que hacer es entrar al bosque por la parte que lo hicieron, seguirán caminando derecho hasta este árbol, ya a partir de aquí saben cómo seguir hasta el río.

Tras esta explicación la chica lleva a ambos niños a casa.

Fin del Flashback

 

Al recordar eso, sigo el camino a partir del árbol hasta llegar al río, una vez aquí observo lo hermoso que es, no ha cambiado nada.

_ Sabías de la existencia de este río _ digo a escuchar los pasos apresurados de Leo.

_Sí_ responde este agitado _ porque corriste así, pudiste haberte perdido y….

_ ¿Quién es Vic? _ lo interrumpo a lo que él se tensa 

_ No lo sé, ¿porque la pregunta?

_ No, por nada _ Tras su respuesta es más que claro que miente; sin embargo, de momento dejaré las cosas así.

_ Entonces vámonos.

Regresamos nuestros pasos hasta llegar hasta donde nos habíamos quedado, cada vez entramos más profundo en el bosque. Después de unos minutos caminando, mi acompañante se para y me señala la copa de un árbol. En lo alto de este se ve una pequeña casa del árbol hecha de madera, Leo me ayuda a subir por la escalera hasta llegar arriba, una vez dentro noto que no tiene muchas cosas dentro pero si una vista increíble del bosque.

_Esta casa la construyó tu abuelo y mi papá cuando era más joven, desde que se de su existencia siempre vengo aquí, es un lugar muy tranquilo y tiene una vista hermosa del bosque.

_Así que aquí era que venías siempre _ susurro.

_¿Qué dijiste?.

_No, nada y esas pinturas.

_Ah_ El sonríe nervioso_ Yo las hice.

_Están muy bonitas.

_Gracias, supongo

_Lo digo enserio eres muy talentoso.

_Quiere que te haga un retrato.

_Jajaja como el de Rose DeWitt Bukater.

_¿Qué?

_No nada 

Mientras observo sus pinturas, escucho como una bandada de aves salen volando alborotadas y pasan por encima de la casita, observó a Leo y este me dice que me quede aquí mientras él baja a ver qué pasa. Luego de unos minutos en que todo está en silencio y Leo no vuelve me armo de valor y decido bajar a ver qué pasaba, con los nervios a flor de piel  camino durante un rato sin encontrar rastro de Leo.

 Ya cansada decidí ir a la casa del árbol pero; ¿dónde era que estaba?, desesperada comienzo a buscar en mi memoria algún rastro o pista que me indiquen algo; sin embargo, no recuerdo ni reconozco nada. Esto me pasa por no seguir órdenes, ahora voy a morir de hambre en este estupido bosque y luego una manada de lobos se comerán mis restos y así acabará mi triste vida, sin ningún logro y sin ninguna meta por cumplir.

 

_Vaya, vaya pero mira nada más a quien tenemos aquí.

 

Al escuchar esa voz me giro de inmediato y observo a unos metros de mi  a un hombre alto y corpulento, esta vestido de negro y usa un paño el cual le tapa de la nariz para abajo, siendo sus ojos lo único que se puede ver, y en estos solo hay burla.



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En el texto hay: hadas romance aventura secretos

Editado: 04.07.2023

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